- Urge avanzar en una legislación que proteja y promueva los derechos de las trabajadoras del hogar.
- Las y los trabajadores asalariados del hogar tienen derecho a un trabajo y salario digno, así como tener un contrato que les garantice derechos laborales.
En el marco del foro “Las mujeres y el mundo de trabajo” celebrado en el Senado de la República en el que participaron la senadora ciudadana Martha Tagle Martínez, la secretaria de Trabajo y Fomento al Empleo, Amalía García y de la directora general del Instituto de las Mujeres de la Ciudad de México, Teresa Incháustegui se dio inicio a una campaña que busca visibilizar el trabajo que realizan cotidianamente las y los trabajadores domésticos en el país.
Durante su intervención Tagle Martínez se refirió que en materia legislativa existe un Convenio sobre el Trabajo Decente para las Trabajadoras y Trabajadores Domésticos. Recordó que en 2011, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) adoptó el Convenio 189, dedicado a garantizar la protección mínima que deben tener las y los trabajadores domésticos en el que México votó a favor de dicho acuerdo, sin embargo; a pesar de que entró en vigor el pasado 5 de septiembre de 2013, el Senado todavía no lo ha ratificado, ironizó.
Del mismo modo hizo un llamado urgente al Senado de la República para que ratifique el Convenio 189 y la recomendación 201 OIT, para así avanzar en una legislación que proteja y promueva los derechos de las trabajadoras del hogar.
“No es suficiente tenerlo en la agenda 2030 sino impulsarlo para que sea una realidad” dijo.
Al respecto, Amalia García destacó que las y los trabajadores asalariados del hogar tienen derecho a un trabajo y salario digno, así como tener un contrato que les garantice derechos laborales como atención a la salud y acceso a la vivienda, entre otros.
Enfatizó que la labor de las y los trabajadores remunerados del hogar equivale entre el 20% y 24% del PIB.
Por otra parte, la directora general del Instituto de las Mujeres de la Ciudad de México Teresa Incháustegui, señaló que las mujeres de manera general cuentan con bajos salarios, lo cual refleja una crisis y un retraso laboral en el país.
Al término de las ponencias se concluyó que debe hacerse visible el trabajo que realizan las y los trabajadores domésticos y generar las políticas públicas incluyentes que enmarquen al país como una nación progresista que está en búsqueda constante por mejorar las condiciones laborales de la ciudadanía.