REUNIÓN DE TRABAJO DE LAS COMISIONES UNIDAS DE DERECHOS HUMANOS Y JUSTICIA CON LA COMISIÓN EJECUTIVA DE ATENCIÓN A VÍCTIMAS
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Buenos días a todas y a todos a esta reunión de trabajo de las Comisiones de Justicia y Derechos Humanos, que fueron convocadas a través de las mesas directivas de ambas Comisiones y, por supuesto, damos la bienvenida en esta reunión de trabajo con las y los comisionados de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, que fueron electos por este Senado de la República de manera muy especial; a cada una y a cada uno de ellos les agradecemos su presencia en esta reunión.
Voy a leer muy rápidamente el orden del día; es un día complicado, hoy instalamos ya el Periodo Extraordinario de Sesiones ayer en la Permanente.
El primer punto es un mensaje, muy breve, que vamos a dar el Presidente de la Comisión de Justicia, el senador Roberto Gil Zuarth; y su servidora.
El segundo punto es la intervención de las y los comisionados, que nos pusimos de acuerdo, van a hacer uso de la palabra por cinco minutos cada uno de ustedes, en función de cómo fueron electos; y por supuesto, en el tercer punto vienen las intervenciones de las y los senadores de ambas comisiones, y terminamos con un diálogo y concluimos sin ningún asunto general.
Yo lo único que quiero decir, para entrar rápido en la materia, es que agradecemos que estén aquí; nos da mucho gusto que nos hayamos puesto de acuerdo y sobre todo que hayan podido enviarnos un informe muy importante, que sé que se les puso a trabajar de manera extraordinaria y que llegó anoche.
Yo tengo aquí para visibilizar los informes que les pedimos y que están aquí contenidos en estas tres carpetas. Como no fueron mandados electrónicamente ha sido difícil, anoche ya muy tarde y hoy en la mañana, imprimir para cada uno de ustedes –senadores, senadoras–; pero en el transcurso de la mañana se los hacemos llegar.
Son informes muy pertinentes que hay que guardar con sigilo porque algunos tienen que ver con el informe de datos sobre víctimas y por supuesto cómo se encuentra la parte administrativa, finanzas; y también muy relevante, el informe ejecutivo sobre las reuniones de trabajo de su Comisión.
Sin más ni más, le doy la palabra al senador Roberto Gil para que proceda a iniciar el trabajo. Si es tan gentil, por favor, Presidente.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Muchas gracias, Presidenta. Muy buenos días tengan todos ustedes; bienvenidos señoras y señores comisionados de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas.
Como lo ha dicho la Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos, se trata de una reunión de trabajo, no es una comparecencia, es un encuentro en el ámbito de nuestras responsabilidades parlamentarias; un encuentro para escucharlos, para intercambiar puntos de vista sobre recientes acontecimientos que se han dilucidado a los medios de comunicación y que han motivado la preocupación de este Senado de la República y especialmente a las comisiones que aquí participamos.
No solamente eso, sino también que sea la oportunidad de ver cuáles son los pendientes institucionales, los mayores retos que se tienen en el corto plazo; cuáles son las dificultades que tenemos que superar para que la Comisión Ejecutiva pueda cumplir el mandato constitucional y legal que han adquirido. Y sobre todo, ver de qué manera las comisiones aquí presentes y el Senado de la República puede abonar al cumplimiento eficaz de los propósitos que ustedes han recibido del Senado de la República.
Ese es básicamente el objetivo y el propósito de esta reunión. Nos interesa conocer cuáles son las dinámicas que están ustedes llevando a cabo, cómo se están organizando, cuáles son sus principales objetivos, qué han logrado consensuar hacia dentro de su institución, hacia dónde están llevando el mandato que, insisto, han recibido del Senado de la República y, sobre todo, tomar puntual nota de algunos aspectos que tenemos que ayudarles a resolver, de ayudarles a allanar e incluso de la manera en la que podemos apoyarlos para que este mandato pueda ser eficazmente realizable.
De nueva cuenta nuestra más atenta bienvenida. Esta ese su casa, son de alguna manera, producto del consenso de este Senado de la República y en consecuencia, nos tenemos que hacer responsables los senadores, las senadoras de que a la Comisión Ejecutiva y a sus comisionados les vaya bien.
Por su atención, muchas gracias. Señora Presidenta, si quiere continuamos con el siguiente punto del orden del día.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Vamos a proceder al siguiente punto del orden del día, como acordamos. Voy a mencionar de manera general cómo serían las intervenciones hasta por cinco minutos, de cada uno de ustedes.
Empezamos con el comisionado Jaime Rochín; continuamos con Adrián Franco; después Susana Thalía Pedroza; le seguiría Julio Hernández y Carlos Ríos; después Olga Noriega y cerraríamos con Rosario Torres.
De acuerdo, ¿verdad? ¿Todos?
Como ustedes pueden ver, estamos las mesas directivas de las dos comisiones. Procedemos dando el uso de la palabra, por favor, a Jaime Rochín.
