Número-303
- Senadores del PRI y PAN respaldan nombramiento de Eduardo Tomás Medina Mora Icaza.
- En tanto, senadores del PRD, PT y también del PAN, manifiestan que dicho personaje no cumple con los requisitos para ocupar el cargo.
En votación económica, el Pleno de la Cámara de Senadores aprobó el dictamen por el que se determina que los ciudadanos propuestos en la terna presentada por el Presidente de la República para sustituir al Ministro Sergio Armando Valls Hernández, reúnen los requisitos de elegibilidad para ocupar el cargo de Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Antes de la votación se desarrolló un debate en el que los senadores manifestaron sus posiciones alrededor de este proceso de elección del nuevo ministro de la SCJN, a fin de ocupar la vacante que generó el fallecimiento del ministro Sergio Armando Valls Hernández, en diciembre pasado.
La senadora Dolores Padierna Luna, del Partido de la Revolución Democrática, en contra del dictamen, aseguró que Eduardo Medina Mora Icaza no cumple los requisitos ineludibles para ser ministro. La buena reputación y honorabilidad no se construye desmintiendo críticas y el hecho de que él mismo haga campaña para mejorar su imagen, es porque reconoce su mala reputación, consideró.
Medina Mora, dijo, pertenece al grupo salinista que está de regreso en la Presidencia, y con su voto el PRI, el PAN y el Verde, elegirán al ministro incómodo. Asimismo, enfatizó que el Senado no puede hacer oídos sordos a más de 52 mil firmas recolectadas para que no se le designe al cargo propuesto.
En tanto, a favor del dictamen, el senador del Partido Acción Nacional, Daniel Ávila Ruiz, subrayó que Acción Nacional debe tener presente al candidato que ha sido capaz de enarbolar una postura consistente con la Constitución en defensa a la vida, al que postuló que la vida del ser humano es el más elemental de todos los derechos y al que sabe que el trabajo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación radica en observar y proteger los derechos contemplados en la Carta Magna y en las leyes federales y locales, a favor de los mexicanos.
“No nos hagamos bolas”, expresó. En Acción Nacional este tema es de principios y valores, y de respeto a la dignidad de la persona humana y respeto a la vida. En este sentido, Ávila Ruiz manifestó su voto a favor de Medina Mora.
La senadora del Partido del Trabajo, Layda Sansores, dijo que en la historia de México nunca se habían presentado las circunstancias actuales en contra de un aspirante a ministro de la SCJN, es decir, que se presentaran 52 mil firmas ciudadanas y la movilización de organizaciones sociales, académicos, investigadores, cineastas, activistas y la sociedad en general para pedir que no sea elegido.
Sentenció que los senadores han dejado de ser voceros de los ciudadanos, y han asumido una actitud sumisa y de conveniencia ante la designación de un personaje que negó su responsabilidad en represiones de movimientos ciudadanos, se opuso a que las mujeres decidan sobre su propio cuerpo y violó derechos humanos de indígenas.
Por su parte, el senador Omar Fayad Meneses, del Partido Revolucionario Institucional, felicitó el trabajo de la Comisión de Justicia del Senado, por el dictamen sobre la terna de aspirantes a ministro de la SCJN. Dijo que Felipe Alfredo Fuentes, Horacio Armando Hernández y Eduardo Medina Mora cumplen con los requisitos que la ley delinea para quien pretende ocupar el cargo de ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Pidió a los legisladores no descalificar a la comisión porque hizo un trabajo serio y puntual; además de que esa actitud abona a una crisis de credibilidad. Señaló que se debe traducir el texto de la Constitución objetivamente, para plasmarlo en los dictámenes de las comisiones que conforman al Senado de la República, y de ese modo lo realizó la comisión dictaminadora que dio su aval a la idoneidad de los aspirantes.
El senador del PAN, Javier Corral Jurado, aseguró que con la designación de Eduardo Medina Mora se da un golpe demoledor a la SCJN en su autonomía, pues argumentó que con ello no se fortalece la figura y la confianza del Poder Judicial sino que la mina con la imposición a modo del Ejecutivo Federal.
Aseveró que el daño a la Corte, bajo la dinámica de cuotas de partidos, es irreversible y con lo cual se envía un mensaje funesto y ominoso para aquellos que han forjado una carrera judicial, que se han sometido a procedimientos y principios legales y constitucionales que rigen la tarea jurisdiccional, profesionalismo, objetividad, imparcialidad y excelencia, por lo que, dijo, los méritos no cuentan.
El senador Alejandro Encinas Rodríguez, consideró que lo relevante para la elección del nuevo ministro de la SCJN es evaluar su perfil, identificar si ese es el que se quiere para integrar un órgano que debe garantizar una autonomía plena del Poder Ejecutivo en su desempeño, e impulsar una reforma profunda al Poder Judicial.
Enfatizó que la Corte no puede tener un representante --Eduardo Medina Mora-- de la razón del Estado, necesitamos un ministro que represente los intereses y la razón de la sociedad y por ello, en la evaluación de su desempeño, independientemente de sus filiaciones políticas y partidarias, su filiación con el PAN y los compromisos de haber trabajado en las áreas de inteligencia, no hay certeza ni garantía para lograr el objetivo de una Corte reformada, autónoma, que haga cumplir la ley.
El senador Isidro Pedraza Chávez, del PRD, recordó que la SCJN es responsable de defender el orden establecido por la Constitución, mantener el equilibrio entre los distintos poderes y ámbitos de gobierno, por medio de las resoluciones judiciales que emite, además de solucionar de manera definitiva asuntos relevantes para la sociedad.
Por ello, dijo que requiere estar integrada “por los mejores perfiles” y por mexicanos que pueda aportar a la construcción de un marco normativo que mantenga vigente del Estado democrático de derecho, así como de hombres y mujeres de gran calidad moral, honestidad, independencia e imparcialidad.
La senadora Angélica de la Peña Gómez, también del PRD, consideró que Felipe Fuentes Barrera y Horacio Hernández Orozco cuentan con los supuestos que señala la Constitución para ocupar la vacante en la SCJN.
En cambio, dijo que el caso de las tres indígenas acusadas de privar de su libertad a seis policías federales bastaría para demostrar que Eduardo Medina Mora “no tiene las condiciones de idoneidad que establece el último párrafo del artículo 95 de la Constitución”.
El senador Adán Augusto López Hernández, del PRD, en contra del dictamen, aseguró que hoy, algunos “están mandando al diablo” a una de las instituciones pilar del sistema político mexicano. Se nombrará a un “oscuro burócrata” en uno de los cargos más importantes, que representa jurídicamente el sustento de la nación.
Advirtió además, que no se han escuchado los llamados de la sociedad civil, académicos, organizaciones y legisladores que señalan a Medina Mora como violador de derechos humanos. Tampoco se ha dicho quiénes son los otros dos ciudadanos que conforman la terna, los cuales, sí tienen méritos suficientes, carrera judicial y autoridad moral para que el Senado vote por alguno de ellos.
También en contra del dictamen, el senador del PT, Manuel Bartlett Díaz, resaltó que el propósito del presidente Peña Nieto es hacer ministro a Medina Mora. Al mismo tiempo, subrayó que el Ejecutivo Federal envió a la Cámara de Senadores dos propuestas equivocadas tanto para la Procuraduría General de la República, como para la Corte.
No vamos a tener un cambio de país, con esta actitud del Presidente; aseguró además que el dictamen que se discute es pobre, falaz y sin contenido.
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