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La Cámara de Senadores aprobó reformas a la Ley General de Salud, para incluir como acción prioritaria de la atención materno-infantil la aplicación del Tamiz Neonatal Ampliado en todas las instituciones públicas y privadas.
El estudio abarca la revisión de retina y tamiz auditivo al prematuro, la aplicación del tamiz oftalmológico neonatal a la cuarta semana de nacimiento, para la detección temprana de malformaciones que puedan causar ceguera y su tratamiento, así como la atención del niño y su vigilancia durante el crecimiento y desarrollo y promoción de la integración del bienestar familiar.
Con la aprobación de este dictamen se brindará atención al niño y se vigilará de su crecimiento, así como su desarrollo integral, incluyendo la promoción de la vacuna oportuna, atención prenatal y la prevención y detección de condiciones y enfermedades hereditarias congénitas y en su caso atención que incluya la aplicación de la prueba del tamiz ampliado.
Al presentar el dictamen, la presidenta de la Comisión de Salud, la senadora Maki Esther Ortiz Domínguez, puntualizó que el objetivo del tamiz es detectar la existencia de una enfermedad o deficiencia congénita antes de que se manifieste y consiste en el análisis de unas gotas de sangre obtenidas del cordón o talón del pie, al nacer.
Si las enfermedades son detectadas a tiempo --explicó-- se pueden controlar, evitando complicaciones del hígado, cataratas, problemas pulmonares, fibrosis quística, muerte súbita, o trastornos cardiacos o neuromusculares.
La senadora panista agregó que según estudios realizados, se sabe que uno de cada mil recién nacidos aparentemente normales, tienen en forma latente una enfermedad que puede ser de consecuencias graves y en ocasiones irreversibles.
“Estas enfermedades pueden causar retraso mental en menores, epilepsia o ceguera, entre otros que se manifiestan por lo general después del nacimiento”, puntualizó.
En otro dictamen avalado por el pleno del Senado, se establece que la Secretaría de Salud deberá promover que en todo establecimiento de atención obstétrica se solicite a las mujeres embarazadas su consentimiento para obtener de manera voluntaria y altruista su sangre placentaria.
Esto, explicó la legisladora, a fin de contar con células troncales para uso terapéutico o de investigación, por medio de una carta de consentimiento informado garantizándole en todo momento su plena voluntad, libertad y confidencialidad.
La legisladora expuso que la investigación con células progenitoras es uno de los grandes avances científicos alcanzado por la bio-ciencia y que las células troncales son las que tienen la capacidad de regenerar tejidos dañados, órganos y curar enfermedades graves o incurables.
La sangre del cordón umbilical rica en este tipo de células es recolectada y procesada para separarlas y almacenarlas a fin de tratar o curar enfermedades, en una especie de remplazo por células nuevas del cordón umbilical llamadas células madre o troncales, capaces de crear la mayoría de los componentes de la sangre humana como sistema inmunológico o medula ósea, agregó.
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