Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL

Ante la confirmación del Gobierno del Estado acerca de la resolución del Gobierno Federal de clausurar la obra de El Acueducto, que lleva agua a Hermosillo desde la presa del Novillo en la sierra de Sonora, creo necesario expresar con fuerza mi postura.

1. Es obligado hacer a un lado los mensajes partidistas, políticos y polarizantes para ir al centro del tema que es: el derecho humano a tener agua para uso personal, doméstico y de sobrevivencia. Es decir, que este derecho se encuentra por encima de cualquier otro uso o necesidad, así sea agrícola o industrial. Y así está estipulado por la Ley Nacional de Aguas que nos rige.
2. Las autoridades, en cada uno de sus órdenes de gobierno, deben anteponer la necesidad de las familias por encima de intereses mezquinos, así sean políticos, electorales o incluso de enemistad personal o regional.
3. Las facultades de los gobernantes no se agotan mientras exista una necesidad de los ciudadanos e incluso un asunto de sobrevivencia. Para eso los ciudadanos han elegido a sus representantes, para que luchen por ellos y sus necesidades hasta las últimas consecuencias, donde prevalezca el bien común y la solidaridad humanitaria ante una necesidad básica, que es el agua para uso humano.
Cuando existe voluntad se pueden solventar asuntos legales, procesales o jurídicos. Subrayo: cuando existe VOLUNTAD. Privar del agua a los hermosillenses no afecta a los políticos ni a los partidos, sino directamente a los ciudadanos de Hermosillo, ciudad que día a día recibe a gente de todo Sonora, quienes se ven afectados. Todos los hermosillenses exigimos que cada una de las partes involucradas muestren esa voluntad para dar una solución pronta y definitiva.