Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL

Versión estenográfica de la conferencia de prensa de los senadores Hilda Flores Escalera, Roberto Gil Zuarth, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República y Fernando Landeros, presidente de la Fundación Teletón

Versión estenográfica de la conferencia de prensa de los senadores Hilda Flores Escalera, Roberto Gil Zuarth, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República y Fernando Landeros, presidente de la Fundación Teletón.

Leer más...

Intervención del presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Roberto Gil Zuarth, durante la conferencia para presentar la iniciativa para reforzar la protección y los derechos de las personas con discapacidad

Intervención del presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, Roberto Gil Zuarth, durante la conferencia para presentar la iniciativa para reforzar la protección y los derechos de las personas con discapacidad.

Leer más...

Versión estenográfica del lanzamiento del Programa “Senado Joven”, encabezado por el presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, senador Roberto Gil

Versión estenográfica del lanzamiento del Programa “Senado Joven”, encabezado por el presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, senador Roberto Gil Zuarth.

Versión estenográfica del lanzamiento del Programa “Senado Joven”, encabezado por el presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, senador Roberto Gil Zuarth.

PRESENTADORA: Muy buenos días tengan todas y todos ustedes. Bienvenidos a la puesta en marcha del Programa Senado Joven; un proyecto especialmente diseñado para que todas y todos ustedes conozcan lo que se hace en esta, que hoy es su casa: la Cámara de Senadores.

 

¿Qué se hace en el Poder Legislativo? ¿Cuáles son los temas que preocupan a millones de jóvenes en el mundo? ¿Cómo mirar las reformas estructurales?

 

Estas son algunas de las inquietudes que a lo largo de seis días de trabajo ustedes podrán conocer, en voz de sus protagonistas: senadoras, senadores y directivos de este órgano legislativo.

 

Para dar inicio a este programa, saludamos a nuestro presídium:

 

Senador Roberto Gil Zuarth, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República.

 

Anuar Dáger Granja, director general del Centro de Capacitación y Formación Permanente del Senado de la República.

 

También nos acompaña Paola García Pensamiento, estudiante de la carrera de Relaciones Internacionales en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.

 

Y también está con nosotros Juan Armando Bonilla Nader, egresado de la Carrera en Ciencias de la Comunicación por la Universidad del Valle de México.

 

A todos ustedes, muchas gracias por su presencia.

 

Para dar la bienvenida a este encuentro, tiene la palabra Anuar Dáger Granja.

 

ANUAR DÁGER GRANJA: Muy buenos días a todos. Saludamos y celebramos que el presidente del Senado, el senador Roberto Gil Zuarth, esté con nosotros, que esté con ustedes, jóvenes, en este importante día.

 

Estar en el Senado de la República es un orgullo para todos los que trabajamos aquí. En el Senado, todos los días se trabaja por México, para ustedes, para cada una de las jóvenes y cada uno de los jóvenes que están en las aulas estudiando y haciendo un esfuerzo por concluir su carrera profesional.

 

Es por ello que la Mesa Directiva, que preside el senador Roberto Gil, ha diseñado durante mucho tiempo este programa pensando en ustedes. El Centro de Capacitación y Formación Permanente, la Secretaría General de Servicios Administrativos, la Dirección General de Recursos Humanos y en especial, un grupo encabezado por el secretario técnico de la Mesa Directiva; hemos hecho un esfuerzo por cumplir esta aspiración del Senado.

 

El Senado Joven es un Programa en el que van a poder reconocer la importancia de las reformas legislativas, lo arduo que es el trabajo del proceso legislativo, cómo se organiza la Cámara de Senadores para cumplir con sus objetivos desde el punto de vista estructural y administrativo; y lo más importante que quiero resaltar es que todas estas pláticas, estas conferencias las han preparado senadoras y senadores para ustedes.

 

Especialmente, el Senado cree en la educación, en la capacitación, en el fortalecimiento de las competencias; esas competencias que están enmarcadas internacionalmente para cada uno de los que aspira a obtener un trabajo, sí; pero que se complementan con información del día a día, de los retos que enfrenta el país, de los retos en los que el Senado trabaja constantemente para darles resultados a los ciudadanos; y en la información que las mexicanas y los mexicanos deben conocer de cómo se organiza normativamente este importante país, que es el nuestro.

 

Nos sumamos con mucho entusiasmo. Este programa es un proceso en el que ustedes inician el día de hoy, pero que va a continuar durante seis días y, repito, es para ustedes, es de ustedes y lo ha promovido especialmente el senador Roberto Gil.

 

Quienes integramos el Senado estaremos atendiéndoles, esperando cumplir las expectativas de organización, pero sobre todo que al terminar el Senado Joven ustedes crean un poco más en México. Crean que los órganos legislativos y los órganos políticos están haciendo algo por su presente y por su futuro.

 

Muchísimas gracias por su presencia.

 

Senador Roberto Gil, gracias por creer en este programa y gracias a ustedes por participar. Muy buen día.

 

Le pediremos al senador Roberto Gil que inicie este diálogo.

 

Antes nos van a comentar su currículum.

 

PRESENTADORA: Pues muchas gracias al Director General del Centro de Capacitación y Formación Permanente.

 

En esta LXIII Legislatura, la presidencia de la Mesa Directiva está encabezada por el senador de la fracción panista, Roberto Gil Zuarth, y vamos a conocer un poco más cuál es su trayectoria.

 

Roberto Gil es abogado por el ITAM. Se tituló de maestro y cursó los estudios de doctorado en la misma disciplina en la Universidad Carlos III de Madrid.

 

Durante su estancia en Madrid, también tomó distintos diplomados en el Centro de Estudios Políticos y Constitucionales.

 

Roberto Gil ha ocupado diversas posiciones en el servicio público, incluyendo la representación del Partido Acción Nacional frente al Instituto Federal Electoral.

 

En la Cámara de Diputados, como secretario técnico de la Mesa Directiva y como diputado federal.

 

Se desempeñó como coordinador de asesores del Secretario de la Función Pública y fue Subsecretario de Gobierno en la Secretaría de Gobernación.

 

También fue secretario particular del Presidente Felipe Calderón Hinojosa y actualmente es senador de la República.

 

Antes de presidir la Mesa Directiva del Senado, fue presidente de la Comisión de Justicia.

 

El senador Gil también ha sido asesor externo de organismos internacionales, articulista del periódico Excélsior y docente.

 

Hoy, él está aquí para lanzar este programa y con ello conectar a la juventud con el Senado.

 

Escuchemos las palabras del presidente de la Mesa Directiva, Roberto Gil Zuarth.

 

SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Muy buenos días tengan todos ustedes. Muchas gracias por acompañarnos esta mañana en el lanzamiento de un programa verdaderamente importante que a mí en lo personal me entusiasma mucho.

 

Yo entré a la Cámara de los Diputados como pasante. Trabajaba en aquella época en la fracción parlamentaria de Acción Nacional. Me pagaban creo que mil pesos al mes. Estudiaba y trabajaba al mismo tiempo.

 

Y ahí conocí la Cámara de los Diputados, pero también conocí la política y la política legislativa y me interesé en ella.

 

La verdad es que no estaba entre mis planes dedicarme a la política. Quería ser abogado, me quería especializar en la academia, quería ser investigador en aquella época.

 

Pero cuando tuve la oportunidad de conocer la política en vivo y en directo, la política de manera cercana, no solamente me entusiasmé de ella sino también decidí hacerla la tarea principal de mi vida, el horizonte profesional en el que iba a forjar mi propio destino.

 

Por eso, cuando conocí por parte de Anuar y de las áreas de servicios administrativos de la existencia de una fuerte presencia de jóvenes que están haciendo su servicio social, de jóvenes que están estudiando y trabajando al mismo tiempo, de jóvenes que hacen sus prácticas profesionales en la Cámara de Senadores, pues diseñamos este ejercicio que tiene básicamente dos propósitos:

 

El primero es ayudarles a que su educación sea más pertinente. ¿Qué significa esto? Vincular a sus trabajos educativos, a sus esfuerzos educativos, a su preparación educativa, vincularla con una experiencia profesional directa, que genere una mejor comprensión de los problemas, pero que también que les permita dotarse de otras habilidades, de otras competencias, de otras destrezas.