COMISIONADO JAIME ROCHÍN DEL RINCÓN: Muchas gracias, senadora. Es un honor para nosotros, los miembros de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, participar de esta reunión de trabajo e informarles y contarles los avances, las dificultades y el proceso que estamos llevando a cabo para cumplir con la misión que desde el 10 de octubre nos fue encomendada por el propio Senado de la República.
Y habría que decir que desde el 17 de octubre de 2013, el Pleno de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas celebró su primera sesión ordinaria. A la fecha, el pleno ha celebrado 37 sesiones, siendo la última la realizada el martes 17 de junio.
En el periodo comprendido entre el 17 de octubre de 2013 y el 8 de enero de 2014, las actividades del pleno de la Comisión estuvieron dirigidas a su conformación jurídica y administrativa. Destacan, entre otras, la revisión de las propuestas de iniciativa de ley sobre medidas cautelares y medidas alternas de la Secretaría Técnica de la Coordinación para la Implementación del Sistema de Justicia Penal.
La participación en reuniones de la Comisión Intersecretarial para Prevenir y Erradicar la Trata de Personas. Y sobre este mismo tema también, el análisis y el acompañamiento que hizo la Comisión desde el primer momento, a las reformas a la Ley de Trata, que en este Senado de la República se impulsaron por parte de la Comisión de Derechos Humanos; y que la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas participó, acompañó y felicitó, y que estamos en espera de que sean pronto dictaminadas por la Cámara de Diputados de manera favorable.
También emitimos nuestra opinión sobre el proyecto de Reglamento de la Ley General de Víctimas, con fundamento en la fracción XIX del artículo 88 de la Ley General de Víctimas; a un análisis de las necesidades de interlocución con otras entidades a través de la suscripción de convenios de colaboración y coordinación en el establecimiento de diversas mesas de negociación con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en materia de asignación de recursos; la interacción con diversos órganos descentralizados de la Administración Pública Federal similares a la Comisión, dada la observación de buenas prácticas administrativas; el análisis del alcance del capítulo 3 de la Ley General de Víctimas; cuál era nuestra competencia directa, de la Comisión, y elaboración del primer proyecto de estatuto orgánico de la Comisión Ejecutiva.
Todo esto se hizo durante el periodo de octubre al 8 de enero, y estas acciones se llevaron a cabo sin recursos financieros, con materiales, con manos; a excepción de los siete comisionados y cinco personas que los asistieron sin contraprestación en ese periodo.
El apoyo de Províctima consistió en siete cubículos, una sala de juntas, siete teléfonos fijos y el mismo número de computadoras de escritorio.
A partir de la publicación del decreto por el que se transforma la Procuraduría Social de Atención a Víctimas de Delitos, en la Comisión Ejecutiva, con fecha 8 de enero de 2014; y de la instalación del Sistema Nacional de Atención a Víctimas, el 15 de enero de 2014, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, órgano operativo de dicho sistema, ha llevado a cabo muchísimas actividades, entre las que destacan –y voy a resumir algunas, brevemente–:
Creación y operación de grupos de trabajo sobre la administración y atención a víctimas, para la transición de la Procuraduría Social de Atención a Víctimas, Províctima, en la Comisión Ejecutiva.
A la fecha se han brindado aproximadamente 16 mil atenciones, de enero para acá, a las personas usuarias de casos heredados por Províctima, en cumplimiento de las fracciones IV y V del segundo transitorio del decreto en comento.
Es importante señalar que la Ley General de Víctimas no dio una vacatio legis, por lo que desde que fuimos designados, desde ese primer momento sin recursos tuvimos que hacer frente a todas las obligaciones que la Ley nos marca, sin posibilidad de establecer los propios sistemas de trabajo; sino que tendría que ser todo de manera simultánea.
En cuanto a las áreas sustantivas, mis compañeros y compañeras informarán sobre los avances de algunas áreas; solamente quiero decir que está conformado el Registro Nacional de Víctimas, la asesoría jurídica federal y a punto, muy cercano a concluirse los elementos para tener el fondo en pleno funcionamiento.
Para este efecto, la Décima Sexta Sesión Ordinaria, celebrada el 28 de enero de 2014, ante la imposibilidad de realizar cambios en la estructura administrativa, los comisionados determinamos una división del trabajo que ellos irán exponiendo por áreas, de conformidad con las unidades administrativas que crea la Ley General de Víctimas.
Estas áreas fueron: La Asesoría Jurídica Federal estuvo a cargo del maestro Carlos Ríos Espinoza; el Registro Nacional de Víctimas del doctor Julio Hernández; el Fondo de Ayuda del maestro Adrián Franco; las políticas públicas de la doctora Susana Pedroza; la comunicación social a cargo de la propia Presidencia; la vinculación institucional a cargo de un servidor; el Área Administrativa y Jurídica de la Presidencia y la Atención a Víctimas y Seguimiento de la profesora María del Rosario Torres.
Esta organización fue puramente práctica operativa para atender, porque como teníamos que seguir atendiendo toda la transformación de PROVÍCTIMAS, los comisionados teníamos que hacernos cargo de ver que estas instancias estuvieran funcionando. Sin embargo, ahora que tenemos todas las entidades funcionando, todos los directores generales de cada una de estas áreas, etcétera, esta organización entre los comisionados está por desaparecer porque son las áreas sustantivas las que estarán atendiendo directamente los temas que les competen.
