El ordenamiento fue presentado por el legislador Bob Filner en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos de América para que el Comité del Poder Judicial dictamine en sentido positivo la iniciativa y se permita el ingreso a niños mexicanos para que reciban atención médica gratuita.
El legislador panista explicó en la tribuna que Estados Unidos otorgó durante más de 30 años visas humanitarias enfocadas a la niñez, que se gestionaban en las aduanas de sus fronteras sur con México.
Ello, con el objetivo de permitir el ingreso a niños que reportaban alguna mal formación, cáncer u otra enfermedad degenerativa crónica con el propósito de brindarles atención médica gratuita en centros hospitalarios ubicados en su territorio.
En promedio, unos 250 niños mexicanos semanalmente cruzaban la frontera bajo este tipo de visado, destacó.
Sin embargo, el senador por Baja California manifestó que a partir de lo ocurrido el 11 de septiembre del 2001, la situación cambió radicalmente en razón a que se incrementó una política de seguridad que ocasionó el cierre de programas de visas humanitarias.
“Como resultado, unos 125 mil niños mexicanos se han visto afectados al dejar de beneficiarse de la atención gratuita en hospitales de Estados Unidos, aguijándose su condición de salud y la economía de sus familias”, subrayó Díaz Ochoa.
El punto de acuerdo se turnó a la Comisión de Relaciones Exteriores, América del Norte.
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