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¡Fecha,
9.02.201 8
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MA~UEL
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J.
JAUREGUI
La intervención extranj era se sumará a la ya existente
melcocha pestilente de las campañas mexicanas.
.
,.
Tormenta de estiércol
L
o que dice el encabezado es preci–
samente, estimados lectores, lo que
viene en
poco
más
de unmes cuando
inicien propiamente -en términos del
INE–
las campañas
rumbo
a
la
eleccióndell de
ju–
lio: una guerra SUCIAen laque el estiércol
nublará los cielos.
Para
complicar las
cosas,
es pos1ble
-ya
que aquí
quizá
no
tengamos
posibilidadesde
combatirla- que en
esta
TORMENTA
DE
ESTIÉRCOL que cubrirá con
su
pestilente
manto a todo México
tenga
injerencia pro–
motoraunENTEEXTRANJERO, copiando
elmodeloque el
Fiscal
Especial
norteameri–
canopara
investigar
las actividades deRusia
dentro de la pasada campaña presidencial
norteamericana, Robert Mueller,
ha
puesto
de manifiesto con
la
acusación
formal
con–
tra
13
individuos
y
empresas
rusas
ligadas al
Kremlin
divulgada
el viernes pasado.
Entre
las
acusadas
se encuentra
la
In–
ternet Research
Agency
(Agencia de In–
vestigación de Internet), una "granja de
troles" ubicada en
San
Petersburgo,
ligada
a una persona a quien le apodan
"El
Chef
de Puti.n".
Ahora bien, en la elección mexicana
-les podemos adelantar con cierto conoci–
miento de causa- se prepara
una
GUERRA
SUCIA nunca antes
vista
en México en
la
que se pretenderádestruir la
imagen
de los
punteros con memes, GIFs, yutubazos,
tui–
tergolpes
y
snapchatazos, acusándolos de
hasta
haber
sido los que sostuvieron
la
lanza
que hirió a
Jesús
en
la
cruz.
Ahora bien, estimados amigos, si a
la
"caca"
nativa
que
va
a brotar le
agregan
uste–
des
la
que pudieragenerar
esta ''l\gencia
de
Investigación de Internet'', la posibilidad
de que todos acabemos nadando en una
gigantesca estiercolera es muy
real.
¡Si lo hicieron los rusos en gringolandia,
cantado está que lo harán
acá!
Por ello es necesario -casi diriamos que
obligatorio- entender cómo funcionó
la
in–
tervención rusa en
la
elección presidencial
norteamericana
El
primerpuntonecesariode
analizar
es
que los rusos intervinieron exclusivamente
en las llamadas
REDES
SOCIALES, crean–
do cuentas falsas DENTRO de Estados
Unidos: atacaron en
1\vitter,
Facebook,
Ins–
t:agram,
Snapchat, generando
INFORMA–
CIÓN FALSA, primordialmente en contra
de
la
perdedora de
la
elección.
Hilarla
Clin-
ton,
y
en favor de Donald
~- ~P·
.
La acusación de la Fiscalía EspeCial
de Mueller (mdictment) confirmó lo que
-investigaciones del propio _Congreso norte–
americano habían descubierto antes: que
agentes
rusos
manipularon las
~E7~es
promoviendo laDMSIÓNSOCtal Imitando
actividad política local
Igualmente
esta
acusación~
que
no sóloseemplearoncuentas automatmdas
("bots'')
para intervenir, sino que se usaron
conspiradores,
personas~
afinabanpJ?pa–
ganda e interactuaban enlinea con
a.ctMStaS
políticos americanos.
Al anterior párrafo, amigos, quítenle
ustedes
la
palabra "americanos" e
inserten
"mexicanos",
y
les garantizamos que
será
igualmente válido.
La
elección mexicana, dada
la
desven–
taja del candidato oficial, se tratará no de
"construir''
la candidatura del que pronto se–
rá
el candidato del partido en el poder, sino
de DESTRUIR la
imagen
de los candidatos
rivales.
Ello, como les decíamos lineas arriba,
desencadenando una GUERRA SUCIA
tre–
menda en laque
se
atacará al rival concuan–
to defecto humano
sea
poSible inventarle.
Como laintervenciónextranjeravendrá
IMITANDO activismo político local, que se
sumará a la generada por los "cuartos de
guerra" locales, pueden ustedes, estimados
amigos,
esperar
que la melcocha pestilente
será
espesa
y
abundante.
A
raíz de la investigación del Fiscal
Mueller SE SUPONE que las empresas
de internet que fueron empleadas para
la
intervención rusaen las elecciones como Fa–
cebook,
'IWitter,
Snapchat
o
Paypal
(a
ésta
la
emplearon los de
la
IRA
para"pagar" a acti–
vistas locales cuando
armaban
protestas o
contraprotestas)
y
todas las demás están
colaborando con la Fiscalía para ayudar a,
primero, descubrir a los conspiradores
y,
segundo, tomar medidas para IMPEDIR
que en el futuro se pueda repetir.
Eso
noquiere decirque lo impedirán en
las elecciones mexicanas, pues la verdad no
creemos que les importen tanto,
pero
es de
esperarse que cuando menos
estas
empre–
sas fortalezcansus plataformas paradetener
el abuso en las campañas políticas.
Por mientras, amigos lectores, les reco–
mendamos que tomen una precaución bási–
ca:
NOCREANAPRIORI ni den por hecho
como cierto lo que leen, ven o escuchan en
las redes sociales: ¡nuncase
sabe
quién
está
detrás ni con qué
fin!