 

De tal suerte que cuando ustedes abandonen la universidad, cuando terminen sus estudios tengan ya experiencia que pueda acreditarse y sobre todo, que implique valor para todos ustedes.

 

Hoy en día en el mercado laboral se exige experiencia previa y es un elemento importante en su currícula, es un elemento importante en su trayectoria profesional y, sin lugar a dudas, puede ser la mejor condición para acceder a un empleo mejor pagado, a un empleo mejor remunerado, a un mejor empleo para todos.

 

En segundo lugar, el segundo objetivo, además de la capacidad de poder forjarse, de estudiar, de manera complementaria a lo que reciben en la universidad, que conozcan el Senado y que conozcan las funciones legislativas, que conozcan un poco más sobre la teoría política, sobre la teoría del parlamento.

 

El segundo objetivo es también que ustedes puedan aprovechar su presencia, su estancia en el Senado de la República y eventualmente que ustedes sean parte del equipo que trabaja en el Senado de la República, que tengan la oportunidad de no solamente estar aquí durante su servicio social, sino que tengan la posibilidad de trabajar después en una comisión, ser un secretario técnico una secretaría técnica, que puedan involucrarse en las áreas parlamentarias, en las áreas administrativas, que tengan desde el Senado de la República un horizonte profesional, la posibilidad de emplearse aquí, en el senado.

 

Porque la profesionalización de los servicios técnicos es una condición fundamental para el fortalecimiento del Poder Legislativo. Tenemos un parlamento fuerte, en términos de competencias, de facultades, un parlamento fuerte en términos de pluralidad, un parlamento que no solamente hace leyes, sino también controla al poder, que es un contrapeso efectivo al poder.

 

Pero también es cierto que es un parlamento relativamente débil por la profesionalización, tanto de sus legisladores como del cuerpo técnico. El principio de no reelección, que ustedes saben que ya lo eliminamos, que ya habrá la posibilidad que los legisladores puedan reelegirse, ha hecho que el parlamento esté constantemente cambiando de integrantes y, en consecuencia, que no se pueda profesionalizar la función legislativa.

 

Uno de los argumentos centrales para permitir la reelección legislativa tiene que ver justamente con la profesionalización del trabajo político. Hace unos años, cuando impulsábamos la reelección legislativa, llegó una organización de la sociedad civil que estaba apoyando fuertemente este movimiento, este cambio constitucional, y lo explicaba de la siguiente manera.

 

Miren, lo que pasa con un parlamento que no se reelige es que el primer año el legislador, el diputado federal llega, se ubica, conoce el parlamento, empieza a conocer donde están las comisiones, se empieza  a involucrar en los asuntos.

 

El segundo año ya empezó a trabajar intensamente, ya conoce las agendas, ya estableció dialogo con las organizaciones de la sociedad civil, ya tiene una mejor comprensión de los temas, está trabajando intensamente y el tercer año ya prácticamente está buscando a dónde va a seguir su carrera política.

 

Y esta ruptura institucional de tres o seis años es una de las causas de que en nuestros parlamentos no exista continuidad en el trabajo legislativo, que no exista horizonte de largo plazo en el trabajo legislativo.

 

Yo creo que el complemento fundamental de ese fortalecimiento institucional que va a ir de la mano de la posibilidad de que los legisladores puedan reelegirse pero sobre todo que los ciudadanos decidan si un legislador sigue o no sigue su carrera parlamentaria, tiene que ver con la profesionalización de los cuerpos técnicos.

 

En nuestro Parlamento no existe servicio profesional de carrera como sí existe en la mayor parte de los parlamentos del mundo.

 

Un servicio profesional que sea ajeno a la política, donde eventualmente los legisladores podrán irse o quedarse pero los funcionarios son siempre los mismos.

 

Tienen incentivos claros y estables para hacer mejor su trabajo y son la garantía de continuidad institucional en el Parlamento.

 

La profesionalización es uno de los objetivos, uno de los retos de los desafíos que tiene el Parlamento Mexicano para fortalecerse.

 

Y en consecuencia, yo le he pedido a Anuar que haga un esfuerzo muy importante para ir fortaleciendo nuestras áreas técnicas y ustedes van a ser, permítanme la expresión, nuestro primer esfuerzo para este objetivo y este propósito.

 

Qué queremos: queremos que ustedes conozcan más y mejor del Congreso, que conozcan más y mejor de lo que hacemos aquí, que conozcan más y mejor de lo que hemos aprobado recientemente, de las Reformas Estructurales, de los últimos cambios legales que hemos hecho, que los conozcan de manera directa.

 

Que conozcan esos cambios y esas decisiones de sus protagonistas.

 

Que los legisladores les vengan a ustedes a explicar, a exponerles qué está detrás, por ejemplo, de la Reforma Educativa; qué está detrás de la Reforma energética; qué significan las zonas económicas especiales; qué significa la Reforma en materia de Corrupción y en materia de Transparencia.

 

De tal suerte que no solamente ustedes conozcan las nuevas realidades jurídicas, normativas desde sus textos, sino también las conozcan desde los testimonios que llevaron a construir esas decisiones.

 

Y sobre todo también que puedan ustedes formarse en el Parlamento.

 

No sé cuántos de ustedes tienen interés en dedicarse a la política. Cuántos de ustedes quieren dedicarse a la política.

 

Me van a decir que qué mala pregunta, pues qué cree que estamos haciendo aquí, ¿verdad? Bueno.

 

Una de las cosas fundamentales en la política parece que es una tarea simplemente de militar en un Partido o de decidir, o proponerse hacer política.

 

Pero la política requiere conocimiento de los temas, requiere mucho estudio y mucha preparación.

 

Aquí decidimos sobre la vida de las personas, amigas y amigos. Decidimos sobre sus libertades, sobre su salud, sobre su futuro.

 

En las manos de los políticos está, en buena medida, la convivencia de las personas y también la posibilidad de que puedan salir adelante.

 

Somos como los doctores en buena medida. Un doctor da una prescripción, da una receta médica a partir de un diagnóstico para cuidar una enfermedad y si ese doctor es bueno, esa enfermedad se va curar, y esa persona, y ese paciente va a lograr superar su enfermedad.

 

Pues así somos los políticos en buena medida. Decidimos, tenemos una enorme responsabilidad. Decidimos sobre la vida, sobre la libertad, sobre la educación, sobre la salud de las personas.

 

Y en consecuencia, debe tomarse con muchísimas seriedad y con mucha responsabilidad.

 

No se vale en política improvisar, no se vale en política simplemente levantar el dedo, ver hacia dónde va, o sentir hacia dónde va el aire y decidir hacia ese lado.

 

A veces hay que tomar decisiones muy difíciles, impopulares, decisiones que no se comprenden en un contexto histórico o un contexto determinado, pero que son las decisiones correctas, las que está pidiendo el país, la que conviene para las próximas generaciones.

 

Y por eso amigas y amigos, ustedes tienen que prepararse constantemente, para ser mejores profesionistas, pero también para hacer mejor política.

 

Y de eso se trata en buena medida este programa: que ustedes tengan la posibilidad de enriquecer sus conocimientos, de conocer de manera directa los temas y sobre todo platicar, conversar, prestar testimonio directo de quienes han sido los constructores de esas decisiones.

 

Ustedes son privilegiados amigas y amigos, muy privilegiados por trabajar en el Senado de la República, por tener la oportunidad de estar aquí. No muchos jóvenes tienen esa oportunidad.

 

Deben aprovechar, la deben aprovechar muy intensamente, no solamente aprovechando esos espacios de formación, esos espacios de conocimiento, esos espacios de información, sino también aprovechar la oportunidad.