Ya no me meto a hablar de los detalles del Registro Nacional de Víctimas, de la Asesoría Jurídica Federal, del fondo, de la Unidad de Atención Inmediata y Primer Contacto ni de los comités, porque eso seguramente lo hablarán, igual de los programas de políticas públicas seguramente lo hablarán en su turno los propios comisionados.
Sólo quiero concluir diciendo que entre muchas otras actividades los Comisionados se han reunido con diversas instancias del Sistema Nacional de Atención a Víctimas, con la finalidad de contar con los primeros contactos y deliberar con ellos sobre las principales preocupaciones que la Ley General de Víctimas ha evidenciado entre la sociedad mexicana.
Así se han generado dinámicas de retroalimentación con la Suprema Corte de Justicia de la Nación, con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, con los representantes de la Comisión de Justicia de la CONAGO, con los presidentes de las Comisiones de Justicia de la Cámara de Senadores y de la Cámara de Diputados; con los miembros de la Conferencia Permanente de Congresos locales, con quienes hemos hecho ya un acuerdo para que armonicen de manera inmediata todo su sistema legal de conformidad con la Ley General de Víctimas, así como con los gobernadores de los estados de Nuevo León, San Luis Potosí, Chihuahua, Coahuila, Michoacán, para analizar la Ley General de Víctimas y los temas relacionados con los derechos humanos.
También la importancia determinada de la incidencia de delitos en nuestro país, nuestros comisionados han participado en los mecanismos que el Gobierno de la República ha implementado para atenderlos.
A saber, se presentaron acciones para atender el conflicto en el estado de Michoacán. Se ha mantenido estrecha comunicación con las autoridades de Tamaulipas para revisar la incidencia delictiva de la Región, especialmente por los casos de desapariciones de personas.
Y, finalmente, ya por último, porque además ya acabé mi tiempo, quiero decir que por lo que hace al estado que guardan las finanzas y la administración de la entidad, se presentó una carpeta informativa completa, pero es importante nada más señalar una cosa: del 100 por ciento del personal que se recibió en la transformación de la entidad sólo han presentado su renuncia 40 personas por así convenir a sus intereses, mientras que el 92 por ciento de las personas que estaban en PROVÍCTIMA siguen en activo desarrollando a partir del 27 de mayo del 2014 las nuevas actividades que marca el Estatuto Orgánico de la Entidad. Para ello, definimos los perfiles de cada uno y fuimos encontrando cuál era su mejor posición.
Les agradezco mucho su atención, señoras, señores senadores, muchas gracias por esta invitación.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Muy bien. Muchas gracias.
Por favor, comisionado Adrián Franco.
COMISIONADO ADRIÁN FRANCO ZEVADA: Buenos días. Señoras senadoras, señores senadores: muchas gracias por la invitación.
Primeramente me voy a referir a las responsabilidades que tengo por cuanto hace al fondo y al Comité Interdisciplinario Evaluador y posteriormente terminaré haciendo una referencia general a los trabajos de la Comisión Ejecutiva.
Por cuanto hace al Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral, para nosotros fue necesario, en primer lugar, hacer un proceso para designar al director general del fondo. Hicimos un proceso abierto por invitación en donde comparecieron más de 10 profesionales y día 1º de junio entró ya en funciones la Directora General del Fondo.
El Fondo, como ustedes saben, debe ser un mecanismo financiero de pago que se va a llevar a cabo a través de un fideicomiso público. Llevamos a cabo diversas entrevistas con los directores generales de los distintos órganos de bancas de desarrollo y ya hemos presentado un proyecto de contrato de fideicomiso a la Procuraduría Fiscal de la Federación para su revisión, comentarios y, en su caso, aprobación para continuar con el proceso de firma del citado fideicomiso.
Una vez que tengamos el fideicomiso suscrito, estaremos en posibilidades de tener el ingreso de los recursos y de esa manera poder hacer el uso y las dispersiones de los mismos.
Por cuanto hace a las reglas de operación del fideicomiso, tenemos un documento primero, basado en otras de las reglas de operación que distintos órganos del Estado Mexicano tienen, de manera tal que sean congruentes con éstas para poder tener unas reglas de operación armónicas.
Estamos en el marco del fondo de la operación el mismo, en pláticas con la Corte Interamericana de los Derechos Humanos para tener –insisto– reglas de operación armonizadas con las directivas de la Corte.
Por cuanto hace al Comité Interdisciplinario Evaluador, que es el ente o el órgano de la Comisión Ejecutiva que hace las ponencias al Presidente de la Comisión para que éste las presente al Pleno respecto de ayudas, asistencias y reparaciones integrales.
También hizo una invitación pública a diversos profesionales para que pudiéramos designar a la persona que ocupara la Dirección General del Comité y el día 1º de junio entró en funciones la Directora General del Comité, que es una persona que tiene la experiencia necesaria para poder llevar a cabo estas funciones, incluso trabajó en la Corte Interamericana de los Derechos Humanos.
