Versión estenográfica de la conferencia de prensa del senador Roberto Gil Zuarth, presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, al término de la instalación de la Comisión permanente del Congreso de la Unión.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Muy buenas tardes. Muchas gracias por atender a esta convocatoria.
Hemos concluido este segundo periodo de sesiones del primer año de esta Legislatura. Sin lugar a dudas, el balance tiene agridulces, por supuesto; un balance positivo en muchos temas, logramos avanzar en un conjunto de iniciativas que estaban pendientes, sobre todo en materia de transparencia, derechos humanos, en la implementación del nuevo modelo de justicia penal; un grupo importante de nombramientos, que también estaban pendientes; procesamos casi 35 ratificaciones de personal consular y diplomático.
Es un balance positivo que se debe a la buena voluntad, al trabajo y al esfuerzo de los grupos parlamentarios.
Es cierto, también, que las expectativas de este periodo de sesiones ordinarias estaban fundamentalmente cifradas en tres grandes temas: en la implementación de la reforma constitucional en materia de combate a la corrupción; la discusión sobre la nueva regulación o la regulación alternativa a la marihuana; y en tercer lugar la reforma constitucional en materia de seguridad pública, mejor conocida como reforma del mando único.
Esos temas, como ustedes saben, no se pudieron concretar, no pudimos lograr los consensos, los acercamientos necesarios, no logramos, pues, concluir un proceso legislativo y con ello, responder a la expectativa pero también a una demanda social cada vez más intensa.
Tenemos que reconocerlo con autocrítica, pero no simplemente para lamentar el resultado; sino para poner al Senado en el sendero de las decisiones.
Los grupos parlamentarios están dialogando, están conversando sobre la posibilidad de celebrar un periodo de sesiones extraordinario en las próximas semanas. No se ha definido fecha ni agenda; esa responsabilidad le tocará concretar a la Comisión Permanente, no depende únicamente de los senadores, en razón de que la Comisión Permanente también incluye diputados y en consecuencia, la Comisión Permanente tiene que resolver en qué momento se puede llevar a cabo el periodo de sesiones extraordinarias y con qué agenda.
Pero como ustedes bien saben, se acostumbra en nuestros parlamentos que se convoca al periodo de sesiones extraordinarias cuando tenemos productos legislativos listos. En ese sentido, los grupos parlamentarios también están conversando sobre en qué momento reactivar las discusiones en las comisiones, para seguir construyendo los dictámenes que permitan en el momento en el que se decida, tener materia para el periodo de sesiones extraordinarias.
Yo mantengo el optimismo de que en el corto plazo vamos a lograr acuerdos en estos grandes temas. El Senado ya está encauzado a las discusiones, ya tenemos como prioridad clara para este periodo de receso resolver estos tres asuntos desde la perspectiva de la pluralidad, pero también con el sentido responsable de tomar decisiones en el corto plazo.
La Comisión Permanente también, como ustedes saben, tendrá las responsabilidades habituales de dar seguimiento a la realidad mexicana y eventualmente al debate político; pero creo que en los próximos días se concentrará en discutir, en analizar en qué momento y con qué agenda podremos celebrar un periodo de sesiones extraordinarias.
Concluyo diciendo que por supuesto que nos hubiera gustado un balance mucho más amplio, mucho más robusto. Pero también es cierto que no podemos demeritar muchos de los logros:
Una Ley de Ejecución Penal que transforma el Sistema Penitenciario y que llevábamos más de dos años discutiéndolo. Una nueva ley en materia de combate a la tortura; una nueva ley federal en materia de transparencia; una nueva ley para justicia penal para los adolescentes; una nueva ley que modifica y que implementa correctamente los principios del nuevo Sistema Acusatorio en materia penal.
En consecuencia, tenemos que seguir trabajando, hacer un corte de caja de nuestras propias limitaciones, pero sobre todo insistir en la necesidad de poner voluntad política y todo nuestro esfuerzo por concretar en el corto plazo la agenda que nos están demandando los ciudadanos, la sociedad, y que tiene que ver con las grandes preocupaciones nacionales.
Estoy a su disposición para cualquier pregunta o comentario.
MODERADOR: Gracias, presidente. Hay una lista de preguntas.