 

La oportunidad de trabajar en el Senado, de seguir aquí en el Senado, de asumir eventualmente mayores responsabilidades, de hacer una carrera parlamentaria: algunos serán legisladores, otros serán funcionarios técnicos, pero tener claro que desde aquí se puede construir no solamente una carrera profesional, una vida digna, sino también se pueden construir muchos bienes públicos para nuestra sociedad.

La condición, la garantía de una carrera profesional únicamente va a depender de su esfuerzo. Ustedes deciden cuánto van a lograr y qué quieren lograr, nadie más que ustedes; ustedes son arquitectos de su propia historia y en consecuencia, tienen que tomar todos los días las decisiones para construir ese destino y ese futuro.

 

El Senado les da una oportunidad: aprovéchenla, aprovéchenla con mucho entusiasmo, con mucha dedicación, con mucha responsabilidad. Yo quiero al paso de los años verlos aquí y que hoy son asistentes, asesores, hoy están trabajando en alguna comisión, que el próximo año que nos veamos me digan: “ya soy secretario técnico”, “ya tengo mi puesto en esta comisión”, “ya estoy a tiempo completo trabajando en el Senado”, “ya voy a ser subdirector del área de Capacitación”, en fin; que tengan siempre una meta y que esa meta la vayan logrando.

 

Miren, chavos, el futuro del país está en sus jóvenes; pero también el mayor desafío de nuestra generación es crearle oportunidades a los jóvenes. Hay muchos muchachos que hoy están en la escuela, que saldrán de la Universidad y que no tienen certeza de qué seguirá para ellos. Hay muchos jóvenes que ni siquiera tienen la oportunidad de ir a la escuela, niñas que son violentadas todos los días, entre otras razones porque no les permiten ir a la escuela; que no les permiten tener un trabajo, un empleo; niñas y niños que son capturados por el crimen organizado en distintos lugares de nuestro país; niñas y niños que no tienen la oportunidad de salir adelante porque no tienen un entorno de amor y solidaridad que los cuide, que los informe, que los eduque.

 

Y la responsabilidad de abrirles oportunidades a esos niños y a esas niñas es de nosotros, así, en plural, de ustedes y mía; de quienes hacemos política activa, de quienes hoy estamos en la responsabilidad de legislar o de estar en el Gobierno y de quienes vienen detrás de nosotros, formándose y que van a ocupar el lugar que hoy nosotros tenemos.

 

El futuro de este país va a depender de las oportunidades que les abramos a nuestros jóvenes, de las oportunidades que les generemos a nuestros niños y a nuestras niñas; de las oportunidades de empleo, de educación, de libertad, de vida digna, de la posibilidad de que cada niño y cada niña en nuestro país pueda definir su propio plan de vida y lo pueda llevar a cabo; y que el Estado, la sociedad le de esos pequeños empujones para que vayan logrando sus metas; que le dé salud, que le dé educación, que le dé servicios públicos, que te permita vivir en libertad, salir con tranquilidad a la calle, vivir en un país ordenado, con paz y con seguridad.

 

Ese es el reto de todos nosotros, es el reto que los tiene a muchos de ustedes aquí. Nunca pierdan, nunca pierdan la inspiración de lo que van a hacer en su vida; nunca pierdan la inspiración de lo que significa la política. La política no es grilla, no es un privilegio, no es un cargo público, no es un sueldo, no es poder: es la posibilidad de transformar la vida de muchos, es la responsabilidad de decidir a cuenta y a nombre de otros; por eso debe tener una inspiración, una inspiración que los levante todos los días por la mañana y que los lleve a su trabajo y digan: “yo quiero hoy contribuir con un poquito de mi esfuerzo a cambiar la historia de mi comunidad, de mi familia, de los que están cercanos a mí, pero también de los que no conozco y nunca he visto y que viven del otro lado del país.

 

Es la inspiración de la política lo que los debe de tener aquí sentados, la inspiración de tener un México mucho más justo, un México mucho más seguro, un México muchísimo más ordenado, un México en el que todos quepamos y que todos podamos convivir en paz.

 

Amigas y amigos, yo los animo a que esta oportunidad que hoy reciben de trabajar en el Senado la aprovechen al máximo, que cuiden mucho al Senado de la República, que se sientan muy orgullosos de trabajar en el Senado de la República.

 

Quiero pedirles que cada vez que les pregunten: “tú dónde trabajas” o “dónde estás haciendo tus prácticas profesionales” o “dónde quieres trabajar”; digan con mucho orgullo que en el Senado de la República, porque el Senado es una instancia fundamental, un espacio fundamental de nuestro país, uno de los poderes más importantes de nuestro país; pero también la casa desde la cual se construye el destino y el futuro de todos.

Siéntanse muy orgullosos de trabajar en el Senado de la República. Siéntanse muy orgullosos de ser parte de un equipo, y como un equipo –espero que no hablemos de la selección, porque estamos hoy muy enojados con el 7-0, ¿verdad? – pero siéntanse parte de un equipo.

 

En un equipo todos tenemos una parte de responsabilidad, un papel que jugar, un rol que tener y sobre todo un resultado que generar.

 

Los felicito, los animo, les agradezco por la intención y por el interés de estar con nosotros en este programa Senado Joven, que yo espero que llegue para quedarse; que no sea un esfuerzo nada más de esta administración, de este año, sino que sea un programa permanente y constante en el que los chavos que se acerquen al Senado de la República no solamente generen mejores competencias, se formen un poco más, sino también tengan la oportunidad de ser parte permanente del equipo del Senado de la República.

 

Así que, amigas y amigos, mucho éxito, mucho ánimo, y aquí nos seguiremos viendo, espero, en el futuro.

 

Muchas gracias a todos. Buen día.

 

PRESENTADORA: Muchas gracias al senador Roberto Gil por sus palabras.

 

Tenemos en estos asientos a dos jóvenes representantes de todos ustedes.

 

En estos momentos ellos son su voz para manifestar sus expectativas y dialogar acerca de sus inquietudes con los representantes del Senado aquí presentes.

 

Adelante.

 

PAOLA GARCÍA PENSAMIENTO: Bueno, pues buenos días. Mi nombre es Paola García Pensamiento.

 

Soy estudiante de la carrera de Relaciones Internacionales en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.

 

Yo me encuentro en la Comisión de Relaciones Exteriores Asia-Pacífico. Fue una experiencia sumamente interesante, sumamente enriquecedora para mi formación personal y también profesional.

 

Aprendí muchas cosas que creí que jamás aprendería o sucesos que jamás creí que me pasaran. Cosas tan simples como –y creo que a muchos de ustedes les ha pasado– contestar un teléfono. Ese hecho tan simple que parece que no es indispensable o importante en un trabajo o en un ambiente de oficina, pues resulta sumamente un reto.

 

Y también algo que aprendí mucho en el Senado es cómo conducirse en el ámbito profesional.

 

Ya no estamos jugando. Ya no somos parte de eso que decían muchos “Son ustedes, niños, el futuro de México”. Somos el presente y estamos siendo actores en menor o mayor medida de, en el caso donde yo estuve, la diplomacia parlamentaria.

 

Tuve la oportunidad de trabajar con el senador Teófilo Torres Corzo, y la verdad es que toda la actividad intensa que se realiza en esa comisión –y una compañera aquí no me dejará mentir– es muy intensa.

 

Se llevaron a cabo semanas culturales durante el trabajo legislativo pasado, que fueron muy enriquecedoras, pues hay un trabajo intenso del Senado de la República con las embajadas, que es lo que nos compete como internacionalistas, así como también la importancia del Senado de la ratificación de nombramientos diplomáticos, la aprobación de tratados internacionales que es de suma importancia el conocerlos, entenderlos y también saber cómo llegar con las personas.

 

Esa ha sido mi experiencia.