En esta área estamos encargados para elaborar las reglas de operación del Comité y establecer cuáles son los distintos procesos que las áreas de la Comisión Ejecutiva debemos respetar y llevar a cabo para poder hacer uso de los recursos del Fondo y de las demás áreas.
Esta parte resulta importante, porque es diferente de la forma en la que venía trabajando PROVÍCTIMA con anterioridad. Es decir, la manera a priori en la que debemos de empezar a llevar a cabo estos trabajos, parte desde la creación de los procesos de cómo se van a llevar a cabo las distintas áreas, cómo van a concluir sus actividades entre el área de primer contacto, el área del registro del Comité Interdisciplinario para después pasar al fondo y todo eso es finalmente aprobado por el Pleno a través de un dictamen que presenté en la Presidencia de la Comisión.
Hasta aquí, digamos, brevemente las labores de las Comisiones del Fondo y del Comité Interdisciplinario Evaluador.
Por cuanto hace a los puntos generales de la Comisión Ejecutiva, señores senadores, en estos meses que he tenido la fortuna de participar como comisionado en esta institución, me he dado cuenta que la Comisión tiene una función, y más que una función una naturaleza doble. Por un lado, es una institución que tiene la naturaleza de ser una respuesta del Estado Mexicano a una realidad de la violencia, de las víctimas, de los victimarios que tenemos en nuestro país; por otro lado, la Comisión Ejecutiva es también una victoria de las organizaciones de la Sociedad Civil Organizada.
En ese sentido, el Pleno de esta Comisión Ejecutiva representa estas dos polaridades, estos dos lados de la misma moneda.
Somos un grupo de gente, un grupo de siete personas, que estamos en proceso de consolidarnos como un equipo de trabajo. Los siete, entre nosotros no nos conocíamos, algunos sí, algunos no, yo personalmente conocía a uno o a dos. Han sido siete meses de trabajo intenso, humano, con nuestras diferencias y con nuestras coincidencias.
A mí no me queda duda de que cada uno de nosotros, cada uno de los siete tenemos como objetivo de nuestra función el que el Estado Mexicano se ocupe de aquellas personas que requieren el apoyo financiero-económico para que puedan salir con residencia de una situación de victimización.
Cada uno tiene ese objetivo, no tengo duda de ello; y cada uno también, precisamente con nuestros antecedentes, tenemos formas distintas de verlo. En ese sentido, insisto, reproducimos la naturaleza de la constitución de la Comisión y yo confío en este equipo de siete personas.
Gracias, señores senadores.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Sigue por favor la comisionada Susana Pedroza.
COMISIONADA SUSANA THALIA PEDROZA: ¿Qué tal?, buenos días señoras y señores senadores. Me da mucho gusto estar con ustedes, tanto con las señoras senadoras, los señores senadores, que nos tomaron protesta y que también comparecimos en el año 2013 y que el 10 de octubre tuvimos la fortuna de haber sido designados por las dos terceras partes del Senado de la República.
En mi intervención me quiero referir a algunos temas que yo he realizado en lo personal, actividades propias y actividades que me tocan, como las que me ha asignado el Pleno.
He asistido, se ha mencionado que han sido 37 sesiones, de las cuáles he asistido a 34 sesiones en donde tengo dos faltas justificadas por intervención quirúrgica y una por atender a la plataforma o Movimiento por la Paz. Nuestras asistencias al Pleno, a las sesiones del Pleno que son cada semana, he sido una participación muy constante.
También se ha asistido a la instalación del Sistema Nacional de Atención a Víctimas que fue el 15 de enero, pero antes, algo que nos ha dado mucho vigor y a la Comisión Ejecutiva, es que el 9 de enero del 2014 se emitió el decreto de transformación de PROVÍCTIMA en Comisión Ejecutiva y esto para nosotros nos garantizó seguridad jurídica y seguir con nuestros trabajos ya con personal.
Yo, en lo personal, agradezco que tengamos personal, que sea un personal preparado y que hemos reubicado de acuerdo a sus perfiles y se ha dicho que el 98 por ciento ha permanecido.
Al principio hubo un caos pensando que se iba a despedir gente y de ninguna manera; se conservó a todo el personal ubicando por el estudio de sus perfiles curriculares, así es que varios están en el registro; los que a mí me tocan tienen nivel maestría porque están en políticas públicas y el decreto del Presidente de la República nos dio seguridad jurídica.
He participado en diversas reuniones, tanto con el gobierno federal y gobiernos de los estados. Actualmente también participé activamente en las observaciones y comentarios al Reglamento de la Ley General de Víctimas. Este es un tema que yo creo que debe de ser tratado, el Reglamento de la Ley General de Víctimas, porque es un proyecto que lo tiene el Ejecutivo y está publicado en COFEMER.
Aquí les manifiesto públicamente que han aceptado todas nuestras observaciones. Hubo un conflicto hace unos meses en donde hay una situación que –en lo personal– no era conveniente para la Comisión Ejecutiva. Decía el Reglamento que el Presidente de la Comisión iba a designar a todos los directores generales y a todos los directores generales adjuntos, cuando eso no debe de ser, porque nosotros somos un órgano colegiado; los siete ganamos lo mismo.
