• Desde el Senado seguiremos impulsando políticas públicas que garanticen los derechos humanos de los mexicanos, señala la presidenta de la Comisión de Gobernación
Para lograr el crecimiento económico y desarrollo social al que aspiramos, en México no debemos tener cabida a la discriminación aseveró la presidenta de la Comisión de Gobernación en el Senado, Cristina Díaz Salazar, durante su participación en la inauguración Curso Internacional de Alta Formación 2014, que impartió el CONAPRED.
La senadora por el estado de Nuevo León se manifestó por hacer un alto a la discriminación en nuestra sociedad y dejar atrás la intolerancia y el maltrato en todas sus formas, toda vez que, México está cambiando radicalmente sus relaciones inter sociales y aspira a ser una sociedad próspera, justa e igualitaria.
Díaz Salazar reafirmó su compromiso para trabajar desde la Cámara Alta en la generación de políticas públicas que doten y garanticen a los individuos el respeto a sus derechos humanos.
Es necesario trabajar en la sensibilización de los tres niveles de gobierno para que se cumpla con el objetivo de eliminar las disposiciones administrativas que favorecen o toleran prácticas discriminatorias, dijo.
La reforma constitucional del 2011, -añadió-, y algunos de los temas discutidos en estos 24 meses de trabajo legislativo, donde se modificó la Ley de Atención a Víctimas o la Ley de Protección de los Derechos de los Periodistas y lo mismo para las personas que trabajan en organizaciones civiles, no servirán sí no trabajamos de manera coordinada en todos los sectores gubernamentales, advirtió.
La senadora Cristina Díaz, reconoció el trabajo realizado por el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED) por promover una cultura antidiscriminatoria para que haya garantía de la igualdad de trato y goce de los derechos humanos.
En la inauguración del evento, donde estuvieron presentes José Ignacio Rubí Salazar, subsecretario de Inclusión Laboral de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STyPS) y Javier Hernández Valencia, representante en México de la oficina del Alto comisionado de la ONU, para los derechos humanos, Díaz Salazar resaltó que la discriminación es lamentablemente un fenómeno ligado siempre a la pobreza a la marginación, pero sobre todo a la ignorancia, a la falta de educación.
Asimismo, indicó que para poder lograr tener comunidades que vivan en tranquilidad y prosperidad, se debe respetar y garantizar el proceso de los derechos humanos.
“De no ser así, difícilmente podremos tener un México en paz y una comunidad próspera pues la discriminación es un factor de desintegración social, desde luego, también propicia la ruptura del tejido social”, apuntó.
Por su parte, Javier Hernández Valencia, representante en México de la oficina del alto comisionado de las Organizaciones de las Naciones Unidas, indicó que a pesar de que México ha realizado varias modificaciones a sus leyes para garantizar los derechos humanos, aún falta un gran camino por recorrer.
“Ya se logró un paso importante con la reforma constitucional, ahora debemos completar la aptitud para saber dónde se encuentra el cambio de paradigma y actuarlo”, precisó.
Por ello, dijo, es importante que en coordinación con los vigilantes del respeto y garantía de los derechos en México, se establezca un diálogo multilateral a fin de acatar las recomendaciones que emite la ONU y lograr así cumplir con los tratados internacionalistas.
A su vez, el presidente del CONPRED, Ricardo Bucío Mejía, coincidió con la senadora para establecer un mecanismo donde los servidores públicos ejerzan, en igualdad de condiciones, los derechos de todas las personas.
“Es una gran dificultad en razón de que se ha ido construyendo un sistema de gran cantidad de exclusión de personas, de ahí la necesidad de las políticas públicas garanticen el respeto de las garantías humanas”, aclaró.
Finalmente, José Ignacio Rubí Salazar, encargado de inaugurar el curso, dio un breve informe de lo que ha venido realizando su dependencia en materia de inclusión.
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