 

También altas, bajas, conocer a nuevas personas, nuevos ambientes, protocolos, cómo conducirse con las personas, cómo, no sé, simplemente llevar el trabajo día a día ha sido una experiencia bastante rica para mí, creo que también para todos nosotros, y ya no nos van a contar qué es lo que se hace en el Senado. Tenemos ya la experiencia de que una pequeña parte de qué es lo que hacen en el Senado.

 

Este programa creo que va a ser un programa muy intenso, muy interesante, pues conoceremos no solamente la parte que ya conocemos en nuestras respectivas áreas de trabajo, sino también el trabajo completo que hace el Senado de la República, pues muchas veces como mexicanos o como estudiantes adquirimos una noción de lo que se hace en el Senado.

 

Sabemos los poderes, las funciones, pero pocas veces como mexicanos o como estudiantes tenemos el conocimiento de realmente qué es lo que se hace, cómo se hace, por qué se hace y eso creo que es una de las cosas que más me he llevado del Senado, que más allá de escándalos políticos, de altas, bajas y críticas a la propia política mexicana, creo que también es como ser parte y entender la otra parte.

 

Entender el trabajo que hace el legislador día a día, el trabajo que no solamente hace el legislador, sino todas las personas que se encuentran tras ellas, quienes trabajan conjuntamente con ellas para poder llevar a cabo políticas, leyes.

 

Entonces, creo que sí, esa parte de conocer más allá de lo que se nos muestra, muchas veces en medios de comunicación y conocer realmente el trabajo que realizan miles de personas aquí que conocemos, que vamos a conocer durante seis meses y que después partimos, pero tenemos una gran experiencia y conocimiento de lo que se hace aquí, en la Cámara de Senadores y estoy muy agradecida por este programa.

 

ARMANDO BONILLA: Buenos días, mi nombre es Armando Bonilla, ya cumplí mi carrera en ciencias de la comunicación en UVM, sólo me falta lo que es mi servicio social.

 

Mi experiencia ha sido increíble, me han dado la oportunidad de formar parte del equipo; creo que no me siento como solamente ve a sacar copias o como muchos creen que es el servicio.


Me gusta mucho la parte, bueno, antes que nada yo estoy en Comunicación Social del Grupo Parlamentario del PAN, estoy como reportero, siempre estoy de ese lado donde están los compañeros.

 

Me gusta mucho porque llevas de la mano la información, armas un criterio bastante amplio, sobre todo en los temas que se están llevando en el país y como lo comentas tú, Gil, está muy padre, porque de que tú te informas, tomas tus propias decisiones, puedes construir algo muy fuerte y eso está muy padre, porque te hace crecer como persona, también te hace crecer laboralmente.

 

A mí en lo personal me gusta mucho la política, muchos dicen que es algo muy rutinario, pero yo digo que no, porque siempre tienes que estar leyendo, tienes que estar informando, tienes que estar en todo, nos e te puede ir nada.

 

Entonces, creo que mi experiencia, me han dado la oportunidad y muchas gracias a todos los que me han dado oportunidad, a los compañeros que me pongo a platicar con ellos y me dan tips o me dan cualquier información y entonces está muy padre porque hay que andar de aquí para allá corriendo.

 

Entonces, igual, gracias por invitarme a hablar, creo que esta jornada o estos talleres nos van a servir muchos, nos van a hacer crecer profesionalmente y en lo particular me llevo muchas cosas y muchas gracias.

 

SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Creo que este par de experiencias son la razón principal por la que estamos aquí.

 

¿Quién está de servicio social de ustedes? ¿Quiénes tienen ya un empleo, cargo o ya forman parte del Senado de manera? ¿Quién acaba de entrar? ¿Cuánto tiempo tienes?

 

Una semana.

 

¿En dónde estás trabajando?

 

En el centro de capacitación, una semana, la más joven de los jóvenes.

 

Ustedes saben que el trabajo del Senado es muy intenso, sobre todo en periodo de sesiones, que acabamos de concluir el periodo de sesiones extraordinarias.

 

Ahora comprendo por qué hacía énfasis Paola en la llama telefónica.

 

Siendo integrante de la Comisión Asia-Pacífico seguramente le hablaron en chino o en japonés, no entendía nada y por eso; en ruso.

 

Tenemos una altísima actividad en el Senado y cada área tiene su propia relevancia.

 

Hablaban hace un momento de diplomacia parlamentaria, que es una de las facultades que tiene el Senado de la República, que lo distingue de la Cámara de Diputados.

 

No solamente conducimos o controlamos la política exterior sino tenemos una intensísima presencia internacional en términos de diálogo con los parlamentos del mundo.

 

La parte de comunicación, sí, la comunicación social simplemente el Senado no explica lo que hacemos, no explica lo que pasa aquí, no pone en contexto y en perspectiva los debates, las agendas, las discusiones.

 

Y así cada una de las áreas que integran el Senado de la República tiene su especial relevancia, su especial implicación e importancia.

 

Tenemos muy buenos funcionarios en el Senado de la República, funcionarios que tienen mucho tiempo en el Senado, desde el doctor Garita, el Secretario de Servicios Administrativos; nuestros directores son personas muy comprometidos con el Senado de la República, algunos tienen más tiempo que otros.

 

Pero esa parte técnica es fundamental para que el Senado funcione bien, para que este Senado pueda tomar buenas decisiones.

 

A veces pensamos que lo más importante es lo que pasa en el Pleno, el debate o bien la votación.

 

Sin un trabajo técnico previo, sin la construcción de los dictámenes, sin las notas jurídicas o políticas que ustedes redactan, sin los cuadros comparativos, sin los textos revisados simplemente el Senado no podría tomar decisiones.

 

Y esa es la parte en la que ustedes van a aprender y se van a desarrollar, y eso es donde yo quiero insistirles en que aprovechen, aprovechen la oportunidad.

 

Miren: déjenme seguirles contando una parte, muy brevemente, de cómo entré yo a la Cámara de Diputados, al Parlamento. Pues miren:

 

Un día, yo trabajaba en el ITAM, era asistente de investigación de un profesor.

 

Tenía una militancia ya de mi partido. Mi mamá no me dejaba ir a los mítines del PAN porque decía que eso era cosa de grandes, pero me fugaba por las tardes. Me fugué a la campaña de Diego, y ahí andaba en las Juveniles de mi partido.

 

Pero ya tenía uno que ponerse a estudiar, a ser serio y no podía andar uno en esas cosas.

 

Y un día –yo trabajaba con el doctor José Ramón Cossío, hoy Ministro de la Corte, era su asistente de investigación-, y un día me mandó a entregar una nota, un estudio que el ITAM había hecho a la Cámara de Diputados sobre un debate que en ese momento existía.

 

La LVII Legislatura, 1997-2000, fue la primera legislatura sin mayoría de un partido político, fue la primera legislatura en la cual ningún partido tenía mayoría.

 

Y en consecuencia pues algunos mecanismos que antes funcionaban bajo la lógica de un partido mayoritaria, pues empezaron a estrujarse, empezaron a tener algunas complicaciones de interpretación.

 

En aquel momento la nota versaba sobre un juicio político que se había instaurado en aquella legislatura.

 

Entonces me mandó el doctor Cossío a entregar la nota jurídica, el estudio sobre un caso que se había presentado de un empate en la Comisión Jurisdiccional y la nota trataba de explicar cómo podían resolverse las implicaciones del empate en las Comisiones.

 

Imagínense, imagínense cómo estarían las cosas que no había una solución normativa, reglamentaria a un empate en las Comisiones, en las Comisiones Legislativas de la Cámara de Diputados.

 

Fui a entregarlo, me fui en Metro, llegué ahí a San Lázaro, me registré: “vengo a buscar a tal diputado. Vengo a entregarle la nota”, muy formal, llevaba mi acuse.

 

Y llego a la oficina del entonces líder del Congreso, el Coordinador Parlamentario de la Mayoría, el partido mayoritario en aquel momento, y voy y le entrego la nota.