Y, conforme al artículo 88 y conforme a la Ley Federal de las Entidades Paraestatales, son funciones que dependen de la Junta de Gobierno, y el propio decreto dice: “La Junta de Gobierno es el Pleno”, y la Ley General de Víctimas dice: “El máximo órgano es el Pleno”.
La naturaleza jurídica de esta Comisión Ejecutiva es ser un órgano colegiado, es ser un órgano que tiene un presidente y que los comisionados dependen de un presidente, sino todos debemos participar por igual y la presidencia debe ser el conductor de los acuerdos del Pleno.
Es así que el Gobierno Federal aceptó nuestras observaciones y se modificó el proyecto de Reglamento de la Ley General de Víctimas. También participé activamente en la elaboración del estatuto orgánico de la Comisión Ejecutiva, que el 27 de mayo ya está disponible y se encuentra en trámite para su publicación en el Diario Oficial, y entonces ya contamos con esa estructura.
De igual manera a pesar de estar en el tema de políticas públicas, mi tarea también ha sido atender a víctimas que tienen conflictos con el ISSSTE, personas también que sus familiares han desaparecido en fosas comunes en diversos estados y en los casos, por ejemplo, de Elena Gómez participé con varios de mis compañeros en el caso de la Familia Banda.
También hemos tenido intensas reuniones con todas las organizaciones de la sociedad civil, como son Asociación Alto al Secuestro, como es Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, Coalición contra el Tráfico de Mujeres y Niñas, Asociación TEC, con organismos internacionales hemos participado también en con la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas; con el Comité Internacional de la Cruz Roja, con la relatoría especial sobre la tortura y otros tratos o penas inhumanos.
Ustedes saben mi actividad siempre ha sido la académica. Por eso mis compañeros me asignaron las políticas públicas, lo cual agradezco, porque la dirección se llama Dirección General de Políticas Públicas, Capacitación e Investigación, de tal forma también me toca sustancialmente impartir conferencias.
Me tocó con el Comisionado Jaime Rochín elaborar el Plan Emergente que muy bien recibido en el estado de Michoacán. Este plan emergente en Michoacán consiste en establecer la comunicación con la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral del Estado de Michoacán.
Establecer modelos de atención, aumentar las delegaciones que tiene ya nuestra comisión ejecutiva en varios estados y la comisión está trabajando en aumentar su delegación en el estado de Michoacán a tres sicólogos, tres abogados, dos trabajadores sociales, tres médicos, para el lado de desaparecidos. Principalmente tenemos estrecha relación con ellos.
Otra parte que me toca y que es el estudio, se hace un diagnóstico de ver qué estados estaban cumpliendo con la Ley General de Víctimas. A raíz de que sacamos ese diagnóstico, la Comisión se ofreció a realizar los estudios de sus respectivas leyes.
Tenemos ya la Ley de Tabasco, ya está dictaminada por nosotros; la Ley de Michoacán y otra ley que se me olvida por ahí, que son tres leyes y creo, si no me equivoco, es la de Querétaro.
Hemos sido muy bien recibidos por algunos estados de la República o digamos, por todos, y nos están enviando sus leyes para dictaminarse y darles nosotros puntos de vista.
Y finalmente para elaborar el Programa Anual de Atención Integral a Víctimas, estamos desarrollando cinco foros regionales para la elaboración de ese foro anual y que se van a desarrollar en Culiacán, Sinaloa, el 25 y 26 de junio, el 2 y 3 de julio en Monterrey; 9 y 10 de julio en Morelia; 16 y 17 de julio en Cuernavaca, Morelos, y 23 y 24 de julio en Veracruz.
Si se darán cuenta, son los estados que tienen mayor violencia y ahí vamos a estar. Les paso rápidamente las invitaciones por si nos quieren acompañar. Los carteles, vamos a estar acompañados ya de expertos.
Dentro de las políticas públicas la ley señala que habrá nueve comités sobre distintos temas. El pleno acordó la creación del Comité de Secuestros. Entonces ya contamos con 10 comités que son Violencia Familiar, Personas Desaparecidas, Detención Arbitraria, Derechos Económicos, Sociales y Culturales, Tortura, Tratos Crueles e Inhumanos, Secuestros, Violencia Sexual, Igualdad, Personas Víctimas de Homicidio, Tráfico de Personas y a la Dirección General de Políticas Públicas le toca la coordinación de estos comités.
También he los trabajado en los lineamientos de actuación específicos para la atención a víctimas de nacionalidad extranjera y mañana espero también que nos acompañen, si pueden pasar eso, en el Primer Foro Sobre el Modelo de Atención Integral en Salud, que convocamos a todo el sector en salud para elaborar el modelo de atención integral en salud con enfoque psicosocial, educación y asistencia social, que deberá contener los mecanismos de articulación y coordinación entre las diferentes autoridades, obligadas a dar asistencia pública y servicios de salud a las instituciones.
Eso es todo, muchas gracias.
SENADORA ANGÉLICA DE A PEÑA GÓMEZ: Muchas gracias.
