Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL

* Conferencia de prensa concedida por las senadoras Gabriela Cuevas Barron y Adriana Dávila Fernández( protección humanitaria a niños )

Senadora Gabriela Cuevas Barron (GCB): Buenas tardes a todas, a todos, muchas gracias por estar aquí.

Los hemos convocado el día de hoy para anunciarles una iniciativa que busca reformar la Ley de Migración y que además estará suscrita por senadoras y senadores de distintos grupos parlamentarios: del PRI, del PRD y del PAN.

En este tema es muy interesante, lo hemos trabajado ya entre varias senadoras y senadores, por eso estamos el día hoy aquí la senadora Adriana Dávila, quien preside la Comisión contra la Trata de Personas y pues una servidora Gabriela Cuevas, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores.

La intención de hacer esta iniciativa tiene que ver con el problema que se ha vuelto visible en las últimas semanas, si bien es un problema con el que llevamos viviendo muchos años, se ha vuelto visible a penas hace tres o cuatro semanas, que tiene que ver con los niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados.

Como ustedes saben este tema se vuelve importante en la agenda pública por el incremento exponencial que han registrado los números, no porque este problema no existiera, de hecho el número de niños extranjeros no acompañados que fueron deportados desde México hacia sus países de origen pasó de 2 mil 800 en 2011 a 5 mil 400 en 2013, prácticamente el doble.

De acuerdo con la oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA) esta situación se debe principalmente a que los niños de El Salvador, de Honduras y de Guatemala se ven forzados a huir el desempleo, de la falta de oportunidades económicas y de uno de los peores índices de violencia criminal a nivel mundial, situación que fue confirmada por el Comisionado Nacional de Seguridad hace un par de días al asegurar que el tránsito de niños inmigrantes por México se debe a los elevados índices delincuenciales que padecen los países centroamericanos.

En ese mismo sentido, la ACNUR, la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados, ha señalado que 48 por ciento de los niños escapan de sus hogares por el incremento de la violencia, mientras que 21 por ciento padece abusos y violencia intrafamiliar, estos números nos muestran los graves daños y la situación tan precaria en la que están viviendo estos niños y niñas centroamericanos en sus comunidades de origen, y nos obligan por ello a revisar de manera integral nuestros ordenamientos legales, específicamente aquellos que tienen que ver con la protección internacional.

Varias organizaciones internacionales han recomendado a nuestro país revisar sus protocolos, revisar nuestros ordenamientos y sin duda también ampliar el otorgamiento de visas humanitarias para que los niños que viajan sin compañía de algún adulto o de algún tutor legal, puedan acudir a las autoridades sin temor a ser deportados y gocen plenamente de sus derechos; al día de hoy un niño, una niña que son víctimas de algún delito pues no se atreven ni siquiera a acercarse a una autoridad por miedo a ser detenidos y deportados.

Que quede claro: ningún niño o niña debe ser detenido o deportado por su condición migratoria, ningún niño o niña debe ser expulsado a un territorio en el que su vida, su libertad o su desarrollo corren algún riesgo por la falta de elementos esenciales para su crecimiento normal y digno; por ello estamos proponiendo una reforma a los artículos 74 y 112 de la Ley de Migración, para que todas las niñas, niños y adolescentes migrantes extranjeros no acompañados sean documentados de manera cautelar como visitantes por razones humanitarias, por un periodo que no excederá de los cuatro meses, y cuando concluya este periodo de permanencia autorizado los niños podrán cambiar de condición de estancia sin tener que salir del país sí así conviene a su interés superior.

¿Por qué es importante este tema? Al día de hoy los niños son, se supone que no detenidos porque nuestra ley dice que ya no se criminaliza la migración, pero la realidad es que sí, sí son detenidos, sí están retenidos, están privados de su libertad en las estancias migratorias, hay muy pocos albergues en nuestro país, claramente ni son suficientes y en muchos casos no cuentan ni siquiera con los elementos básicos para su funcionamiento. Lo que estamos buscando con esto es evitar la detención, evitar la deportación inmediata y evitar que como víctimas no puedan siquiera denunciar. 
 
¿Esto cómo se haría? Al nosotros darle un reconocimiento de una condición regular no estarían expuestos a arbitrariedades por falta de las autoridades, pero sí las autoridades mexicanas, que eso ya está en la ley, pero no se cumple, tendrían que hacer una revisión completa, la situación que están viviendo estos niños, niñas y adolescentes, y a partir de eso determinar si son sujetos de protección internacional; es decir, si en algún momento México puede darle la condición de refugiados, dado que pudiera correr riesgo su vida si regresas a sus comunidades de origen.

Para el caso que se les llegue a reconocer la condición de refugiados, es importante señalar que esto no generaría costos mayores para el Estado, para México, ¿por qué? Porque los programas de protección a refugiados gozan de financiamiento internacional y esto se ve en crisis incluso mucho más grandes de la que está viviendo nuestro país en términos migratorios.

Por otro lado, quiero apuntar que esta iniciativa es complementaria con la que hace unos meses presentamos algunas senadoras y senadores, para que en la Ley de Migración se especifique qué procedimiento y qué autoridades deben ser las competentes para determinar el interés superior del niño, ¿por qué? Porque al día de hoy sólo lo determinan las autoridades de migración y la problemática que viven estos niños y niñas sin duda es mucho más amplia que la de su condición migratoria.

