Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL


PALABRAS DEL SENADOR ROBERTO ALBORES GLEASON, PRESIDENTE DE LA COMISIÓN DE LA MEDALLA BELISARIO DOMÍNGUEZ, DURANTE LA PRESENTACIÓN DE LA MONEDA CONMEMORATIVA, EMITIDA POR EL BANCO DE MÉXICO EN HONOR A DON BELISARIO DOMÍNGUEZ.
Platón decía que cuando la muerte se precipita sobre el hombre, la parte mortal se extingue pero el principio inmortal se retira sano y salvo, más aún, cuando la muerte es honrada y enaltece uno de los valores cardinales de la humanidad: la libertad.
Señor Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, licenciado Enrique Peña Nieto;
Senador Raúl Cervantes Andrade, presidente del Senado;
Diputado Ricardo Anaya Cortés, presidente de la Cámara de Diputados;
Ministro Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Juan Silva Meza;
Señor gobernador del Banco de México, doctor Agustín Carstens Carstens;
Señor gobernador del Estado de Chiapas, licenciado Manuel Velasco Coello;
Señor jefe de Gobierno de la Ciudad de México, doctor Miguel Ángel Mancera Espinoza;
Señor licenciado Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación;
Señor Aurelio Nuño, jefe de la Oficina de la Presidencia;
Distinguidos coordinadores parlamentarios;
Distinguidas compañeras senadoras y distinguidos compañeros senadores de la República;
Distinguidos diputados federales y locales, que hoy nos acompañan;
Distinguidos medios de comunicación;
Señoras y señores:
Hoy, en esta antigua casona de Xicoténcatl respiramos la grandeza de nuestra historia, somos testigos afortunados de un modesto homenaje a uno de los más grandes guardianes de los ideales nobles de nuestra patria, a un hombre que aclaró con dignidad el camino de la joven democracia mexicana obscurecida por los nubarrones del autoritarismo.
El 7 de octubre de 1913, el senador Belisario Domínguez fue ultimado en el panteón del pueblo de Xoco, en la Ciudad de México, la avaricia de poder del General Victoriano Huerta y el temor de la representación nacional para oponerse a éste condujeron al senador a realizar el máximo sacrificio por la patria: la ofrenda de la vida.
Hace 100 años la brutalidad, parafraseando al maestro Ernesto de la Peña: apagó el torrente de su sangre y detuvo el perfil que lo animaba, sin embargo, fueron la acción y la palabra de Don Belisario Domínguez lo que originó otro torrente; un torrente mucho mayor, el de la esperanza, el de la colectividad mexicana inspirada en luchar por un país libre.
Su virtud es incuestionable, la voz en defensa de la libertad, las palabras que rompen el yugo de la opresión, que son sable que se esgrime en contra de la censura, de la intolerancia, de la ignorancia y del autoritarismo.
Don Belisario Domínguez denunció con valentía mientras otros callaron, pero además trazó con astucia un eje de acción hacia la dignidad de México, inspiró a todo un país a no mostrarse ajeno a la construcción de su propio destino y que es nuestro carácter el que erige mejores mañanas. Es referente del país de la libertad, de la democracia, del equilibrio de poderes y de la justicia social que día a día los mexicanos construimos.
Hoy, en el centenario de su artero asesinato y en el año que los mexicanos hemos decidido sea el de Don Belisario Domínguez, honramos al mártir trágico, a su inteligencia, a su calidad humana, a sus valores incuestionables de libertad de democracia y bienestar social.
México y los mexicanos lo honramos con diversas acciones, entre ellas, la moneda que hoy presenta el Banco de México, agradecemos por todo el apoyo al doctor Agustín Carstens y a todo su equipo de trabajo.
Sin embargo, ciertos estamos que no hay mejor homenaje que podamos hacer al prócer de la libertad, que seguir construyendo un mejor país en diálogo y en democracia. Nuestra nación aún debe superar grandes marginaciones, injusticias y obstáculos para alcanzar su desarrollo pleno.
Qué mejor momento que este, ante los tres poderes de la Unión, el recordar que es nuestra obligación moral, independientemente de nuestras diferencias ideológicas, transformar a nuestro país, generar soluciones trabajando en unidad y llegar a acuerdos para lograr los cambios que México requiere.
Bienvenido señor presidente Enrique Peña Nieto al Senado de la República, es un honor que nos acompañe en este acto, donde refrendamos el espíritu republicano y federalista de nuestra nación.
Amigas y amigos:
Decía Víctor Hugo: “El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad”.
Honrar a Belisario Domínguez es atrevernos a mirar más lejos, a enfrentarnos con valentía e imaginación a los problemas de nuestro presente.
Honrar a Belisario Domínguez es, como decía Don Manuel Gómez Morín: “Usar nuestras ideas como poderosas armas, porque ni tenemos otras ni hay mejores” para convertir nuestros retos en oportunidades para los mexicanos.
Y así, hacer florecer a nuestra nación, más grande, más unida y más hermosa que nunca. Y así, mirar al pasado que nos lega y aprender con humildad, tal como lo transmitió Amado Nervo en su Raza de Bronce:
Eras tú y a tus pies cayendo al verte te murmuré: quiero ser fuerte; dame tu fe, tu obstinación extraña; quiero ser como tú, firme y sereno; quiero ser como tú, paciente y bueno; quiero ser como tú, nieve y montaña.
Soy una chispa; ¡enséñame a ser lumbre! Soy un guijarro; ¡enséñame a ser cumbre! Soy una linfa: ¡enséñame a ser río! Soy un harapo: ¡enséñame a ser gala!  Soy una pluma: ¡enséñame a ser ala!
Muchas gracias.
--oo0oo-

Calendario

Mayo 2024
Lu Ma Mi Ju Vi Sa Do
29 30 1 2 3 4 5
6 7 8 9 10 11 12
13 14 15 16 17 18 19
20 21 22 23 24 25 26
27 28 29 30 31 1 2