Por favor, Julio Hernández.
COMISIONADO JULIO HERNÁNDEZ BARROS: Señora senadora, Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado; señor senador Presidente de la Comisión de Justicia del Senado; señoras y señores senadores, muchas gracias por su invitación.
Señor Presidente de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas; señoras y señores comisionados, con el gran gusto de estar con ustedes platicando este día sobre los avances que hemos tenido en esta ardua tarea, quizá uno de los problemas más graves que enfrenta nuestro país, el problema de las víctimas precisamente, derivado de otro quizás tan importante que es el de la violencia.
La realidad es que las víctimas del delito y las víctimas de la violación de derechos humanos no habían recibido un trato digno en nuestro país internamente.
Fue hasta el año 2000 cuando la Constitución precariamente contiene algunos pocos derechos para las víctimas y hace apenas unos años cuando se reconocen algunos más.
Con la creación de la Ley General de Víctimas en la que prácticamente todos ustedes participaron junto con la sociedad civil y un gran espíritu de renovación y dignidad para las víctimas, por suerte se logró, primero, la aprobación por ambas cámaras de la Ley General de Víctimas y después su publicación, promulgación e inicio de vigencia, de la cual deriva esta comisión, como el órgano ejecutivo del Sistema Nacional de Víctimas, del que el Senado es parte fundamental, a través precisamente del Presidente de la Comisión de Justicia, que los representa en el Sistema Nacional de Víctimas.
En esta edición de planeas que nos asignamos en el pleno, que es de paso dicho y lo hemos mencionado todos, el máximo órgano de autoridad que tenemos en la Comisión Ejecutiva, así lo manda la Ley General de Víctimas, así lo dictamina el decreto de creación, así lo hemos establecido también los comisionados en el pleno, en el Estatuto Orgánico y así se percibe también en el proyecto de Reglamento del Ejecutivo, el pleno como el máximo órgano de autoridad del pleno.
Hemos dividido las tareas y a mí se me encomendó el por el pleno, en primer lugar, el Registro Nacional de Víctimas, una tarea titánica si tomamos en cuenta que los primeros números que nos fueron entregados a nosotros fue de más de 100 mil muertos en los últimos 10 años y más de 26 mil desaparecidos también en los últimos años 10 años.
Sin contar, desde luego, otros delitos que tienen que estar integrados en el Registro Nacional de Víctimas, como por ejemplo los delitos de carácter sexual, los delitos patrimoniales y otros delitos quizá sí importantes pero de menor impacto social que tendrán que irse añadiendo paulatinamente en el registro.
Hemos iniciado ya las tareas del registro. El Registro Nacional de Víctimas está conformado y en fase de implementación y ya pasamos la fase de planeación para llegar a la fase de implementación se están haciendo ya registros, se tiene un número único de victimas conformado por varias siglas que lo identifiquen y lo puedan identificar en todos los sistemas del Estado, como los sistemas de salud, educación, de desarrollo social, como “N” número único de víctimas.
Y en estos momentos estamos solicitando a los estados de la República que nos den información sobre las bases de datos en las que tienen registradas a sus víctimas, a fin de poderlas trasladar y crear el sistema de software que pueda hacer sistemático este traslado de las bases de datos que tienen en los estados, con el Registro Nacional de Víctimas y lo mismo estamos haciendo con la Federación.
Hemos creado un grupo de trabajo con la Secretaría de Gobernación y con la Procuraduría General de la República para poder dar cifras reales, concretas y por lo menos verificables del número de desaparecidos que hay en nuestro país y al mismo tiempo hemos creado otras comisiones para poder determinar el número de víctimas de otros delitos que hay.
Del mismo modo, en la Comisión heredamos un gran número de víctimas que habían sido atendidas por la extinta Províctima, y que estamos también sistematizando en este Registro Nacional de Víctimas.
Hasta el momento tenemos un poco más de 2 mil víctimas de desaparecidos que ya están integrándose a nuestro registro federal y 24 mil víctimas de otros delitos que están sistematizándose para poder determinar cuál es corresponden al Registro Federal de Víctimas y cuáles corresponderán a los registros locales de víctimas para después ser incorporadas al Registro Nacional de Víctimas.
De manera que una vez que consolidemos toda esta información, podríamos tener quizá a mediados del año que entra, el Registro Nacional de Víctimas con los datos de todas las entidades federativas y, por lo menos, de los delitos de mayor impacto social, y me refiero sobre todo al número de personas desaparecidas y número de personas muertas o asesinadas en nuestro país.
Y este Registro no pretendemos que sea solamente un dato numérico, un dato estadístico; sino que pretendemos que sea un dato que cuenta la historia de vida de las personas y que nos permita humanizar las cifras; porque sólo así daremos cuenta de la tragedia que está viviendo nuestro país y solamente así tendremos la sensibilidad para cambiar estos casos: no como un número, sino como una historia de vida.
Y finalmente diré que también a cargo mío están los comités de desaparición de personas, y el Comité de Violencia Familiar y estamos pugnando ya, de hecho en el orden del día para la próxima sesión, la creación de un comité que es importante para la Comisión de Derechos Humanos del Senado y para otras asociaciones, como “¿Quién habla por mí?”, y otras relativas a la infancia, que es la creación de un comité de niños y niñas víctimas del delito y de la violación de derechos humanos.