 

Y me dice: “Tú qué haces aquí”.

 

No, pues vengo de parte del ITAM; el doctor Cossío, a entregarles esta nota y bueno: “siéntate”; y me senté y presencié un debate interesantísimo entre los legisladores, un debate a propósito del empate, un debate muy, muy interesante; y legisladores que con mucho conocimiento jurídico, político, se echaron un debate como de tres horas. Un debate duro, ríspido, yo decía: “estos se van a agarrar a golpes”.

Y saliendo de ahí, dije: “yo quiero trabajar aquí, yo quiero trabajar en la Cámara de Diputados”. Me regresé a mi cubículo en el ITAM, empecé a investigar por las páginas de internet y de repente veo un anuncio en el que decía: “¿Estás interesado en hacer tu servicio social en la Cámara de Diputados?”; y yo dije “Sí”. Y fui, me inscribí; en aquella época no te pagan nada por el servicio social, no sé si ahora; ¿ahora sí? ¡Qué bueno!, ya les hizo justicia la Revolución.

 

No te pagaban nada, nada más te acreditaban las horas y entonces me asignaron el servicio social a la Mesa Directiva, en primer lugar, y después yo pedí mi cambio al Grupo Parlamentario del PAN. Y en esa Legislatura fui secretario técnico del Grupo Parlamentario, luego fui secretario técnico de la Mesa Directiva; y ahí terminé ese paso por parte de la Cámara de Diputados.

 

Me encargaron redactar la nueva Ley Orgánica, estuve estudiando mucho para redactar la Ley Orgánica. Me encargaron redactar el Estatuto del Servicio Profesional, porque la idea era tener servicio de carrera; y me puse a estudiar como loco hasta que redacté el Estatuto. Me iba muy bien.

 

Me tardé un poco más en salir de la escuela, obviamente, porque tenía doble jornada y tomaba clases a las 7 de la mañana y a las 7 de la noche; pero a veces cuando llegaba la época del presupuesto, que eran obviamente sesiones nocturnas larguísimas, me desvelaba y al día siguiente a las 7 de la mañana clases, un día me quedé dormido y el profesor me regañó, y le dije: “Es que estoy en el presupuesto”; y me dijo: “tú ponte a estudiar en lugar de andar haciéndole al cuento”.

 

Yo me sentía muy importante, estoy en el presupuesto, este profesor no entiende nada, ¿por qué me regaña? Yo estoy aquí salvando a la patria. Y bueno, una cosa muy difícil.

 

Y en aquel momento ya tuve mi cargo formal, ya me pagaban un poquito más y de repente, se abre una oportunidad. Me gusta mucho contar esto, porque la verdad es que es muy formativo: se abre una oportunidad para un cargo, la Secretaría Técnica de la Mesa Directiva, porque quien estaba en la Mesa Directiva se va de candidato al estado de Guanajuato y deja la plaza.

 

En aquel entonces era un cargo que más o menos eran como 40 mil pesos, yo ganaba 2 mil 500 y ese cargo era de 40 mil, o sea, hagan la multiplicación; y además era un cargo con coche, le daban celular, yo dije: “ps este”.

 

El entonces presidente de la Cámara de Diputados me dice: “Oye, ¿te interesaría ser secretario técnico de la Mesa Directiva?”; dije: “¿Dónde firmo? Por supuesto que sí”. Me dice: “es que ya se va Humberto y entonces va a quedar vacante la plaza y ojalá te interese. Va a ser un esfuerzo mayor”; “No, yo le entro”; “Por supuesto que vas a tener que trabajar más duro, hay que ver lo de la escuela”, etcétera. Y de repente: “No, por supuesto, yo sí quiero”.

 

Me nombra y entonces voy a firmar mi contrato, y entonces llego, me siento con la directora del área de Recursos Humanos, de Personal de la Cámara de Diputados y veo mi contrato, y decía “8 mil pesos”; y dije: “¿cómo, cómo, cómo?”, si yo sabía que ganaba 40 mil; ¿y el coche? ¿Y el chofer? ¿Y el celular?

 

No, 8 mil, el presidente dio instrucciones de que ese fuera tu salario; “¿pero cómo? Hay un principio constitucional que dice a igual trabajo, igual salario, ¿por qué la rebaja?”. “No, fírmale o ve a hablar con él”.

 

Entonces fui a hablar con él, le dije: “Oiga, creo que hubo un error, ¿eh?”, a ver, cómo le explico, aquí dice 40 mil”.

 

Entonces llego y le digo: “Oiga, presidente, algo está raro. Fui a firmar mi contrato y dice 8 mil pesos” y me dijo: “Sí, yo di la instrucción”.

 

“¿Cómo?”. “Sí, yo di la instrucción de que te pagaran ocho mil pesos y no los 40 mil”. Y yo le decía: “A ver, no le estoy entendiendo”. Y me dijo: “Porque no te quiero echar a perder. Porque no quiero que el sueldo te cambie los incentivos de tu vida, que dejes la escuela, que te sientas autosuficiente, y no quiero que esta primera oportunidad laboral te eche a perder”.

 

Yo creo que, por supuesto, les confieso, me fui enojado, triste, porque la verdad es que uno se ponía unas friegas bastante pesadas, y me pareció en aquel momento una injusticia. Decía: “¿Por qué a un joven nada más por ser joven le pagan a uno menos, etcétera? ¿Por qué me va a echar a perder y tal?”. Pero es una de las cosas que más agradezco en la vida, a ese presidente que me dio la oportunidad pero también me obligó a jugármela y me obligó también a echarle un doble esfuerzo, a echarle más ganas, y que no fuera la principal motivación de esa primer oportunidad el sueldo.

 

La verdad es que lo comprendí mucho tiempo después; no lo entendí en aquel momento, pero si no hubiese hecho eso aquel presidente de la Cámara de Diputados, quién sabe dónde estaría yo.

 

Y, en efecto, el sueldo no me echó a perder, seguí estudiando y trabajando, me costaba mucho salir adelante y tenía una beca en el ITAM, una beca que me exigía mantener ciertos promedios. Pero si no hubiese sido por esa decisión que tomó aquel presidente, yo no sé si estaría hoy sentado con ustedes.

 

A lo que voy, chavos, es que en la vida uno se va enfrentando todos los días a retos.

 

Ustedes se van a enfrentar todos los días a retos, pero siempre piensen, siempre tengan en la cabeza dónde quieren estar en los próximos años.

 

Siempre tengan un objetivo en la vida, que no sea únicamente el lugar que ocupan hoy, la oportunidad que tienen hoy, el cargo que tienen hoy sino que lo vean como un escaloncito para seguir creciendo, seguir avanzando y alcanzar sus objetivos.

 

De eso se trata la vida, amigas y amigos, de eso se trata: de tener objetivos claros y, como decía hace un momento, de nunca perder la inspiración de la política pero también la inspiración de su propia vida, de su propia existencia.

 

La inspiración que te da tu familia, la inspiración que te dan tus amigos, la inspiración que te da tu país.

 

Y entonces, para ya no seguirlos aburriendo, sólo les quiero decir y agradecer por lo que están ustedes haciendo por el Senado, pero sobre todo animarlos, insisto, entusiasmarlos, que se sientan muy orgullosos de trabajar en el Senado, pero sobre todo que vayan construyendo su propia vida.

 

Les voy a pedir a todos los que van a estar con ustedes, a todos que sigamos detectando, voy a decirlo de esta manera para no echar más rollos, sí queremos que este esfuerzo, este ejercicio sea para fichajes de talentos para el Senado de la República, ese es el objetivo de esto.

 

Así es que échenle muchas ganas, porque la idea es que ustedes pasen a ser parte del equipo del Senado después de una capacitación intensa y después de un proceso de selección.

 

Que lo que hoy es un paso de servicio social, se convierta en una primera oportunidad para su desarrollo profesional, una oportunidad que alguien nos dio a nosotros, a nuestra generación antes y que hoy se las debemos a ustedes.

