Número-668
- Dispone que la Ciudad de México sea una entidad federativa, con autonomía constitucional en todo lo concerniente a su régimen interior y organización político-administrativa.
- Sugiere que el gobierno de sus demarcaciones territoriales esté a cargo de las Alcaldías.
En el Senado de la República comenzó la discusión del proyecto de decreto que reforma diversas disposiciones de la Constitución para modificar la naturaleza jurídica del Distrito Federal.
La propuesta plantea que la Ciudad de México sea una entidad federativa, con autonomía constitucional en todo lo concerniente a su régimen interior y a su organización política y administrativa. En ese sentido, tendrá, al igual que los estados de la Unión, la posibilidad de darse su propia Constitución.
Sugiere que el gobierno de sus demarcaciones territoriales esté a cargo de alcaldías, órganos político-administrativos que se integrarán por un alcalde y por un concejo, electos por votación universal, libre, secreta y directa, para un período de tres años.
Además, prevé que la Ciudad de México será --como hasta ahora-- la sede de los poderes de la Unión y capital de los Estados Unidos Mexicanos.
El proyecto también dispone que la dirección de las instituciones de seguridad pública de la Ciudad de México corresponderán al Jefe de Gobierno, en los términos que establezca la Constitución y las leyes locales, así como la facultad de nombrar y remover libremente al servidor público que ejerza el mando directo de la fuerza pública.
Prevé que el Ejecutivo Federal podrá remover al servidor público que ejerza el mando directo de la fuerza pública, por causas graves que determine la ley que expida el Congreso de la Unión.
A propuesta de las comisiones dictaminadoras, el Pleno de la Cámara de Senadores acordó incluir diversas modificaciones al articulado del dictamen que quedó de primera lectura el 14 de diciembre de 2014.
El senador Enrique Burgos García precisó que se incluyeron cambios para que se establezca una Asamblea Constituyente específica, integradas por 100 diputados que ejercerán su encargo de forma honorífica y deberán aprobar la Constitución Política de la Ciudad de México.
El presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales dijo que este órgano estará conformado por 60 diputados constituyentes, electos por el principio de representación proporcional en una sola circunscripción de la Ciudad de México, y 40 designados por órganos de representación federal y local.
Detalló que los actuales órganos de gobierno legislativo, ejecutivo y judicial del Distrito Federal se trasformarán en poderes locales con las mismas funciones.
Burgos García agregó que con la reforma se encomienda la titularidad de la Administración Pública Local al jefe de gobierno, con características relevantes en la concepción unitaria de la Ciudad para su adecuado funcionamiento en las haciendas pública, presupuestal, patrimonial, prestación de servicios y seguridad pública.
A nombre de la Comisión del Distrito Federal, su presidente, el senador Mario Delgado Carrillo indicó que con esta reforma deja de existir el Distrito Federal para darle paso a la Ciudad de México, sede de los Poderes de la Unión.
Con ella, dijo, se reconoce expresamente a la Ciudad como integrante del pacto federal con carácter libre y soberano, por consecuencia quedan subsanados los derechos políticos de los habitantes de la Ciudad, ya que podrán opinar sobre las reformas constitucionales. Como parte de esta autonomía se deberá crear su nueva Constitución.
Precisó que el jefe de Gobierno nombrará directamente al secretario de Seguridad Púbica y el Senado de la República no podrá remover al titular del Ejecutivo local. Se mantiene la exención que tienen los inmuebles de la Federación ubicados en la Ciudad de México del pago del predial, asimismo se mantiene el esquema de deuda pública donde los adeudos de la ciudad son deuda federal.
El senador manifestó que se reconoce la condición de capital de la República Mexicana, en los artículos 44 y 122 se mandata al Congreso a considerar un bono de capitalidad por ser la capital del país, que será compartido con la Federación.
Por la Comisión de Estudios Legislativos, la senadora Graciela Ortiz González destacó que el proyecto de decreto incluye modificaciones a un total de 50 artículos constitucionales, nueve relativos al régimen de la Ciudad de México y diversas modificaciones para hacer referencia a la nueva entidad de la República.
Dijo que la integración, organización administrativa y facultades de las alcaldías se establecerán en la Constitución Política y en las leyes locales, con base en las atribuciones que actualmente confiere la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal a las delegaciones, y que accederán a los recursos de los fondos y ramos federales en los términos que prevé la Ley de Coordinación Fiscal.
La reforma política del Distrito Federal, enfatizó, representa “un paso importante” para recuperar la eficacia del sistema local, a través de la reorganización de sus instituciones, y dar soluciones eficientes a las demandas sociales de los capitalinos.
A nombre de la Comisión de Estudios Legislativos, el senador Alejandro Encinas Rodríguez expresó: “Hemos logrado un gran acuerdo político, el más importante”, que crea una nueva entidad, que contará con un Congreso Constituyente, una Constitución propia, a la que se reconoce como ciudad capital y con pleno goce de derechos políticos para sus habitantes.
Afirmó que hay temas que no se resuelven en esta reforma constitucional, pero que puede solventar el propio congreso constituyente, como las facultades de las alcaldías y sus consejos, así como establecer el referéndum ciudadano para que sean los capitalinos quienes puedan avalar y ratificar la Constitución que surja de dicha asamblea.
Consideró que la aprobación de la enmienda debe dar paso a la discusión sobre el rediseño del municipalismo, que en México ha fracasado; la revisión a fondo de las facultades y competencias de una verdadera República federal que en este momento se encuentra en un proceso acelerado de centralización, como parte de las nuevas modalidades de gobierno.
Entre otros cambios que incluyeron las comisiones al dictamen, destaca que la Constitución Política de la Ciudad de México establecerá la competencia de las alcaldías, dentro de sus respectivas jurisdicciones, en los ámbitos de gobierno, administración, protección civil, obras, servicios y promoción económica.
Asimismo, corresponde a la Legislatura de la Ciudad de México revisar la cuenta pública del año anterior, por conducto de su entidad de fiscalización, la cual será un órgano con autonomía técnica y de gestión en el ejercicio de sus atribuciones, y decidir sobre su organización interna, funcionamiento y resoluciones, en los términos que disponga su ley.
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