Seguramente pronto, si es que el pleno de la Comisión así lo determina, tendremos también conformado un comité más que atienda este gravísimo problema.
Muchas gracias.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Muchas gracias.
Por favor, el señor comisionado Carlos Ríos.
COMISIONADO CARLOS RÍOS ESPINOSA: Muy buenos días tengan todas y todos senadoras, senadores. Es un placer para mí poder venir este martes, esta mañana para darles cuenta de los trabajos que hemos realizado en la Comisión, en las áreas que el pleno me ha encomendado.
La primera parte de los trabajos consistió, por supuesto, en la organización interna. El pleno me encomendó elaborar el primer borrador del Estatuto orgánico de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas. Es un trabajo que presenté y que posteriormente lo trabajamos conjuntamente en el pleno de la Comisión Ejecutiva, y que fue aprobado ya por el pleno de la Comisión Ejecutiva en mayo. Está próximo a publicarse en el Diario Oficial de la Federación.
También el pleno me ha encomendado la coordinación inicial de los trabajos de la Asesoría Jurídica Federal y, al igual que hicimos con el resto de las direcciones generales y direcciones generales adjuntas de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, hicimos una selección por perfiles, elaboramos perfiles profesionales de cada uno de estos profesionistas e hicimos entrevistas para la designación de los distintos titulares de la Dirección General de la Asesoría Jurídica Federal.
Como resultado del proceso de consulta a los distintos profesionales, fue designado el doctor Rubén Vasconcelos como titular de la Dirección General de la Asesoría Jurídica Federal. Está el maestro Arturo Guerrero, como director general del área de Derechos Humanos; y está el maestro Noé Ramírez Mandujano, como titular del área de Dirección General en materia de Derecho Penal, de materia penal.
Todavía estamos en proceso, por limitaciones presupuestales, de designar al director general de Asuntos Jurisdiccionales y otros procedimientos administrativos, así como amparo, que esa es otra de las áreas fundamentales de la Asesoría Jurídica Federal.
Finalmente, se decidió que la Asesoría Jurídica Federal coordine a las delegaciones regionales de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas. Tenemos actualmente 15 delegaciones regionales en 14 estados de la República; existen estados que tienen dos delegaciones por la Comisión Ejecutiva; y nuestro proyecto implica la creación de más delegaciones regionales para cubrir todo el territorio nacional.
Nuestra prioridad en este 2014 serán los estados de Baja California Sur, el estado de Durango y el estado de Tamaulipas. La selección de estos estados tiene que ver con la entrada en vigor en el nuevo Sistema de Justicia Penal a nivel federal; y como saben ustedes, el nuevo asesor jurídico es un actor fundamental de este nuevo proceso penal que vio la luz a partir de la publicación ya del Código Nacional de Procedimientos Penales.
La política y la mecánica que estamos siguiendo es precisamente la idea de no solamente prestar atención jurídica, no por vía de la Asesoría Jurídica Federal; sino dar un acompañamiento integral sobre la base de la doctrina de la reparación integral que está contenida en la Ley General de Víctimas, y que se bajó precisamente del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, a efecto de que podamos atender todas las dimensiones y el impacto, la afectación en todas las dimensiones que afectan a la familia y a la vida de las víctimas directas e indirectas, a efecto de poder atender toda la complejidad que implica ser víctima de un delito.
Este es el camino hasta ahora andado. Hemos dado atención, actualmente tenemos ya 500 casos aproximadamente de atención de casos que heredamos de Províctima y nuevos.
También me corresponde la coordinación de los comités de secuestro y de tortura, y espero que en la sesión de preguntas podamos ampliar la información respecto de qué se ha hecho en esos rubros.
Muchas gracias.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Muchas gracias.
Por favor, la comisionada Olga Noriega.
COMISIONADA MARÍA OLGA NORIEGA SÁENZ: Muchas gracias. Buenos días a todas y a todos, distinguidos senadoras y senadores, gracias por su invitación.
Como ustedes bien saben, fui nombrada por mis pares el 17 de octubre como presidenta de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, cargo que desempeñé hasta el 29 de abril. Si ustedes lo consideran oportuno, me gustaría hacer unas precisiones posteriores sobre cuál fue el motivo del abandono o de esta cuestión que se suscitó tan lamentable al interior de la Comisión.
Pero antes que todo, quiero decirles que desde el 17 de octubre, ya lo comentó el comisionado Rochín, heredamos una institución –Províctima–, tuvimos que trabajar para el reacomodo de todo el personal administrativo de la institución; crear una nueva institución con bases sólidas, con bases fuertes.
En ese sentido fue mi labor, aquí traigo la carpeta administrativa del 17 de octubre al 29 de abril, que estuve como presidenta de la Comisión.
Aparte de desempeñar el cargo de comisionada presidenta, estoy a cargo del Comité contra la Trata de Personas y el Tráfico Ilícito de Personas. Quiero decirles que hace 10 días se incorporó como directora de mi Comité, la maestra Yuridia Álvarez Madrid, quien participó en la construcción de las reformas tan importantes en materia de trata de personas.