 

Así que échenle muchas ganas. Gánense esa primera oportunidad. El sueldo también va a ser un poco más reducido, si no, no vale la pena, pero todo lo que les dije es para eso, no les vamos a poder pagar mucho.

 

La idea es esa, y ojalá esté en su ánimo y en su disposición formar parte de este equipo en el Senado.

 

Enhorabuena a todas, a todos. Gracias por lo que hacen por el Senado. Espero verlos pronto por los pasillos. Cualquier queja con Anuar o con nuestra directora, pero disfrútenlo mucho.

 

Espero al final del ejercicio, al final de la semana, les propongo que hagamos un pequeño convivio, que nos inviten aquí unas tortas y unos refrescos con el sueldo de…

 

Hacemos un pequeño convivio para que nos conozcamos en lo personal y también para que me cuenten cómo les fue en esta semana.

 

Disfrútenlo mucho, aprovéchenlo y enhorabuena y gracias a todos.

 

PRESENTADORA: Muchas gracias a Paola García, a Juan Armando Bonilla y por supuesto al senador Roberto Gil, por compartirnos sus experiencias.

 

Y qué les parece si ampliamos este diálogo con una breve sesión de preguntas y respuestas, para lo cual les vamos a pedir que nos digan su nombre y en qué área del Senado están trabajando.

 

GIOVANNI SONI: Buenos días, mi nombre es Giovanni Soni, estoy en la Comisión Especial para el Desarrollo metropolitano con el senador Daniel Amador Gaxiola.


Mi pregunta es la siguiente, bueno, vengo de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. La pregunta es la siguiente:

 

¿Qué limitaciones usted encuentra en la juventud?

 

Hace rato externó algunas, sobre todo el caso de lo reducido que está el campo laboral, de lo poco que hay y la remuneración no es lo suficiente como para poder tener una calidad de vida.

 

Creo que al función del Senado, bueno, su importancia está de más decirlo, pero creo que los senadores, tanto los diputados, deben ser visionarios, deben ser estadistas, por decirlo así, deben tener esa visión de futuro en el empleo, en la salud, en seguridad, el país tiene muchos índices de inseguridad.


La otra vez estaba registrando los índices de la población carcelaria y la mayoría tiene entre 19 y 29 años, es algo muy preocupante y entonces quisiera saber cuál es la visión que tiene sobre las limitaciones a que se enfrenta la juventud mexicana.


Gracias.

 

VANESSA MÉNDEZ: Buenos días, mi nombre es Vanessa Méndez y estoy con el senador Asencion Orihuela.


Mi pregunta es, aquí no hay un servicio de carrera, pero ¿cómo sería la técnica para poder abrirse el campo laboral aquí, en el Senado de la República?

 

SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: A ver, sobre lo primero.

 

El mayor problema que tiene nuestro país tiene que ver con el vínculo entre el sistema educativo y el sistema productivo o la economía productiva, está roto ese vínculo.

 

Se le denomina pertinencia, no sé si han escuchado ese concepto, perdonen por la gripa que traigo, pero dicen que cuando se acaba el periodo uno afloja el cuerpo y se enferma. Traigo una gripa que Dios guarde la hora.

 

No sé si han escuchado alguna vez el concepto de la pertinencia. Es decir, que el sistema educativo vaya formando habilidades, destrezas y competencias a los educandos que le sirvan a los mismos cuando se involucran o se interiorizan en el sistema productivo.

 

Y creo que la pertinencia está dislocada en nuestro país.

 

 

Producimos muchos licenciados en derecho, muchos contadores y el mercado no tiene la capacidad de recibirlos con una oportunidad laboral y con un buen empleo, cuando debiéramos estar produciendo, o sacando de la escuela más ingenieros, con habilidades técnicas, con mayor capacidad de innovación, etcétera.

 

Porque en buena medida la economía se está moviendo hacia la sociedad del conocimiento, hacia los intangibles.

 

Y el sistema educativo no está enfocado fundamentalmente a generar conocimiento, a generar habilidades para generar conocimiento.

 

Creo que es donde está el mayor reto: volver a asociar el sistema educativo con la economía productiva. Más ingenieros, mayores formaciones o habilidades para generar conocimiento, para innovar en el mercado.

 

Ese creo que es el reto fundamental que tenemos como país.

 

La Reforma Educativa trata de eso. Trata de que la educación que se presta desde el Estado y obviamente desde los particulares, tenga ese vínculo, esos cauces hacia una economía productiva.

 

Y eso en buena medida también explica el problema del ingreso. Si tienen una economía con bajo crecimiento, evidentemente esa economía no es capaz no solamente de generar oportunidades sino también de remunerar adecuadamente las oportunidades.

 

Yo no creo, en lo personal, que la solución al ingreso sea subirlo por Decreto. Yo creo que la solución al problema del ingreso y al crecimiento del país pasa por la productividad, y la productividad tiene 3 palancas importantes:

 

La primera: relaciones laborales flexibles, que permita que sea menos costoso, que tenga menos costo la relación laboral.

 

En segundo lugar: el componente tecnológico. Entre más componentes tecnológicos tenga una economía, mayor fortaleza tiene y en consecuencia puede innovar, crecer y dinamizarse.

 

Y el tercer componente: es el capital humano y eso fundamentalmente viene de la escuela.

 

La escuela, la universidad, debe empezar a generar lo que demanda el mercado en términos de capacidades, competencias.

 

Si la sociedad se está moviendo hacia el conocimiento, que nuestra universidad de mueva también hacia el conocimiento y también hacer un énfasis en la necesidad de la formación técnica.

 

Muchos chavos que no tienen interés en trabajar en áreas de humanidades, pueden encontrar en otras áreas, en ingenierías, en matemáticas, en robótica, un espacio de desarrollo, pero hay que generar las oportunidades desde las propias universidades.

 

El otro desafío para los jóvenes, y yo creo, déjenme decirlo de esta manera:

 

México se está volviendo un país que no tiene segundas oportunidades.

 

¿Qué significa esto de las segundas oportunidades? Un chavo que se vincula por necesidad, por invitación con el crimen organizado, o con la actividad delictiva, ya no tiene una segunda oportunidad, son chavos que destrozan su vida para siempre.

 

Y el problema de las cárceles, es un problema de que no hay segundas oportunidades.

 

Lo hemos tratado de reflexionar, y ustedes han sido testigos de esas discusiones en el Senado, qué pasa, qué hacemos con un muchacho de 19, 20 años, que pasó 3, 4, 6, 7 años en la cárcel. Sale de 25, 28, 30 años. Qué destino le está dando la sociedad mexicana a ese chavo, a ese muchacho.

 

Y creo que la respuesta no está en la mesa todavía. No hemos construido una sociedad de segundas oportunidades.

 

Y mientras no haya segundas oportunidades, un chavo que se equivocó una vez, no puede corregir su destino. Y ahí está uno de los mayores retos de nuestro país.

 

Yo me crié en Ciudad Juárez, en la frontera norte, en la ciudad que fue la más violenta del mundo. La crisis de seguridad empezó en los años 90 y muchos de mis amigos con los que yo estudié en la Primaria, en la Secundaria, que vivían en la misma colonia o acabaron muertos o acabaron en la cárcel porque se vincularon con el crimen organizado, se vincularon con la vida fácil del narcotráfico.

¿Qué vamos a hacer con eso chavos?

 

Es una gran pregunta, ¿cómo evitar que tengan la tentación?

 

Con oportunidades, pero ¿qué pasa con los que ya cayeron en la tentación, ya cayeron en el error, qué hacemos con ellos, cómo los reinsertamos a la sociedad, cómo hacemos que reprogramen su vida?

 

Creo que ese es uno de los mayores retos que tiene nuestro país. La población penitenciaria es intensísima en jóvenes, mujeres y hombres; y como sociedad tendremos que pensar en algún momento qué vamos a hacer con esos chavos. Creo que la sociedad, una sociedad justa, se define por la posibilidad de dar segundas oportunidades y creo que hay muchas personas que están dispuestas a aceptar esa segunda oportunidad.