En síntesis, el principal objetivo de la iniciativa que anunciamos el día de hoy busca tender las necesidades primordiales de los niños que se ven forzados a salir de sus hogares, permitiéndoles ejercer los derechos que nuestra Constitución ya les reconoce pero que no han podido ejercer.

Antes de ser migrantes, recordemos que son niños y niñas que requieren de nuestra protección y la del Estado mexicano. Ciertamente la protección de los niños centroamericanos es una responsabilidad de sus propios países; sin embargo, cuando los gobiernos no pueden garantizarles seguridad ni oportunidades de desarrollo, la comunidad internacional debe intervenir para asegurar que estos derechos sean respetados, y aquí México puede refrendar ese espíritu hospitalario y generoso que durante muchas décadas fue nuestro sello internacional.

Senadora Adriana Dávila Fernández (ADF): Muchas gracias a la senadora Gaby Cuevas.

Como ustedes saben, recientemente fue presentado el programa Frontera Sur, la semana pasada por el Gobierno federal. En dicho programa, nosotros no encontramos una vinculación estrecha respecto a lo que significa la protección de los niños y niñas migrantes no acompañados.

En este programa sólo se establece la parte regular de lo que significa la migración; es decir, aquellos visitantes que llegan y que se establecen en el país o que somos un país de paso, que quieren ir a Estados Unidos y de una u otra manera, las condiciones o las micas que se entregan tanto del permiso para trabajar o del permiso para visitar en la zona de la frontera sur, bueno, son condiciones que sólo refuerzan la parte de la regularidad de quienes están haciendo este paso; sin embargo, no se atiende de manera correcta, específica, concreta, todo lo que tiene que ver con la migración irregular; es decir, aquellos que no piden permiso para quedarse a trabajar, aquellos que no piden permiso para poder integrarse, ingresar al país y que sólo requieren en sus causas, en sus circunstancias, pues ir a buscar, en el caso de todos los niños, a sus papás que se encuentran en otros países, Estados Unidos, concretamente.

Y para nosotros es fundamental acompañar esta iniciativa que, valga la redundancia, fue iniciativa de la senadora Gabriela Cuevas y nosotros revisando todas las estadísticas que se han venido planteando, estadísticas y datos que no son concretos y no son precisos también, porque no hay un sistema específico de información que nos dé certeza cuántos niños están en esta condición y como Presidenta de la Comisión contra la Trata de Personas, revisamos que dentro de este proceso, estos niños y niñas migrantes no acompañados pueden ser víctimas de trata de personas también, entre otros delitos, incluyendo la delincuencia organizada, el tráfico de drogas, el tráfico de armas, en fin.

Fundamentar esta iniciativa, debemos decir que por supuesto no resuelve el problema general; sin embargo, establece la protección en este lapso de aquellos pequeños que son migrantes no acompañados y que requieren la protección de sus derechos humanos y por supuesto la protección de sus condiciones de pequeños.

Aprovecho esta rueda de prensa también para solicitar al Gobierno federal reforzar todas las medidas de seguridad que tiene que ver con la reunificación familiar, porque hay que recordar que la salida de estos niños de sus países de origen tiene que ver con eso: con buscar un hogar, un hogar que no tiene en sus casas, con reunirse con sus padres, con generar esta reunificación, que además está establecida en la protección superior de la niñez.

Por eso es fundamental que tanto el Gobierno federal como en la parte de las relaciones internacionales, concretamente hacer un llamado a la Secretaría de Relaciones Exteriores para insistir, para platicar, para coordinar el mayor número de los esfuerzos y evitar que los niños sigan saliendo de sus países de origen; buscar que en esas condiciones esos países también colaboren.

Como ustedes saben, somos un país de tránsito, colaboren también para que estos niños tengan en sus países todas las condiciones necesarias y eviten que sean expuestos a una serie de delitos en este trayecto.

Aprovechamos que en la parte de la diplomacia, por supuesto que con todo respeto a la Secretaría de Relaciones Exteriores, tendrá que hacer, tiene que hacer lo propio, pero también este gobierno tiene que exigir en esas condiciones un trabajo en conjunto mucho más coordinado que no dependa sólo de los permisos oficiales o formales.

Hay que recordar que generalmente quien sale de sus países lo hace a través de otros mecanismos que no necesariamente son formales ni oficiales; por eso estamos nosotros haciendo todo este llamado, por supuesto al Gobierno federal.

Creemos que este esfuerzo por supuesto es un granito de arena lo que tiene que contribuirse, pero hay que revisar otros ordenamientos, así es que más allá de los grupos que se vengan conformando, en la Comisión Permanente y demás pues nosotros estamos haciendo todo el trabajo para que a través de las comisiones ordinarias, Relaciones Exteriores, la Comisión de Migración y en la colaboración con la Cámara de Diputados, establezcamos mecanismos mucho más eficientes para la atención y protección de los niños.

Básicamente son los motivos por los que a nosotros nos ha hecho sumarnos a esta iniciativa y decirles a ustedes que seguramente este tema debe de dejar de tratarse manera coyuntural y debe ser parte de la agenda del país, más allá de lo que mediáticamente se ha venido a exponer o se ha expuesto en las últimas semanas, derivado de esta condición.

Estamos a sus órdenes.

GCB: ¿Todo clarísimo?

Pues muchas gracias por estar aquí, estamos a sus órdenes.


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