Al clausurar el Primer Foro Nacional de Lactancia Materna, la senadora Maki Esther Ortiz Domínguez aseguró que a fin de que los índices de lactancia materna en nuestro país aumenten, es necesario que las madres cuenten con mayores permisos y puedan acceder a lactarios en sus lugares de trabajo.
Para ello, la legisladora señaló que se debe plantear un proyecto estratégico que incida en la Ley Federal del Trabajo y que, en coordinación con la Secretaría de Educación Pública y la Secretaría de Salud, informe a médicos, maestros y a la población en general sobre la importancia de la leche materna.
En este sentido, la doctora Chessa Lutter, asesora principal de Alimentación y Nutrición de la Organización Panamericana de la Salud, señaló que entre las determinantes para que una madre decida amamantar se encuentra la posibilidad de llevar a cabo su decisión, es decir, contar con un ambiente propenso y el apoyo médico, en el trabajo y en el ámbito familiar y social.
Lutter señaló que aún entre el personal de salud existe una falta de conocimiento y habilidades clínicas y de comunicación con la mujer sobre el tema. Por ello, afirmó, existe un reto en nuestro país para instaurar una cultura de lactancia que valore a ésta como base del desarrollo de capital humano, ya que incluso el amamantamiento mejora el cociente intelectual de 3 a 5 puntos.
Por su parte, Teresita González de Cossío, doctora en nutrición, apuntó al hecho de que en México nos hemos quedado con el mensaje de que los meses de lactancia son únicamente seis cuando éstos corresponden únicamente a los meses de lactancia exclusiva y que lo recomendable son dos años de amamantamiento.
González de Cossío afirmó que la leche materna es un tejido que además de tener nutrimentos, contiene un paquete inmunológico muy importante que dura a lo largo de todo el periodo de lactancia. Al mismo tiempo, reveló que la carga anual al sistema de salud por infecciones y muertes asociadas a prácticas inadecuadas de lactancia durante el primer año de vida de los infantes, junto al gasto de las familias en fórmula láctea, se estima en 5 mil 400 millones de pesos al año.
De esta manera, hizo énfasis en que el Gobierno Federal debe hacer cumplir el Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna, el cual estipula que las etiquetas de los sustitutos de leche materna no deben idealizar el uso de la fórmula y que los profesionales de la salud no deben fomentar el uso de los mismos ni suministrar muestras gratis a las nuevas madres.
Al respecto, Fernanda Cobo Armijo afirmó que este tipo de normas son violadas reiteradamente, por lo que es necesario un mecanismo de evaluación efectivo y que la agencia regulatoria encargada de revisar los riesgos sanitarios, el etiquetado y la aplicación de normas dentro de los hospitales se “ponga la camiseta”, verifique y sancione.
Igualmente, Cobo Armijo expresó que debe existir una mejora a Ley Federal del Trabajo, principalmente en cuanto al incremento de los descansos para lactar y la obligación de contar con espacios lactarios.
Beatriz Valdés Pliego de Compartamos Banco dijo que de acuerdo a la Organización Internacional del Trabajo, entre los factores que impactan la duración de la lactancia una vez que la mujer regresa a laborar se encuentran el regreso antes de que se cumplan dos meses desde el parto, el tiempo de traslado y la distancia hacia el lugar de trabajo.
Igualmente, apuntó a las instalaciones adecuadas para la lactancia, la actitud de la compañía y de los colegas hacia la madre y resaltó la importancia de esquemas de flexibilidad laboral como horarios de trabajo flexibles, trabajo con sede remota o desde casa, horario mixtos para mujeres al incorporarse después de la incapacidad por maternidad y jornadas reducidas.
Isabel Crowley, representante de UNICEF en México, afirmó que ahora es el momento crucial para tomar acción e impulsar políticas públicas y leyes, así como promover campañas de promoción de la lactancia materna orientadas a las madres, a sus parejas y a sus familias y que les informen de los beneficios de la lactancia.
Por otro, lado reiteró el compromiso de esa organización a seguir trabajando a favor de los derechos de la niñez y de la lactancia materna ya que, dijo, “es el mejor comienzo que se le puede dar a la vida de los niños mexicanos.”
José Ignacio Ávalos, presidente fundador de Un Kilo de Ayuda, señaló que lo más importante es crear un ambiente favorable a favor de la lactancia y a nombre de su organización se comprometió a hacer del tema de la lactancia su bandera más importante, a fin de poder entregar “buenas cuentas a los niños de México”.
Finalmente, la senadora Maki Esther Ortiz Domínguez hizo énfasis en la necesidad de dar accesibilidad a las mujeres en sus lugares de trabajo a lactarios, así como la accesibilidad a los niños a través de los bancos de leche a fin de evitar el consumo de leche de fórmula.
Asimismo, se comprometió a proponer puntos de acuerdo para que la Cámara de Diputados incluya este tema en su agenda y asigne los recursos necesarios para afrontar el problema de la disminución de lactancia materna que actualmente aqueja a nuestro país.
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