 

A lo mejor a mi generación no nos toca ver la solución a ese problema y a lo mejor a ustedes les va a tocar construir esas nuevas instituciones. Pero llévense en la cabeza que una sociedad tiene que abrir segundas o terceras oportunidades a la gente, no importando qué haya hecho en el pasado; y creo que el reto para los jóvenes es justamente eso.

 

Con respecto a los incentivos a una carrera profesional en el Parlamento. En efecto, no tenemos servicio de carrera, debiéramos tener servicio de carrera, debiéramos tener un conjunto de instituciones y reglas y procedimientos para que ustedes entren como servicio social y puedan ir escalando, a partir del mérito, en distintas oportunidades.

 

El servicio profesional tiene muchísimas ventajas, virtudes, pero la mayor es que alienta el mérito, alienta no solamente el esfuerzo personal sino también cierta competencia entre quienes forman parte de ese servicio y el incentivo a estar constantemente preparándose, formándose y creciendo en lo personal.

 

Es uno de los pendientes que tenemos como país, está en la ley, previsto, que debemos tener un servicio profesional de carrera; está previsto de alguna manera en nuestras reglas, pero la verdad es que no está operando. Hay que hacerlo operar.

 

Hay, obviamente, muchísima resistencia para hacerlo operativo, entre otras razones, tiene que ver con la rotación de los propios legisladores. Creo que el servicio profesional de carrera se va a ir consolidando cuando existan parlamentarios de carrera; pero si el legislador entra y se va con su equipo, no tiene ningún incentivo para dejar una experiencia y una herencia de permanencia profesional en el Senado.

 

Creo que a partir del 2018, cuando ya sea posible la reelección, cuando ya tengamos parlamentarios de carrera, habrá el incentivo para también tener un cuerpo técnico de carrera.

 

¿Qué queremos hacer en estos meses que nos faltan, en estos meses de esta administración?

 

Sembrando, con ustedes, esa posibilidad. Entran como servicio social, los formamos, los capacitamos y luego vamos a abrir la bolsa de trabajo en la que ustedes puedan competir por una oportunidad. Y esa es una forma de ir alentando el servicio profesional de carrera.

 

Este Programa de Senado Joven lo que trata es de ir construyendo semilleros de perfiles para dotar de personal a nuestras distintas áreas. Lo que vamos a hacer después de que pasen este programa, es poner a disposición de todos los legisladores sus nombres y sus currículas, ¿para qué? Para que puedan ser ustedes considerados en las distintas posibilidades que tiene el Senado.

 

Es un servicio de carrera, de alguna manera en ciernes, en formación, pero creo que tenemos que seguir trabajando en esa materia. Insisto, estoy convencido de que cuando tengamos servicio, cuando tengamos parlamentarios de carrera habrá el impulso para tener también funcionarios técnicos de carrera.

 

¿Alguien más?

PREGUNTA: Gracias.

 

Mi nombre es Larisha Saviñón Ramos. Estoy haciendo mis prácticas profesionales en la Comisión de Asuntos Indígenas, y como tal me preocupa y desde hace mucho he querido platicar con usted acerca de este tema.

 

Soy originaria del estado de Oaxaca. Por falta de oportunidades vine a la Ciudad de México a probar suerte. Estudio la carrera de derecho.

 

Pero un tema principal que me preocupa mucho en mi estado es el tema de la educación. Sabemos que Oaxaca es un estado con muchas heridas.

 

Sabemos que es el estado más rezagado al sur y a nivel República. Y a mí me gustaría saber su opinión acerca del tema de la educación en Oaxaca, la falta de oportunidades a los jóvenes y principalmente a muchas comunidades indígenas y pueblos que son originarios, que realmente el analfabetismo en Oaxaca tiene un incremento día con día.

 

Ahora estamos en el 80 por ciento de analfabetismo principalmente en niños y mujeres. ¿Cómo atacar este problema?

 

SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: La primera condición para resolver el problema educativo en una sociedad es que el Estado tenga la rectoría de la educación, y que esa rectoría no la dispute nadie.

 

Desafortunadamente en Oaxaca y en algunos estados: Michoacán, Guerrero, la rectoría se las hemos dejado a expresiones sindicales del magisterio. Y en gran medida el problema de la educación en Oaxaca se explica por la enorme influencia que tiene la expresión sindical en el control de la educación.

 

Se ha utilizado la expresión sindical como una forma de expresión política y no como un elemento de la defensa de los derechos del magisterio frente al servicio educativo. Son dos cosas totalmente diferentes.

 

El Magisterio en Oaxaca no presta educación, hace política, y hacen una política de tensión social importante.

 

Yo creo que el primer paso es que el Estado recupere la rectoría de la educación en Oaxaca y en todo el país, porque sólo así el Estado puede asegurarse de que el servicio educativo que se presta se preste no solamente conforme a la ley sino también se preste con los estándares de calidad y con los objetivos que sigue y persigue el sistema educativo.

 

Lo primero que hay que hacer es, lo subrayo con toda responsabilidad, es que el Estado asuma la rectoría de la educación y no permita el chantaje de nadie. Por supuesto que tampoco se justifica la violencia, tampoco se justifica el enfrentamiento, tampoco se justifica vulnerar los derechos de las personas, pero sí creo que lo primero que hay que hacer en el estado de Oaxaca es recuperar el control por parte del Estado de las escuelas.

 

Que las escuelas sean de los niños y de sus padres, no de los profesores.

 

En buena medida en Oaxaca el rezago educativo se explica porque está secuestrada la educación por parte de ciertos intereses magisteriales y ciertos intereses sindicales.

 

Los niños tienen una tercera parte de las horas de clase que tiene un niño en Nuevo León, y eso también te explica en buena medida el problema del rezago.

 

No creo que haya de otra, ¿eh? Hay que aplicar la ley, pero sobre todo que el Estado asuma el control de la educación.

 

La otra parte, la segunda condición tiene que ver con la calidad educativa.

 

Miren, durante todo el Siglo XX, el Estado mexicano se preocupó por la cobertura de la educación. Es decir, que todos los muchachos, todos los niños tuvieran por lo menos educación básica.

 

Nos pusimos a construir escuelas e intentar llegar hasta el último rincón del país, y en buena medida se logró el objetivo de la cobertura. Y eso también explica por qué tenemos escuelas de cuatro horas, ¿por qué? Porque tenían dos o tres turnos para cumplir el objetivo de la cobertura.

 

Ya no es la cobertura el objetivo principal del sistema educativo. Ya no debe ser. Ahora debe ser la calidad

 

¿Y la calidad cómo se induce? Pues a través de procesos de evaluación, tanto de profesores como de la eficiencia, del rendimiento educativo de los propios educandos.

 

La evaluación es un mecanismo fundamental para asegurarnos de dos cosas: Uno, que quienes están frente al aula sean buenos profesores y que el rendimiento de los muchachos, de los niños, sea el que estamos esperando.


Por eso hay que evaluar, porque si evalúas permites corregir; si evalúas puedes fortalecer; si evalúas puedes innovar, puedes crear otros elementos para fortalecer el rendimiento educativo; la evaluación es la pieza angular de un sistema educativo con mayor calidad.

 

Nuestro objetivo ahora es, además de la cobertura la calidad y también tiene que ver ahora con una etapa en la cual se amplíe no solamente la estancia de los muchachos en la escuela.

 

Somos uno de los países que tiene menos tiempo horas-clase del mundo. Es decir, tenemos un déficit importante de presencia de nuestros muchachos en las escuelas.

 

Más tiempo en las escuelas ayuda no solamente a una mejor formación, también ayuda a generar otro tipo de hábitos, a alejar incluso a los chavos de ciertas tentaciones, a cultivarles el deporte, la cultura, en fin, tenemos que ampliar las estancias, el tiempo eficiente que está un muchacho en la escuela y eso también pasa por hacer un esfuerzo de inversión importante.

