• Estos oleoductos significan una mayor integración energética entre los dos países, cuyo principal beneficiario sería Estados Unidos, al convertirse en exportador neto de energía hacia México
La Coordinadora del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado. Dolores Padierna presentó un punto de acuerdo para que la Comisión Permanente solicite al Director General de Petróleos Mexicanos informe de manera detallada sobre la asociación con NuStar Logistics, L.P para la construcción del oleoducto Nuevo Burgos y los permisos para modificar los de Burgos y Dos Laredos.
Asimismo, se solicita en el documento, que el Secretario de Energía, en un plazo no mayor de quince días naturales, informe sobre los permisos concedidos para la construcción del oleoducto Nuevo Burgos y la modificación de los de Burgos y Dos Laredos.
“La Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión solicita al Secretario de Energía un informe detallado sobre las medidas que implementará el Gobierno mexicano frente a los anuncios realizados por el presidente de Estados Unidos el pasado 29 de junio para fortalecer la soberanía energética”, se agrega en el punto de acuerdo.
Padierna Luna recordó que el pasado 29 de junio, el presidente de Estados Unidos presentó su estrategia energética, basada en seis iniciativas que buscan instaurar una nueva era de dominación energética de ese país. Uno de los planteamientos de dicha estrategia tiene una íntima relación con nuestro país, pues se trata de la construcción de un oleoducto que permitirá exportar “más energía” a México, al pasar por debajo del “muro” que pretende construir Trump.
“El anuncio tuvo una gran importancia en nuestro país, pues refleja la política de ese gobierno hacia nuestro país. Una caracterizada por el sometimiento en todos los sentidos y la denigración de nuestro país. Sin embargo, es importante centrarse también en los efectos que tiene el anuncio para la soberanía energética de México”, agregó.
La senadora perredista refirió que el proyecto anunciado por Trump derivó de la aprobación de tres oleoductos de la empresa NuStar Logistics, L.P. para exportar petrolíferos a nuestro país. La Secretaría de Estado recalcó que lo anterior reflejaba un cambio en cuanto a las personas a las que se les concedían los permisos de exportación y la autorización para transportar un mayor rango de petrolíferos que durante la administración Obama. Lo anterior, con la finalidad de fortalecer la relación bilateral con nuestro país y robustecer los intereses económicos y de política exterior norteamericana.
El primer permiso, dijo la legisladora, se refiere a la construcción, conexión, operación y mantenimiento de un nuevo oleoducto con la capacidad de transportar cerca de 108 mil barriles de petrolíferos diarios. Este ducto conectará la planta de NuStar Logistics con la planta de gas de Burgos de Pemex.
“Otro de los ductos se refiere a uno ya instalado pero cuya remodelación requería permiso del jefe de estado norteamericano y que se encontraba pendiente de aprobación desde 2014. Este ducto tiene una extensión de 140 kilómetros en suelo estadounidense, y 20 kilómetros en México. El primer permiso permite aumentar 2 kilómetros la longitud y el segundo autoriza la transportación de gas natural y L.P.”, subrayó.
A consideración de la coordinadora parlamentaria, este anuncio refuerza la preocupación de diversos sectores sobre la creciente dependencia de nuestro país a los energéticos norteamericanos. “Tan sólo en los primeros cinco meses del año aumentó en 35% la importación de gasolinas que reportó Petróleos Mexicanos en comparación con el mismo período del año anterior. Lo anterior provocó que 64.5% de las gasolinas que se venden en el país provengan del extranjero. Por si fuera poco, lo anterior se verá alterado en los próximos meses ante los daños que sufrió la refinería de Salina Cruz hace unas semanas, para compensar la reducción en la producción”.
“El anuncio de Trump no deja de ser un anuncio extraño, ya que dentro de los planes del gobierno mexicano no está la importación de petróleo, sino por el contrario, incrementar la producción nacional para recuperar su capacidad de exportación. En la Prospectiva de Petróleo Crudo y Petrolíferos 2016-2030, elaborada por la Secretaría de Energía, se estima que las exportaciones aumentarán de alrededor de 1 millón de barriles por día actuales a 2.3 millones hacia 2030.
Para lograr esta meta, se requeriría aumentar la producción de 2 millones de barriles por día actuales a cerca de 4 millones en 2030. Aunque esta meta se ve difícil de alcanzar, dados los precarios resultados logrados a la fecha de la reforma energética, existe la posibilidad de que en algún momento México tenga la necesidad de importar petróleo para alimentar sus refinerías”, sentenció.
Padierna Luna insistió en que estos oleoductos significan una mayor integración energética entre los dos países, cuyo principal beneficiario sería Estados Unidos, al convertirse en exportador neto de energía hacia México, con lo que además de tener importantes beneficios económicos, podría ser un mecanismo de presión para obligar al país a ceder en otros aspectos, ya que existiría el riesgo permanente de la suspensión del suministro, que en caso de darse, tendría graves consecuencias para México.
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