PALABRAS DEL PRESIDENTE DEL SENADO DE LA REPÚBLICA, JOSÉ GONZÁLEZ MORFÍN, DURANTE LA CEREMONIA CONMEMORATIVA DEL DÍA DE LA BANDERA, QUE TUVO LUGAR EN EL ZÓCALO DE LA CIUDAD DE MÉXICO.
-Ciudadano licenciado Felipe Calderón Hinojosa, Presidente de los Estados Unidos Mexicanos;
-Diputado Guadalupe Acosta Naranjo, Presidente de la Cámara de Diputados;
-Ministro Juan Silva Meza, Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación;
-Señoras y señores Secretarios de Estado;
-Jóvenes estudiantes;
-Señoras y señores:
Como cada 24 de febrero, los mexicanos celebramos con enorme respeto y orgullo a uno de nuestros más preciados símbolos: la bandera nacional.
Hoy, en cada rincón de nuestro país los mexicanos nos unimos en un só7lo sentimiento, un sólo México, una sola nación.
Hoy celebramos nuestro lábaro patrio, el cual detona profundos sentimientos de pertenencia, identidad y solidaridad.
En nuestra hermosa bandera está sintetizado pasado, presente y futuro. Está reunido lo que los mexicanos hemos sido, lo que somos y lo que anhelamos ser. El verde, blanco y rojo de nuestra enseña patria ha acompañado a México desde su nacimiento como país independiente en 1821.
Nuestra bandera fue defendida a sangre y fuego en las heroicas batallas de Churubusco y Chapultepec en 1847 ante la invasión estadounidense. Acompañó impasible y digna a Juárez en su lucha por preservar la República y ondeó victoriosa sobre el ejército más poderoso del mundo, en la batalla de Puebla en 1862.
Fue estandarte de libertad en manos de Madero en 1910, emblema de legalidad en manos de Carranza en 1917 y fue enarbolada con marcialidad y gallardía al otro lado del mundo por el Escuadrón 201 en 1942.
Hoy nuestra bandera se levanta orgullosa. Es símbolo de un país soberano, libre y democrático. Representa a una nación que es respetada en la arena internacional y ejerce un liderazgo reconocido.
Es emblema de una tierra que ha dado al mundo a brillantes mujeres y hombres en todos los campos del pensamiento, las artes y las ciencias. Ondea victoriosa en justas deportivas internacionales. Nos da identidad y sentido, nos hermana. Esta es la bandera, para los nacidos en esta patria, símbolo de independencia, de soberanía y de unidad; emblema del orgullo que todos sentimos por nuestra historia y de la esperanza que tenemos en nuestro porvenir.
Los mexicanos de las generaciones que nos precedieron, dieron su vida para que hoy tuviéramos el nombre de México como nación y la bandera tricolor como enseña.
Nos toca a los mexicanos del siglo XXI honrar a nuestra bandera, trabajando día a día por un México más seguro, más justo y más próspero para todos.
Hoy tenemos una patria que nos une y nos identifica, una patria en la cual reposa una gloriosa historia y en la que se albergan nuestros sueños y esperanzas; una patria donde es posible, con trabajo y esfuerzo, alcanzar cualquier anhelo.
Pero también es cierto, como ha sucedido en el pasado, que México enfrenta grandes desafíos: la inseguridad, la pobreza, la injusticia. Por eso, esta es una inmejorable tribuna para convocar a los tres poderes de la Unión, a los tres órdenes de gobierno, a los partidos políticos, a la sociedad civil organizada, a cada una de las mexicanas y los mexicanos de bien, a fortalecer nuestra economía y nuestras instituciones, impulsando las reformas pendientes para que nuestra gente pueda encontrar más oportunidades de progreso.
A respaldar con voluntad el genuino esfuerzo del Presidente Calderón en la reconstrucción de nuestras instancias de seguridad y procuración de justicia para librar a México de la sombra de inseguridad.
A fortalecer nuestro sistema educativo para ampliar las opciones de desarrollo de nuestro niños y jóvenes.
A redoblar esfuerzos para sacar de la marginación y el atraso a las comunidades más necesitadas de nuestro país y sobre todo a fortalecer nuestros lazos sociales, inculcando y practicando valores como la honestidad, el respeto a la ley y los demás, la solidaridad, la generosidad.
A todo eso y más, estamos llamados los mexicanos de hoy. Inspirados en nuestra bandera nacional sabremos estar a la altura de los desafíos de nuestros tiempos.
Señoras y señores:
Don Alfonso Reyes dijo que el patriotismo es el sentimiento que llevamos en nuestros corazones, amor a nuestro país, deseo de mejorarlo, confianza en sus futuros destinos. Estoy convencido de que ese es el sentimiento que debe unir a los mexicanos hoy y siempre, porque bajo la bandera nacional cabemos todos.
A la hora de actuar a favor de México, no puede haber distinciones partidistas o ideológicas. A todos nos unen los mismos colores, a todos nos llena de orgullo la misma bandera.
Actuemos unidos bajo la bandera nacional, con la voluntad de hacernos dignos de nuestro pasado, con la responsabilidad que exige nuestro presente y con la convicción de que tendremos un mejor futuro.
Muchas gracias.
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