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Senadores de Movimiento Ciudadano presentaron reformas a la Ley de Aviación Civil, para dar certidumbre a los pasajeros del transporte aéreo, cuyos derechos son afectados actualmente por la sobreventa de boletos, cancelaciones, retrasos y programaciones decididas de manera unilateral.
La iniciativa propone eliminar las condicionantes que aplican las aerolíneas en los casos de cambio de tarifas, sobreventa de boletos, cancelaciones y, en cambio, ofrecer al usuario, todos los servicios de comunicación, hospedaje y alimentos sin cargo, cuando se pospongan vuelos y cambien horarios.
Desde la tribuna de la Comisión Permanente, el senador Francisco Alcibíades García Lizardi advirtió que la ley vigente es omisa respecto a los retrasos en la hora de salida, las interrupciones y cancelación de vuelos, así como en la denegación del embarque.
Se trata, explicó, que en todos estos casos el permisionario cubra indemnizaciones al pasajero afectado, que no sean inferiores al 25 por ciento del precio del billete de pasaje.
Dijo que actualmente la industria de la aviación civil en México ha registrado severos problemas de orden financiero y laboral que han afectado los derechos tanto de los trabajadores como de los usuarios, aunado a la deficiente política de regulación de tarifas.
La percepción generalizada es que las aerolíneas utilizan el recurso de incrementar las tarifas como mecanismo para subsanar deficiencias administrativas y financieras internas o para incrementar sus márgenes de ganancia sin que estos aumentos correspondan a la mejora del servicio.
Otros problemas se reflejan en la infraestructura insuficiente y el mal servicio, ya que es común observar a miles de personas pernoctando en las salas de espera, sufriendo alteración de horarios, sobreventa de boletos, retrasos y programaciones decididas de manera unilateral.
El legislador señaló que generalmente las justificaciones que dan las líneas aéreas dejan en estado de indefensión al usuario, ya que exponen causas incomprensibles y de carácter técnico.
Añadió que el trato que reciben los usuarios llega a ser incluso discriminatorio y no existe consideración para los clientes que tienen que esperar horas para abordar un vuelo, ya que nada importa a las aerolíneas si el pasajero es discapacitado, está enfermo o es adulto mayor.
La iniciativa fue turnada a las comisiones de Comunicaciones y Transportes y de Estudios Legislativos Segunda del Senado.
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