Número-119
- México participa en política exterior para fortalecer lazos económicos, sociales, de energía, seguridad y alimentación con el resto del mundo: subsecretaria de SRE.
- Coinciden panelistas en que cooperación servirá para enfrentar los retos de la región y propiciar desarrollo de los países.
El diálogo parlamentario con América Latina y el Caribe es un asunto prioritario para el Senado de la República, como puente para reforzar e impulsar iniciativas en materia económica, democracia, de justicia y derechos humanos, aseguró la presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores América Latina y el Caribe, Mariana Gómez del Campo Gurza.
Explicó que el panel “Diálogo, Cooperación e integración de América Latina y el Caribe” --donde fungió como moderadora-- tiene por objeto discutir ideas sobre el rumbo de la economía de la región, que permitan al Senado cumplir con la obligación constitucional de analizar la política exterior y ser promotores del cambio.
En el primer día del foro “México en el Mundo: Diagnostico y Perspectivas de las Relaciones Internacionales”, la senadora señaló que América Latina y el Caribe es una de las zonas económicas más activas a nivel globaly, de acuerdo con el Banco Mundial (BM), la región ocupa el tercer lugar entre las economías, por lo que los países de la región se han pronunciado por reforzar la influencia y presencia latinoamericana en el escenario internacional.
Por su parte, Vanesa Rubio Márquez, subsecretaria para América Latina y el Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), mencionó que para la Cancillería es una prioridad el acercamiento con los países de esta zona, ya que se requieren elementos de cooperación en agricultura, prevención de desastres naturales, seguridad, menores migrantes no acompañados, energía, educación, desarrollo de pequeñas y medianas empresas, así como intercambio de información migratoria.
Aseguró que, para la política exterior de México, los vínculos multilaterales y bilaterales son una prioridad porque forman parte del motor de desarrollo interno de México.
Jordi Bacaria Colom, director de la revista Foreing Affairs, dijo que las integraciones económicas de los países deben estar enfocadas a la armonización de la reglas, crear plataformas comunes, homologar estándares y tener acuerdos sobre derechos de propiedad intelectual.
Comentó que el futuro de la integración de América Latina debe estar enfocado en la integración por temas de problemas comunes como la desigualdad, seguridad, logística de transporte en materia de comercio.
Víctor Villalobos Arámbula, director general de del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura, enfatizó que entre los temas prioritarios están la seguridad alimentaria para la región, por lo que se requiere que países con mayor producción en alimentos apoyen a aquellos que carecen de alimentos.
Señaló que el éxodo de niños no acompañados, es un problema que se origina principalmente en territorios rurales, por lo que es urgente invertir en para mejorar la calidad de vida de las familias campesinas con medidas inmediatas, de mediano y largo plazo.
Jorge Familiar Calderón, vicepresidente para América Latina y el Caribe del Banco Mundial, manifestó que las economías de la región tienen que desarrollar estrategias de crecimiento en infraestructura, educación, mejorar el clima de negocios, incrementar la competencia, creación de empleos, protección social que no sólo busque evitar que la gente regrese a condiciones de pobreza, sino que los inserte en la productividad y crecimiento de la región.
Álvaro Uribe Vélez, ex presidente y senador de Colombia, resaltó la necesidad de estrechar los acuerdos y cooperación entre los países de la región para enfrentar los desafíos venideros, como el abastecimiento del agua, la disponibilidad de alimentos, acceso al sistema de pensiones, desempleo juvenil y seguridad.
Comentó que en los próximo años llegarán a la edad de retiro 100 millones de trabajadores latinoamericanos y caribeños; de estos 50 por ciento no habrá constituido reservas pensionales, y 30 por ciento de ellos estarán en condiciones extremadamente pobres.
Señaló que si bien hay temas positivos en los acuerdos entre los países de la región, existen problemas como el crecimiento de zonas urbanas, el incremento de consumo de drogas de la población joven, el aumento del déficit, y los grupos terroristas, entre otros, que vulneran el crecimiento y desarrollo de las naciones.
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