Héctor Figueroa de Excélsior T.V., Grupo Imagen.
REPORTERO: Gracias, presidente.
Para que se convoque a un periodo extraordinario tienen que estar listos los dictámenes, ¿no?
Tendrían que ser los dictámenes de las siete leyes reglamentarias del Sistema Anticorrupción o podrían ser sólo cinco dictámenes, como los que estaban en la propuesta del Partido Verde y del PRI.
Y, por otra parte, una reflexión en el tema de que no se haya podido aprobar la marihuana para uso medicinal, considerando que usted tenía una postura particular, incluso discrepante con su bancada.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Empiezo por la segunda.
No se abrió a discusión en las comisiones, entre otras razones por una diferencia sobre si había condiciones para poder entrarle a esa discusión en la víspera del cierre del periodo.
Entiendo que hay un compromiso de discutirlo esto en las próximas semanas, eventualmente de cara a un periodo de sesiones extraordinarias.
El tema no se ha cerrado; el tema está abierto. Creo que hay una importante mayoría perfilada a hacer un cambio regulatorio en materia de marihuana. No sé con qué profundidad, si únicamente al grado medicinal o si habrá otro avance dependerá, insisto, de los consensos, pero creo que sabremos hasta dónde podemos llegar en este cambio regulatorio cuando las comisiones empiecen a trabajar.
Y sobre lo primero, es una práctica común, una suerte de costumbre parlamentaria que al periodo de sesiones extraordinarias sólo vamos cuando ya tenemos listos los dictámenes. Porque al periodo de sesiones extraordinarias se va a decidir más que a discutir o a negociar, se va ya a un pronunciamiento de las dos cámaras o de una de ellas, precisamente sobre productos definidos.
Ustedes también saben que la mayor parte del debate en las últimas horas con respecto a anticorrupción, era si avanzábamos en cinco normas o si teníamos que construir las siete de siete.
Parece que ese es el debate de fondo. Yo pensaría que debiéramos en este periodo de sesiones extraordinarias resolver en todo caso el paquete completo del Sistema Anticorrupción. De tal suerte que se resuelvan las dos posiciones que han estado en la mesa en las últimas horas.
MODERADOR: Andrea, La Jornada, por favor.
REPORTERA: Senador, buenas tardes.
Quisiera que me precisara si usted ve posibilidades reales de que se convoque a un periodo extraordinario antes del 28 de mayo, en que vence el plazo constitucional para aprobar las leyes anticorrupción, sobre todo por lo confrontados que están los dos bloques en torno a esa legislación.
¿Usted considera que habría posibilidad de que hubiera dictámenes o finalmente el congreso va a quedar en falta, como en otras leyes? Eso por un lado.
Y por otro, quisiera saber si es cierta una versión en el sentido de que en la madrugada se vio la posibilidad , PRI y PAN, de que se parara la reforma que regula la marihuana, eliminando esto del gramaje, que es creo el punto donde sus compañeros del PAN tienen más reticencia a aprobarla.
Y finalmente qué va a pasar con el constituyente que le falta al PRD, dado que no se logró la votación en la madrugada.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: No quiero cometer una imprudencia ni tampoco adelantar vísperas.
La fecha y la agenda de un eventual periodo de sesiones extraordinario es un asunto que debe debatir la Comisión permanente y los Grupos Parlamentarios.
En consecuencia, no puedo anticipar si será en las próximas semanas, antes o después de la elección. Dependerá de los acuerdos, de los consensos y de la evolución de la generación de los dictámenes en el Senado de la República o bien en la Cámara de Diputados y la Cámara de Diputados también plantea realizar un periodo de sesiones extraordinarias para atender temas que le competen.
En consecuencia, cuando se instale la Comisión permanente el próximo miércoles, eventualmente tendremos mayores definiciones, se tendrá que presentar una iniciativa donde se definan con claridad cuáles son las agendas, qué fechas se requerirían y con qué duración se desahogaría un periodo de sesiones extraordinarias.
Esa responsabilidad, esa decisión le corresponde a los grupos parlamentarios en el ámbito de las responsabilidades de la Comisión Permanente.
Con respecto a la discusión de marihuana, lo que se acordó es que se pospondría la discusión para otro momento, en razón de que algunos legisladores solicitaban un espacio para ampliar su conocimiento y la información disponible para ilustrar su juicio.