 

Deberíamos tener escuelas de tiempo completo en todo el país; están haciéndose poco a poco, es un problema de dinero, es un problema de infraestructura; tenemos suficientes profesores para tener de tiempo completo, pro lo malo es que no tenemos capacidad instalada para poderlo hacer.

 

Es un proceso largo, es un proceso que nos va a llevar algunas generaciones. Quizá, insisto, a nosotros no nos toque verla, a ustedes quizá sí, pero les va a tocar a ustedes conducir también ese proceso.

 

Es muy importante, lo digo con toda claridad, el futuro de nuestro país se decide por una sola cosa: educación.

 

Si tenemos un país educado, tenemos un país próspero.

 

Tenemos un bono demográfico que es una ventaja para el país, somos una sociedad joven, pero una sociedad joven también tiene muchísimos retos, los retos no solamente de asegurarles oportunidades en el largo plazo, sino también que tengan las herramientas para poder competir en un mundo cada vez más difícil.

 

DANIEL DÁVILA: Buenos días, yo soy Daniel Dávila y estoy en el área administrativa de contabilidad, en la Dirección General de Informática y soy profesional técnico en Contabilidad de CONALEP y yo le quiero hacer esta pregunta:

 

¿Por qué el campo laboral en el área pública es tan restringido?

 

Esa es la pregunta.

 

LUIS FELIPE RODRÍGUEZ: Buenos días, soy Luis Felipe Rodríguez, desempeño mi servicio social en la Comisión de Desarrollo Municipal, estudio Ciencia Política en la UNAM.

 

Woodrow Wilson decía que el poder legislativo de carácter congresional era fuerte porque descansaba o residía su mayor virtud en el poder de las comisiones o la preparación que tienen los comités en su caso concreto.

 

Mi pregunta va en ese sentido, desde la Mesa Directiva se están haciendo esfuerzos o se está teniendo una visión por fortalecer el trabajo de las comisiones, porque yo veo que son órganos especializados, hay mucho campo laboral para los jóvenes.

 

Entonces, mi pregunta iría ene se sentido.

 

Gracias.

 

SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: A ver, ¿por qué es difícil entrar al sector público?

 

La verdad y hay que reconocerlo, porque tampoco tenemos servicio profesional en el gobierno y es la verdad. Las posiciones en el gobierno se decidan fundamentalmente de manera discrecional:

 

Quien llega asume una Secretaría, una subsecretaría, una dirección, integra su equipo de trabajo y con él llegan, y con él o ella se van.

 

Es un problema estructural en nuestro país la ausencia de un servicio profesional de carrera en el gobierno en todo el sector público.

 

Hay algunos experimentos muy positivos: el servicio diplomático, el servicio de carrera, el servicio profesional electoral, también es un servicio potente, pero debiéramos tener en todas las áreas públicas un servicio de carrera para que tanto al ingreso como la permanencia no dependa de una relación sino dependa de las propias capacidades y los propios méritos.

 

La profesionalización del sector público es uno de nuestros desafíos como país y en esa medida el acceso será más justo si le quitamos la discrecionalidad sobre quién ocupa o no los cargos en el sector público.

 

Hay que ponerlo en la agenda ese tema, hay que visibilizarlo para que lo podamos corregir.

 

Supuestamente desde el año 2002 existe el servicio profesional de carrera en la Administración Pública Federal, pero la verdad es que no funciona, no es un servicio de carrera estable.

 

En España, por ejemplo, para entrar al servicio público tienes que hacer un examen de posición muy exigente. Pero aquella persona que es parte del servicio profesional de carrera no solamente tiene asegurado un horizonte profesional con un salario muy digno, sino también tiene asegurada la permanencia y funcionan de manera imparcial, independiente, objetiva.

 

Obviamente vienen gobiernos y salen gobiernos y la gente se mantiene en su posición y eso les ha dado a muchos países la garantía de la profesionalización del servicio público pero también incentivos para, por ejemplo, combatir la corrupción.

 

Un funcionario que entra por un año o por 6 meses tiene altísimos incentivos a corromperse. ¿Por qué? Porque va a aprovechar el espacio que le dé la oportunidad, va a aprovechar esos 6 meses donde su cuate es Secretario de Estado; el servicio profesional, por lo contario, y genera incentivos para no corromperse.

 

Yo pierdo mi chamba que tengo asegurada por 25, 30 años si lo hago bien y en consecuencia no me equivoco, no me arriesgo a corromperme porque puedo perderlo todo.

 

Creo que el servicio profesional en todas las áreas del sector público, es la garantía y la solución para el planteamiento que tú hacías y me parece que es el drama que viven todos los chavos que quieren ingresar al sector público, que no hay piso parejo, no hay condiciones para poder tocar una puerta y decir: “yo me quiero ganar un lugar aquí”.

 

Tiene que haber alguna fórmula para conocer a alguien, tener alguna relación, para que te inviten a trabajar al sector público y eso es un problema estructural. Queremos cambiarlo en el Senado, pero al final de cuentas es un problema de país.

 

Sobre las Comisiones: Los parlamentos modernos funcionan desde la Comisiones. El Pleno sólo sirve para el debate final y la decisión de voto.

 

Pero las Comisiones son los que tienen los poderes de control, los poderes de rendición de cuentas, son los espacios técnicos para construir las piezas legislativas, son los verdaderos espacios de poder.

 

Las Comisiones, en Estados Unidos, son quizá más fuertes que el propio Pleno.

 

Cuando una comisión parlamentaria en Estados Unidos manda llamar a una persona o a un funcionario público, tiene un peso especial, una relevancia y una importancia sustantiva.

 

También nuestro Parlamento está pasando por una transición. Y yo vuelvo al tema:

 

Mientras no haya parlamentarios de carrera, muchos de los instrumentos que tiene el parlamento no van a funcionar.

 

¿Por qué? Porque sí somos parlamentos amateurs. Somos parlamentos en los cuales no hay; como no hay un horizonte de largo plazo, no hay el conocimiento, la trayectoria, la memoria institucional para utilizar todos los instrumentos con seriedad, y con inteligencia, y con mayor resolución política.

 

Las Comisiones van a ser y se van a ir fortaleciendo en la medida en la que nuestros legisladores tengan una mayor permanencia en el Congreso.

 

Y yo creo que eso se va a resolver, a lo mejor me equivoco, pero creo que la reelección legislativa va a ser un gran aliciente de fortalezas que hoy tiene el Congreso y que están subutilizadas, como por ejemplo las Comisiones.

 

PRESENTADORA: Por cuestión de tiempo, finalizamos nuestra sesión de preguntas y respuestas.

 

Agradecemos a todas y a todos su participación en este diálogo.

 

SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Gracias todos.

 

PRESENTADORA: Invitamos al senador Roberto Gil a realizar la declaratoria inaugural de este encuentro.

 

SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Así, como dicen, pónganse de pie.

 

Siendo las 11:35 horas del lunes 20 de junio de 2016, damos por foralmente inaugurado el Programa Senado Joven, con nuestra primera generación de jóvenes que van a participar en este Programa, los que van a ser el futuro de nuestro Congreso, el futuro de nuestros senadores, muchos de ellos legisladores.

 

Y de verdad, enhorabuena a todas, a todos, que sea provechoso para ustedes y que sea también provechoso para nuestro país.

 

Felicidades y gracias a todos.

 

PRESENTADORA: Un aplauso para todas y todos ustedes.

 

Y es así como inicia este Programa Senado Joven, en el Senado de la República.

 

Despedimos al senador Roberto Gil, con un fuerte aplauso.

Calendario

Julio 2024
Lu Ma Mi Ju Vi Sa Do
1 2 3 4 5 6 7
8 9 10 11 12 13 14
15 16 17 18 19 20 21
22 23 24 25 26 27 28
29 30 31 1 2 3 4