El Senado aprobó una propuesta del senador Ricardo Monreal Ávila, del PT, para que la Profeco y Cofetel determinen los parámetros mínimos de calidad, tanto de redes de servicios de telecomunicaciones como de servicios proveídos por concesionarios y permisionarios de servicios de telecomunicaciones.
Asimismo, exhortó a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y a la Cofetel, a realizar una medición y cuantificación oportuna, precisa y en términos reales del daño económico causado a los usuarios, a raíz de las fallas que pudieran presentarse en las redes de los proveedores de servicios concesionados.
En ese sentido, pidió a la SCT sancionar a los concesionarios y permisionarios con montos equivalentes al daño económico nominal causado a los usuarios por las interrupciones de servicios.
En tanto, a la Profeco, independientemente de las sanciones que imponga la SCT, solicitó realizar los procedimientos administrativos necesarios y ordene a los concesionarios del servicio móvil la bonificación monetaria que corresponda a los usuarios, como consecuencia de la deficiente prestación del servicio que reciben de los concesionarios.
Al hacer uso de la tribuna senatorial, Monreal Ávila señaló que el 87 por ciento de los usuarios de telefonía móvil son de prepago y las tarifas por las llamadas que realizan son descontadas del saldo de sus cuentas en el preciso instante en que la comunicación es concretada.
El 13 por ciento restante, agregó, son clientes de pos-pago cuyas llamadas son descontadas automáticamente de una bolsa predeterminada de minutos por las que los concesionarios de telefonía celular reciben una tarifa base mensual.
Argumentó que las fallas registradas en los últimos meses en las redes móviles en la Ciudad de México obligan a los usuarios a efectuar más de una llamada para poder entablar una comunicación aceptable.
En tanto, los sistemas de medición de las redes catalogan cada una de esas llamadas interrumpidas como una llamada concretada, y por lo tanto, es cobrada, añadió.
“Aún cuando, por causas imputables a las deficiencias en la red, la llamada concretada tenga una duración mínima de un segundo”, aclaró.
Por ello, precisó, “es injusto que por fallas de los operadores, la gente tenga que pagar dinero extra y no sea compensada adecuadamente”.
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