• Contribuirá a generar de empleos y la disminución en el precio de la luz eléctrica.
• En la actualidad, existen circunstancias que obligan a ser más eficaces, a multiplicar los recursos, a mejorar los procesos para competir.
La reforma energética del presidente Enrique Peña Nieto garantiza que el sector energético del país siga siendo un instrumento para fomentar el desarrollo nacional, sostuvo el director General de la Comisión Federal de Electricidad, Francisco Rojas Gutiérrez.
Además, dijo, motiva la competitividad del sector y contribuirá a la generación de empleos y mejorar sustancialmente el bienestar de las familias mexicanas con la disminución en el precio de la luz eléctrica.
En el marco de su comparecencia ante las Comisiones Unidas de Energía, Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos, Primera, que presiden los senadores David Penchyna, Enrique Burgos y Raúl Gracia, respectivamente, consideró que la iniciativa es un paso indispensable para el sector energético, toda vez que el momento y la circunstancia que vive, demanda y exige nuevos cauces, nuevas vías, nuevas maneras de conducir el desarrollo de la energía en el país.
Enfatizó que en la actualidad, existen circunstancias que obligan a ser más eficaces, a multiplicar los recursos, a mejorar los procesos para competir, aprovechar la tecnología y seguir garantizando los elementos históricos que dan al Estado mexicano su autoridad de rector de los procesos de energía.
Por ello, sostuvo que el sector eléctrico del país es una posibilidad sobre la cual puede asegurarse el desarrollo económico de México, toda vez que ha sabido experimentar con las más diversas tecnologías y diversificado su oferta con el fin de garantizar que al “mover el switch, en cualquier lugar de la república, la luz llegará ahí.
No obstante, el funcionario federal destacó que el problema de los combustibles, que nadie puede negar se ha convertido en el talón de Aquiles del sector eléctrico, por la carencia de gas.
El director general de CFE, señaló que no solo se trata ya de garantizar la generación, sino de garantizar que esta generación sea cada vez sea más limpia y menos agresiva al medio ambiente.
“Todo esto obliga a CFE a intentar nuevas avenidas, nuevos procesos, nuevas acciones a efecto de que el combustible no falte, y a cumplir con los requerimientos medio ambientales, con absoluta responsabilidad social”, puntualizó.
Explicó que la energía eléctrica a diferencia del petróleo, no se puede almacenar y esto obliga a extremar la eficacia, a optimizar la disponibilidad, a garantizar un adecuado margen de reserva operativo y hacer esfuerzos por acercarnos más a los parámetros internacionales de pérdidas técnicas.
Dijo que es indudable que el gobierno subsidia, y es que también que sin ese subsidio, amplios segmentos de la población no podrían disfrutar de la luz eléctrica.
Por ello, enfatizó que la iniciativa del Presidente Peña Nieto va a permitir clarificar y delimitar los procesos, va a permitir la certeza jurídica constitucional de quienes inviertan desde la perspectiva del sector privado.
Además, va a transparentar el costo real del porteo y la energía de reserva, más aún, va a dar la oportunidad a que se incentive el consumo de gas y que su costo se transparente.
Pero va a ayudar también, subrayó, a transparentar los subsidios, a mostrar el tamaño del esfuerzo que se requiere para llegar a las comunidades más apartadas del país y apoyar al mismo tiempo, el impulso del crecimiento exponencial de los centros urbanos.
La iniciativa, indicó Francisco Rojas, permite mostrar con claridad los apoyos adicionales que son indispensables para que el sector eléctrico crezca al tamaño de la demanda.
Va a permitir, señaló, mostrar que en el escenario de competencia real, van a sobrevivir los mejores con la confianza de que CFE sin duda, será la mejor.
A esto, afirmó que las tarifas eléctricas podrán bajar y que incluso habrá necesidad de un nuevo esquema tarifario para dar mayor certeza; pero antes, resaltó, se tienen que resolver las cuestiones que de manera estructural no permiten ahora que la certeza sea el gran valor sobre el que se aglutinen todos: CFE, externos, productores independientes, auto abastecedores, cogeneradores, en función del objetivo común de garantizar el suministro eléctrico en las mejores condiciones comerciales posibles.
Expuso que la CFE ha aceptado las inversiones financiadas y las aportaciones de los productores independientes de los abastecedores y de los cogeneradores, aunque ellos también, destacó, requieren de combustibles, de oportunidades y certeza.
Indicó que todos estos esquemas requieren también de líneas de transmisión y de distribución, demandan la fibra óptica y se allanan a la convivencia con las fuentes renovables de energía como el aire, el sol, las intermitentes que en efecto son una gran oportunidad, siempre y cuando dispongan de líneas de transmisión y de distribución.
Asimismo, destacó que el crecimiento del país ha exigido la profundización en el diseño y construcción de las líneas de transmisión y de distribución y en la incorporación en estos procesos que asegura su modernidad y eficacia actual con el desarrollo de la tecnología y líneas de la red de fibra óptica que corren paralelas y están en el corazón de las operaciones cotidianas en el control y en el despacho de la energía eléctrica.
Resaló que actualmente se tienen 52,700 kilómetros de líneas de transmisión “y es un gran logro que hayamos logrado construir ochocientos veintitrés mil kilómetros de líneas de distribución, lo que implica no solo un alarde tecnológico para su construcción; sino en las vías de solución de los múltiples problemas de carácter económico y social que han tenido que irse resolviendo para tener la vía, la línea y sus derechos”.
“Para hacer esta industria grande y eficiente, para llevar la luz a las familias, para tener la seguridad energética en materia eléctrica, para eso fue construida la Comisión Federal de Electricidad y ha cumplido bien”, concluyó.
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