Ese fue el balance fundamental que se antojaba un poco precipitada la decisión, en razón de que muchos legisladores no habían estado involucrados de manera previa en el debate de marihuana y en consecuencia ese espacio de tiempo serviría para que se acercaran de algunos elementos informativos.
No hubo como tal una negociación, entre otras razones, porque no se abrió a discusión en las comisiones. Las iniciativas están presentadas, ustedes conocen los distintos modelos, me imagino que cuando empiecen a discutir las comisiones de cara a un periodo de sesiones extraordinarias, se pondrá en la mesa las distintas opciones, con los distintos alcances y las distintas profundidades.
Con respecto al último tema, tal y como se dictó en el trámite final, las dos vacantes se regresan a la Junta de Coordinación Política, toda vez que el transitorio constitucional establece con toda puntualidad que son las juntas de coordinación política de la Cámara de Diputados y de la Cámara de Senadores, las que le proponen a los respectivos plenos, la integración de los diputados constituyentes.
Hay dos vacantes, una por no haberse logrado el quórum de votación necesario, las dos terceras partes de los miembros presentes y también la vacante en virtud de que el Grupo Parlamentario del Partido del Trabajo declinó a ocupar ese espacio.
La Junta de Coordinación Política se tendrá que pronunciar al respecto; puede ser un tema que se desahogue en un periodo de sesiones extraordinarias, si así se convoca al periodo o bien resolverse en el mes de septiembre, en el entendido de que la asamblea constituyente se instalará el próximo 15 de septiembre, es decir, 15 días después de que inicie formalmente el periodo de sesiones ordinarias.
REPORTERA: Senador, ¿a quién le correspondiera ese espacio lo puede pasar a otro grupo parlamentario?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: En una interpretación estricta, ha declinado a su derecho a integrar la Asamblea Constituyente; en consecuencia, la Junta de Coordinación Política pudiera tomar una determinación diferente, porque tenemos otro deber: la plena integración de la Asamblea Constituyente.
Es decir, que tenga los 100 integrantes que nos mandata expresamente el transitorio constitucional.
REPORTERA: Buenas tardes, senador, tengo dos dudas.
La primera es si de mando único policial hay dictamen y la segunda es si las organizaciones o los representantes de las organizaciones civiles van a seguir en la discusión en materia anticorrupción.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Con respecto a mando único, como lo hemos dicho en otros momentos, la mesa de trabajo que durante prácticamente dos años ha venido trabajando en el tema, ya generó un borrador, una suerte de “dice y debe decir”, donde ya tenemos una suerte de aproximación a prácticamente el cien por ciento de los temas que nos propusimos resolver en esa reforma constitucional.
Ese proyecto, ese “dice-debe decir” se entregó formalmente a los grupos parlamentarios. Ese borrador se entregó a los grupos parlamentarios para que se discutiera en el ámbito de los mismos; es decir, les entregamos el resultado de las deliberaciones del grupo de trabajo, de tal suerte que los grupos parlamentarios puedan hacerle observaciones.
En consecuencia, no hay dictamen, no se han instalado las comisiones dictaminadoras; pero hay un preproyecto de textos de lo que pudiera ser la reforma constitucional.
La otra pregunta era…
REPORTERO: Seguirán las organizaciones…
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: El compromiso es mantener la dinámica de parlamento abierto hasta la conclusión final de la dictaminación del paquete anticorrupción.
REPORTERO: Senador, yo le quisiera preguntar y pedirle su punto de vista, de si el hecho de que no haya concluido este periodo con las tres leyes básicas que se habían planteado como las de mayor importancia; finalmente pudiera considerarse un fracaso del Senado de la República. Esa sería mi primera pregunta.
La otra, le quisiera preguntar también en cuanto a la fecha para la convocatoria del extraordinario, usted personalmente o no sé si lo quisiera hacer como presidente del Senado, ¿estaría a favor de que sea antes o después?
Ya explicó usted, pero usted personalmente cómo lo vería.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Con respecto a la primera pregunta, es incuestionable que no cumplimos las expectativas y los objetivos que nos habíamos planteado durante estas últimas semanas; y creo que nadie lo puede negar, tenemos que hacer un ejercicio de autocrítica.
