BOLETÍN-1277 Revisan en Senado política de crédito para el campo.
La Comisión de Desarrollo Rural se reunió con funcionarios, representantes de organizaciones agropecuarias y especialistas para revisar la política de crédito hacia el campo.
Senadores de la Comisión de Desarrollo Rural se reunieron con funcionarios, representantes de organizaciones agropecuarias y especialistas para revisar la política de crédito, seguro y comercialización hacia el campo.
En la reunión, que encabezó el senador Heladio Ramírez López, se destacó que los créditos no llegan a los medianos y pequeños productores por la falta de garantías, por lo que se consideró que las reglas de operación para el financiamiento en el sector agropecuario deben flexibilizarse.
Luis Madrazo Lajous, jefe de la Unidad de Banca de Desarrollo de la SHCP, advirtió que el empleo en el medio rural es el que menos se ha recuperado.
En cambio, hubo un incremento de 87 por ciento en el número de beneficiados con financiamiento por parte de la Financiera Rural y de Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA).
En tanto, Rodrigo Sánchez Mújica, director general de FIRA, dijo que en los últimos cuatro años la institución canalizó 400 mil millones de pesos al sector agropecuario y atendió a un millón 500 mil productores.
Dijo que las políticas crediticias son fundamentales en la lucha contra la pobreza, por lo que es necesario contar con un sistema de financiamiento más completo y moderno, que permita mayor accesibilidad a los pequeños productores.
El funcionario argumentó que sólo seis por ciento de los productores están completamente integrados al mercado porque cuentan con la tecnología más avanzada para riego, fertilización, mejora de semillas y maquinaria.
Agregó que el 18 por ciento están parcialmente integrados al mercado y 76 por ciento no tienen acceso a éste, por lo que se encuentran en un nivel de autoconsumo y sobrevivencia.
El aumento en el número de productores con acceso a servicios financieros, advirtió, es el principal reto en el otorgamiento de préstamos, ya que se prevé una ampliación de riesgos, pero esta situación podría solucionarse con innovación en los productos financieros, tecnología y conocimiento.
A su vez, Leonel Ramírez Farías, director general de Agromoney, explicó que entre los principales riesgos que afectan el ingreso de los campesinos son el cambio climático, que impacta en el rendimiento de las tierras, y la volatilidad en el precio de los bienes.
Para los próximos 10 años, dijo, dicha volatilidad en el precio de productos agrícolas y pecuarios será más frecuente y de mayores magnitudes, y ello representará una “amenaza para la seguridad alimentaria”.
Ignacio Loyola Vera, director general de AGROASEMEX, expuso que de las 21 millones de hectáreas sembradas cada año a través de créditos, “cinco millones están habilitadas, pero de ellas aproximadamente 2.4 tienen un seguro comercial”.
Dijo que del total de la superficie protegida por esta institución del gobierno federal para cubrir los riesgos agrícolas y ganaderos, el 79 por ciento se opera a través de seguro catastrófico y 21 por ciento en seguros comerciales.
Destacó que existe mayor contratación de seguros en el norte del país en estados como Tamaulipas, Sonora y Sinaloa, mientras que en el sur es muy limitada.
Por su parte, Pedro Díaz Hartz, presidente de la Unión Nacional de Productores de Arroz, expuso que en los últimos 10 años la tendencia del crédito “ha sido a la baja”, pues en 1997 fue de 5.9 por ciento y en 2007 disminuyó hasta 1.29 por ciento.
Por ello, se pronunció por una mayor inversión en el sector y que ésta sea direccionada a la investigación, innovación y desarrollo de actividades empresariales que favorezcan al campo en todos los eslabones de las cadenas productivas.
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