Número-135
- Con la aplicación de la NOM en Igualdad Laboral y No Discriminación se han mejorado las condiciones de trabajo y se conoce el estado que guarda la igualdad de género en los centros de trabajo.
La senadora Alejandra Lagunes Soto propuso reformar los artículos 14 y 36 Bis de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público, para que las empresas que hayan aplicado políticas y prácticas de igualdad de género obtengan “una ventaja en los procedimientos de licitación para la adquisición de bienes, arrendamientos o servicios que no utilicen la evaluación de puntos y porcentajes”.
La legisladora señaló que, de acuerdo con la propuesta, en los procedimientos de licitación pública para la adquisición de bienes, arrendamientos o servicios, se dará preferencia a las empresas que apliquen prácticas de igualdad de género conforme a la certificación correspondiente.
La senadora del Grupo Parlamentario del PVEM señaló que la Ley de Adquisiciones incorpora como criterio de participación a las empresas que hayan aplicado políticas y prácticas de igualdad de género, conforme a la certificación respectiva, otorgando puntos adicionales al evaluar una propuesta para procedimientos, bajo el método de evaluación de puntos y porcentajes.
Agregó que en octubre de 2015 se publicó en el Diario Oficial de la Federación la Norma Mexicana NMX-R-025-SCFI-2015 en Igualdad Laboral y No Discriminación, cuyo objetivo es reconocer a los centros de trabajo que cuentan con prácticas en materia de igualdad laboral y no discriminación, para favorecer el desarrollo integral de las y los trabajadores.
Esta certificación, señaló, está dirigida a centros de trabajo públicos, privados y sociales establecidos en México, y para obtenerlo, deberán recibir una auditoría de tercera parte, para verificar que sus políticas y prácticas cumplen con los requisitos de igualdad laboral y no discriminación.
Los ejes principales de la certificación son: incorporar la perspectiva de género y no discriminación en los procesos de reclutamiento, selección, movilidad y capacitación; garantizar la igualdad salarial; implementar acciones para prevenir y atender la violencia laboral; y realizar acciones de corresponsabilidad entre la vida laboral, familiar y personal de sus trabajadoras y trabajadores, con igualdad de trato y de oportunidades.
Alejandra Lagunes resaltó que con este mecanismo se han generado procedimientos para mejorar las condiciones de trabajo. Con su implementación, se ha diagnosticado la situación que guarda la igualdad de género y se han creado condiciones de mayor equidad, estabilidad y para desarrollar un mejor ambiente de trabajo.
“Es necesario garantizar que los proveedores del gobierno promuevan una cultura de respeto a las diferencias, de igualdad de oportunidades por lo que resulta indispensable que todos los procedimientos de licitación incentiven que un mayor número de empresas adopten un modelo de equidad de género”, puntualizó.
La propuesta se turnó a las comisiones de Igualdad de Género y de Estudios Legislativos, Primera.