No logramos poner el suficiente esfuerzo para superar, me refiero en términos políticos, nuestras diferencias, nuestros desencuentros y las distancias que teníamos en algunas discusiones. Pero también es cierto que el periodo fue muy productivo en algunos temas.
Mire, creo que la discusión de la Ley de Ejecución Penal amerita un reconocimiento de lo que hemos hecho en este periodo de sesiones ordinarias. También la Ley para Prevenir y Sancionar la Tortura; los distintos tratados internacionales que aprobamos; el centenar, prácticamente, de nombramientos que se hicieron durante este periodo.
El Senado cumplió sus responsabilidades en un grado óptimo, quizá no lo deseable, pero sí con mucho sentido de responsabilidad. Yo me quedaría con que el balance es positivo, sin dejar de reconocer que tenemos muchos pendientes y que en buena medida este periodo de sesiones ordinarias, se va a evaluar en función de esos tres elementos.
Pero también es cierto que ya el Senado quedó encausado, encaminado a resolver estos tres temas. No hay ya más temas en la mesa, más que estos tres; en el largo periodo de receso que tenemos frente a nosotros, tenemos que concretar acuerdos en tres temas en específico, creo que eso nos permite una ventaja, una oportunidad para concentrarnos en esos tres temas; poder anticiparlos y resolverlos y cuando llegue el periodo de sesiones ordinarias, concentrarnos en las responsabilidades habituales, sobre todo en el Paquete Económico.
Y con respecto a la fecha. Yo soy de la idea de que tiene mucho sentido esta costumbre parlamentaria de convocar cuando estamos listos; no convocar únicamente para esperar si producimos algo: convocar a sesiones extraordinarias para, en unas horas, en un par de días, resolver lo que ya se produjo, ya se construyó en semanas previas.
Creo que lo importante es que en estos próximos días las comisiones, los grupos de trabajo empiecen a trabajar aceleradamente en estos tres temas; de tal manera que en las próximas semanas, cuando esto sea posible, tengamos dictámenes y la Comisión Permanente reconociendo la pluralidad, resuelva en qué momento desahogamos esas sesiones extraordinarias.
REPORTERO: Sólo me quedó una duda, senador, nada más el asunto es si la Cámara de Diputados también tendría que trabajar de manera conjunta para sacar en el periodo extraordinario, las dos cámaras, los asuntos.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Se puede convocar a sesiones extraordinarias del Congreso, es decir, de las dos cámaras. Se puede convocar a sesiones extraordinarias a una sola de las cámaras. Se puede convocar a sesiones extraordinarias con temas diferentes: unos para la Cámara de Senadores, otros para la Cámara de Diputados.
¿De qué depende?
Del ejercicio de construcción de una agenda, que puede ser agenda de Congreso o agenda de una de las Cámaras. Y ahí es donde está el detalle fino de la reconstrucción de la agenda, cada cámara determinará qué condiciones tiene para resolver temas en un periodo de sesiones extraordinarias.
REPORTERO: Pero tratándose, perdón, senador, tratándose de leyes que además tienen que ver con las dos cámaras.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Lo lógico sería que en aquellos casos donde se requiere el pronunciamiento del Congreso de la Unión se convocara a ambas cámaras.
Y precisamente por eso, la responsabilidad de convocar a las sesiones extraordinarias está en la Comisión Permanente, que tiene una integración mixta, es decir: Senado y Cámara de Diputados.
MODERADOR: Última pregunta. Leti Robles de Excélsior.
REPORTERA: Buenas tardes. Son varias, senador.
Una, ayer quedó mucho el pendiente a raíz de la aprobación del Código de Justicia Militar sobre esta figura del cateo, las intervenciones telefónicas, porque si bien el Código se aplica a la vida militar, como lo establece desde su primer artículo, también es cierto que hace referencia a civiles.
Desde su perspectiva, senador, esta aprobación o esta inclusión, o esta modernización del Código de Justicia Militar ¿vulnera de alguna manera a los civiles?
Esa es una pregunta.
