Número-048
- México tiene pendiente la resolución de un asunto que afecta a más de dos millones de personas.
La senadora Claudia Ruiz Massieu y el senador Miguel Ángel Osorio Chong pidieron, a través de un punto de acuerdo, que el titular del Poder Ejecutivo Federal remita al Senado, para su aprobación, el Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo y su Recomendación 201, relativos al trabajo digno para las trabajadoras y los trabajadores domésticos.
La propuesta, turnada a la Comisión de Relaciones Exteriores, prevé que en uso de las facultades exclusivas que le confiere la Constitución a la Cámara de Senadores, se retome el análisis y proceso deliberativo en torno a la ratificación de dichos instrumentos.
Además, solicitaron a las instancias correspondientes de las Secretarías del Trabajo y Previsión Social, Salud, Economía, Hacienda y Crédito Público, el Instituto Mexicano del Seguro Social y demás dependencias del Poder Ejecutivo Federal, realizar el acompañamiento necesario en el marco del proceso deliberativo del Poder Legislativo.
En Tribuna, la senadora Ruiz Massieu del Grupo Parlamentario del PRI, destacó que los acuerdos se generaron para reconocer que el trabajo doméstico sigue siendo subvaluado y realizado, en su mayoría, por personas vulnerables a la discriminación y violaciones a los derechos humanos.
El Convenio considera que en países en vías de desarrollo existen pocas oportunidades de empleo formal, por lo que las y los trabajadores domésticos constituyen una proporción importante de la fuerza laboral y se encuentran entre los más marginados, sin acceso a prestaciones básicas y con jornadas excesivas.
Al mismo tiempo, precisó que las labores son realizadas principalmente por mujeres y niñas migrantes u originarias de comunidades desfavorecidas, particularmente expuestas a la vulneración de sus derechos básicos.
La legisladora aseguró que al no firmar los acuerdos, México tiene pendiente la resolución de un asunto que afecta a más de dos millones de personas. La falta de regulación, explicó, deja expuestos a las y los trabajadores domésticos mexicanos a agravios como despidos injustificados, maltratos e, incluso, al acoso sexual laboral.
La ratificación del Convenio 189 de la Organización Internacional del Trabajo por México y su Recomendación 201, “es un imperativo social al que no podemos hacer oídos sordos; particularmente, por lo que toca a las facultades de esta soberanía”, puntualizó.
---000---