Número-893
- De visita en México y en Sesión Solemne, llama Alberto Fernández a hacer de América Latina el continente de la igualdad.
En la Sesión Solemne para recibir al presidente de la República de Argentina, Alberto Fernández, el senador Eduardo Ramírez destacó que, a pesar de condiciones adversas, México y ese país sudamericano tienen la capacidad y la voluntad para trabajar en la transformación de sociedades más justas, incluyentes e igualitarias.
El encuentro se llevó a cabo con las medidas de sanitaras para prevenir los contagios del SARS-CoV-2, con la presencia mínima de legisladores en el Salón de Sesiones y con la asistencia remota de los demás integrantes de este órgano legislativo.
Eduardo Ramírez reconoció a los gobiernos de México y de ese país por enfrentar juntos, con la mayor responsabilidad, el impacto y los retos de la pandemia por Covid-19.
También destacó que ambas naciones forjaron sólidos lazos de amistad desde el establecimiento formal sus relaciones diplomáticas en 1888.
Como una respuesta concreta para superar la emergencia sanitaria acordaron realizar la producción conjunta de vacunas. México, agregó el senador, ya recibió dos embarques para el envasado final de aproximadamente 12 millones de dosis, con miras a lograr la inmunización de la población.
Este proceso conjunto de elaboración de vacunas tiene como finalidad última beneficiar a todos los países de América Latina y el Caribe.
El legislador recordó que la postura del Estado mexicano en los organismos internacionales, como la Organización de las Naciones Unidas, es asegurar el acceso universal, equitativo, oportuno y gratuito a los medicamentos, vacunas, tratamientos y equipo médico necesarios para hacer frente a la pandemia.
Dijo que nuestro país también ha aprovechado la presidencia pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños para promover la solidaridad, la concertación política y la cooperación regional, a fin de encontrar respuestas coordinadas que abarquen el acceso a vacunas seguras en nuestra región, lo cual será una tarea que nos permitirá superar los desafíos sanitarios.
Eduardo Ramírez también subrayó que el titular del Ejecutivo mexicano ha levantado la voz ante los países integrantes del G-20, para que las políticas de los Estados lleven a cabo un rescate económico “de abajo hacia arriba”, para que brinden, en primer lugar, ayuda a las personas más pobres.
Alberto Fernández, en tanto, dijo que no habrá un tiempo mejor que éste para dar vuelta a la historia del mundo y acabar con la desigualdad y la injusticia. Ese es el desafío que tenemos como continente: unirnos, alzar nuestra voz y decir que nosotros también tenemos derecho a crecer y desarrollarnos.
Advirtió que millones de latinoamericanos viven al margen, sin salud, educación ni trabajo, situación que las sociedades no podrán soportar más. “Tengo la certeza de que no da para mucho más”.
Por eso, explicó, es que aliento la esperanza de que éste sea el tiempo para que América Latina se ponga de pie y “sea capaz de plantarle al mundo su palabra revulsiva para hacerlo más igualitario, justo y terminar con las discriminaciones en materia de raza y sexo”.
Para que la mujer deje de ser golpeada, asesinada y pueda progresar en su trabajo, como puede progresar cualquier hombre, y para que no haya diferencias salariales entre géneros, agregó.
El Presidente de Argentina preguntó: cuánto tiempo más vamos a esperar para alzar la voz y decir basta, este fue el punto final, y empezar a escribir otra historia que nos haga virtuosos.
Este es nuestro tiempo el tiempo, de unir esfuerzos y trabajar con sensatez y racionalidad. Es el tiempo de unirnos, no para estar en contra de otros, sino para estar en favor nuestro. Para que nuestros pueblos puedan crecer. Ese es el verdadero desafío que tenemos, manifestó desde la tribuna principal del Senado.
Afirmó que es momento de que México y Argentina tracen un eje que cruce e impregne a toda América Latina para que se una a este llamado de cambio. Puso como ejemplo que ambas naciones trabajan muy juntas para llevar la vacuna, por la que hoy millones de latinoamericanos luchan y esperan.
Las vueltas de la vida quisieron que, en medio de la pandemia, el virus nos uniera para que allá, en el país más austral del continente, se produzca el contenido esencial de la vacuna, que se termina de elaborar aquí en el país más norteño de América Latina.
“Debemos ser capaces de construir en la diversidad. No se trata de construir un discurso único, sino de escucharnos y abrir nuestras cabezas. Hagamos de América Latina el continente de la igualdad para sacarnos este triste estigma que hoy tenemos”, concluyó.
Previamente, el presidente de la Mesa Directiva -acompañado del senador Ricardo Monreal Ávila, presidente de la Junta de Coordinación Política; del secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard; y del embajador de Argentina en México, Carlos Alfonso Tomada- recibió a Alberto Fernández en el Patio del Federalismo.
En la ceremonia se tomaron la fotografía oficial del encuentro, entonaron los himnos nacionales de los dos países y el mandatario argentino firmó el libro de visitantes distinguidos.