La siguiente, senador, a la Ley contra la Tortura incluye figuras muy novedosas para México como el uso de GPS’s para policías, que deben de traerlos para controlar que no incurran en tortura, y la creación de un Comité Técnico de Especialistas Multidisciplinarios independientes, pero que trabajen con la CNDH, que podrán visitar los centros de reclusión, incluyendo los militares.
Mi pregunta es, senador, ¿considera que este tipo de figuras ponen a México ya al día después de tantos años de trabajar y de luchar organizaciones sociales para frenar este flagelo de la tortura?
Y la tercera pregunta ya se me olvidó, pero con esas está bien. Gracias.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: No podemos leer el Código de Procedimientos Penales Militares fuera de la lógica de los alcances de la jurisdicción militar, sobre todo a la luz de la reforma que hicimos hace ya algún año, algunos años, con respecto a la jurisdicción militar versus la jurisdicción civil.
La jurisdicción militar a partir de esa reforma, y sobre todo del fallo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación en el caso Radilla, ya no es la regla sino la excepción. Es decir la jurisdicción militar es excepcional.
Cuando haya un civil involucrado como víctima o como autor, como coautor, en ese caso se lleva el asunto ante la jurisdicción civil y la regla es clarísima.
La jurisdicción militar únicamente implica para los delitos oficiales que están taxativamente determinados en el Código Penal Militar y que nunca pueden reñir con la jurisdicción civil.
La regla general es que cuando hay un involucramiento de cualquier sujeto que tenga naturaleza civil o no castrense, no hay ninguna duda, eso se va a la jurisdicción civil. En consecuencia, no advierto en mi interpretación un riesgo de que desde la jurisdicción militar y desde la aplicación del Código de Procedimientos Militares pudieran afectarse lo derechos humanos de civiles, sobre todo en la fase de investigación criminal.
Con respecto a la tortura, creo que es una ley muy novedosa. Recupera las mejores prácticas del mundo; incorporó las recomendaciones de organismos internacionales, el aprendizaje que tenemos como país en un larguísimo trayecto de sufrimiento de prácticas de tortura bastante habituales.
Por supuesto, también incorpora dos lógicas: Uno, la vigilancia y el control permanente de las autoridades que tienen a su cargo cualquier medida de restricción de libertad de una persona. Y, en segundo lugar, la incorporación de nuevas tecnologías.
Creo que es una ley robusta que está enfocada fundamentalmente en prevenir la tortura sin prejuicio también de castigarla severamente.
La llave importantísima que incorpora esta ley es un robusto sistema de prevención de la tortura a partir de buenas prácticas internacionales, uso de tecnología y mecanismos mucho más intensos de vigilancia y supervisión sobre los agentes de autoridad.
REPORTERA: Senador, ya me acordé de la tercera.
Como presidente ya de la Comisión Permanente, ¿prevé usted un periodo, al menos antes de las elecciones, intenso, de debate fuerte, justamente por todo este conflicto, si veremos reflejado en el Pleno de la Permanente el asunto electoral en este periodo?
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Un maestro de derecho parlamentario decía que la Comisión Permanente es la caja de resonancia del país, cuando se supone que todos estamos en receso.
Y creo que eso es lo que va a imperar en este receso. La Comisión Permanente será el epicentro del debate político; el debate social, el debate de nuestra realidad tiene un espacio institucional para encausarse, que es la Comisión Permanente, es absolutamente normal.
Veremos cómo los grupos parlamentarios inscribirán asuntos para discutir, muchos de los temas electorales se discutirán en la Comisión Permanente, sobre todo en este mes; y muy probablemente después de las elecciones en el ámbito de la litigiosidad y la conflictualidad postelectoral. Es absolutamente normal.
Pero también es cierto que la Comisión Permanente, como espacio que recrea la pluralidad pero también que sintetiza al Congreso de la Unión, puede ayudarnos a ir preparando ciertos elementos de cara a un periodo de sesiones extraordinarias o también de cara al periodo de sesiones ordinarias, que empieza en el mes de septiembre.
En consecuencia, hay que equilibrar las dos lógicas: la lógica del debate político, pero también la preparación de los trabajos de cara a un periodo que va a ser muy complejo, el extraordinario si es que hay; y de un periodo donde tenemos responsabilidades constitucionales muy claras como es el periodo de septiembre-diciembre, y específicamente en materia económica y fiscal.
Muchas gracias a todos.
