Comunicado-535
- Necesaria, una instancia autónoma, con credibilidad y legitimidad de origen que atienda los reclamos por la desaparición de normalistas.
- “Tenemos que hablar de Iguala como una inocultable tragedia nacional, un agravio y una afrenta a cada uno de nosotros, a las instituciones y ciudadanos”, considera.
La senadora Mónica Arriola Gordillo presentó una iniciativa para expedir la Ley por la que se crea la Comisión para el Establecimiento de la Verdad y Reparación Integral de Graves Violaciones a los Derechos Humanos cometidos en el estado de Guerrero.
En la tribuna de la Cámara de Senadores, la legisladora de Nueva Alianza consideró que ante la crisis que hoy lastima y tiene en la zozobra a nuestro país es un deber ético y moral del Estado “hacer un lugar a la memoria”.
Dijo que es incuestionable que ante el mandato de garantizar el derecho a la vida y la dignidad de todos sus habitantes, en el estado de Guerrero hubo “evidentes omisiones y complicidades que derivaron en una tragedia”.
La información dada a conocer en las últimas semanas y los datos aportados por la Procuraduría General de la República, advirtió, revelan indicios de una conclusión dolorosa que causa vergüenza y consternación a todo México: En regiones enteras y municipios del estado, las autoridades y gobernantes han incurrido en una práctica sistemática de violaciones de los derechos humanos.
Ayotzinapa, enfatizó Arriola Gordillo en la iniciativa se turnó a las comisiones unidas de Derechos Humanos y de Estudios Legislativos, no sólo encarna el dolor de 43 familias, “es el símbolo profundo y vivo del horror que ha sufrido un pueblo”.
“Tenemos que hablar de Iguala como una inocultable tragedia nacional, un agravio y una afrenta a cada uno de nosotros, a las instituciones y ciudadanos”. Por ello, acotó, es obligación de quienes ocupan algún cargo de representación popular alzar la voz e impedir que el olvido erosione el reclamo de justicia.
Aseguró que con el nuevo ordenamiento, desde el Senado de la República se contribuirá a la explicación de los hechos que tienen al país sumido en la incertidumbre, pues sólo a través del reconocimiento y rescate de la verdad se podrá reconstruir el tejido social.
Las expresiones de diversos sectores sociales que reclaman justicia por los 43 normalistas desaparecidos, enfatizó, hacen imperativo contar con una instancia autónoma, con credibilidad y legitimidad de origen que atienda los reclamos.
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