Como un momento histórico para la niñez mexicana calificó la senadora Lisbeth Hernández Lecona, la discusión de la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, que garantizará el pleno respeto y la protección de las garantías individuales de los menores.
Además, se podrán satisfacer las necesidades de alimentación, salud, educación y sano esparcimiento de este sector de la población, destacó la legisladora por el estado de Morelos.
Por ello, agregó, de aquí en adelante, las familias que ejerzan la patria potestad, tutela o guardia y custodia sin distingo alguno, tendrán la obligación primordial de proporcionar las condiciones de vida suficientes para el sano desarrollo de los pequeños de nuestro país, tal como lo hace una familia.
Dijo que la familia es una institución fundamental para el desarrollo de cada persona, ya que es el núcleo básico de la sociedad, en donde se procura la unión y la entrega, y se generan entre sus miembros valores; en donde se heredan las costumbres y se conservan las tradiciones.
Por tal motivo, tengo la plena convicción que si fortalecemos los lazos familiares, muchos de los problemas a los que se enfrentan nuestros niños irán desapareciendo, ya que la familia es donde se aprende el respeto y la tolerancia, se aprende a vivir bajo principios correctos y que cuando nuestros niños crezcan por haber aprendido esos valores, ellos sabrán gobernarse solos, declaró la senadora priista.
Al intervenir en pro del dictamen por el que se expide la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Hernández Lecona comentó que es imperativo “seguir fortaleciendo una institución como la familia” e hizo la siguiente reflexión: “instruye al niño en su camino y aun cuando fuere viejo, jamás se apartará de él”.
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