México carece de una política exterior hacia el continente africano, por privilegiar la relación bilateral con Estados Unidos.
Lo anterior fue pronunciado en la mesa redonda La Política Exterior de México hacia África en el contexto de 2011, organizada por la Comisión de Relaciones Exteriores África.
El senado Julio César Aguirre Méndez, del PRD, titular de la comisión, señaló que la falta de definición de una estrategia sólida, la imprecisión de los intereses económicos y políticos, así como la ausencia total de una política exterior integral hacia el continente africano.
Recalcó que el Senado se ha propuesto eplorar perspectivas a futuro, “que pueden ser opciones de posibles nuevos ámbitos de acción de esa política integral que sostenemos y exigimos se tenga hacia África”.
A su vez, la consejera Sara Valdés Bolaño, directora general para África y Medio Oriente de la Secretaría de Relaciones Exteriores, externó que es indispensable crear mayor conciencia de la importancia de la actividad internacional de ese país.
Explicó que la relación comercial se incrementó 15 por ciento en 2010, y el intercambio total de bienes y servicios tiene un potencial que debe incrementarse.
En los últimos años, dijo, se ha profundizado el diálogo político, identificado nuevas áreas de cooperación, impulsado intercambios comerciales y se promovió el conocimiento mutuo mediante acciones culturales y de cooperación técnica y científica.
La doctora Hilda Varela Barraza, investigadora de Centro de Estudios para Asia y África del Colegio de México, manifestó que en un estudio realizado por el CIDE se afirma que México tiene una política exterior sin sincronía con su prestigio y las necesidades de su población.
Para la opinión pública mexicana en general, apuntó, no tiene sentido la política exterior hacia África y “cambiar la percepción es la tarea de los que estamos interesados en reconocer su relevancia en un mundo globalizado”.
En tanto, la maestra Indira Isael Sánchez Bernal, profesora del Tecnológico de Monterrey, consideró necesario acrecentar las relaciones con África, América Latina y Asia para tener mayores ventajas económicas y no sólo concretarse a Norteamérica.
No podemos seguir en la misma dinámica que en el siglo XIX pues África tiene un mercado de los más fuertes a nivel continente, que ahora es aprovechado por China, y México debe voltear hacia ese país.
A su vez, el doctor Arturo Ponce Urquiza, académico de la Facultad de Estudios Superiores Aragón, comentó que la atención de las autoridades hacia la revolución de los jazmines ha sido muy pasiva, pues no han considerado que es un asunto de control de precios del petróleo y sobre quién controlará las nuevas fuentes de energía.
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