En ese sentido, estamos elaborando las líneas estratégicas para este Comité, que yo considero que es de gran importancia dentro de la Comisión.
Estamos elaborando un diagnóstico de necesidades de las instituciones federales y estatales en materia de atención a víctimas de trata y tráfico de personas. Coordinar e impulsar en conjunto con las autoridades correspondientes, los organismos internacionales y la cadena, diagnósticos regionales que permitan conocer los factores de riesgo en zonas que son conocidas como “de origen”, zonas donde son captadas las víctimas, con la finalidad de realizar recomendaciones a los municipios.
Coordinar e impulsar estudios o diagnósticos para evaluar las problemáticas concretas que enfrentan las víctimas de trata de personas, en sus distintas modalidades y las víctimas de tráfico. Elaborar estudios victimológicos sobre la frecuencia y tipo de victimización; así como estrategias para la prevención oportuna. Elaborar y proponer la justificación de las políticas públicas que deberán de ser implementadas a nivel nacional, para atender a los distintos tipos de víctimas de trata y tráfico de personas, con base en los diagnósticos elaborados o existentes, con la finalidad de proponer programas especiales y organizar o redireccionar acciones, políticas públicas o leyes que de acuerdo a su naturaleza y competencia, llevan a cabo los integrantes del sistema; así como para canalizar o distribuir los recursos necesarios.
Documentar buenas prácticas nacionales e internacionales en materia de atención a víctimas, y compartirlas con las instancias encargadas de la atención a víctimas. Proponer lineamientos para la detección a víctimas y atención a víctimas con el sector salud. Realizar recomendaciones a las instancias gubernamentales, para dar cumplimiento a los lineamientos en materia de atención a víctimas, derivados de los instrumentos internacionales ratificados; así como para mejorar la atención primaria que éstas brindan a las víctimas.
Dentro de la línea estratégica segunda, tenemos contemplada la coordinación interinstitucional e intrainstitucional. Ésta consiste en coordinar con las autoridades correspondientes la elaboración de los siguientes protocolos:
Atención a víctimas de trata de personas para servidores públicos encargados de la investigación, persecución y aplicación de la ley;
Detección y atención inmediata a víctimas de trata de personas para servidores públicos encargados de dar respuesta inicial en casos de trata de personas;
Actuación y coordinación para instancias federales y estatales en materia de atención a víctimas de trata de personas;
Celebrar convenios de coordinación, colaboración y concertación con las entidades e instituciones federales, así como con las entidades e instituciones homólogas estatales y del Distrito Federal, incluidos los organismos autónomos de protección de los derechos humanos para llevar a cabo los objetivos del programa del Comité;
Robustecer y aún dar el intercambio de información y experiencias con los gobiernos de otros países, así como con organismos internacionales que tienen una visión global del problema y acceso a las herramientas más innovadoras para la atención a víctimas de trata;
Realizar visitas a las estaciones migratorias y albergues para migrantes, así como los refugios y casas de medio camino, con la finalidad de verificar las condiciones de las víctimas y posibles víctimas y brindar recomendaciones;
Proponer lineamientos y un plan de trabajo con los Comités de las Comisiones Ejecutivas de Atención a Víctimas de las entidades federativas para el intercambio de información, la generación de diagnósticos situacionales, la coordinación con las autoridades estatales y la implementación de programas y acciones de difusión;
Promover y fortalecer la implementación de acciones con organismos internaciones, entre ellos la UNODC de la Organización delas Naciones Unidas, la Organización Internacional del Trabajo y la OIM.
Capacitación a servidores públicos. Realizar diagnósticos sobre las necesidades de la federación y las entidades federativas en materia de capacitación a funcionarios públicos para garantizar estándares de actuación en beneficio de las víctimas;
Crear una herramienta de capacitación accesible en base al diagnóstico de las necesidades en materia de prevención y atención a víctimas y en coordinación con las oficinas de Naciones unidas contra la delincuencia, cuyo objetivo sea estandarizar la información que los servidores públicos deben tener y brindar los lineamientos de atención emergente;
Coordinar con las autoridades correspondientes procesos de capacitación en torno a los protocolos previamente elaborados en materia de atención a víctimas de trata de personas para servidores públicos encargados de la investigación, persecución y aplicación de la ley;
Detección y atención inmediata a víctimas de trata de personas para servidores públicos encargados de dar respuesta inicial en casos de trata de personas;
Actuación y coordinación para instancias federales y estatales en materia de atención a víctimas de trata de personas;
Realizar e implementar con las autoridades correspondientes un mecanismo para evaluar el impacto del proceso de capacitación a mediano y largo plazo;
Establecer programas emergentes de ayuda, atención, asistencia, protección, acceso a la justicia, acceso a la verdad y reparación integral de las víctimas de trata de personas y tráfico, en caso de graves violaciones a los derechos humanos o delitos cometidos contra un grupo de víctimas. Esos programas podrán ser creados por cuanto al análisis de la información con que se cuente y que se determine que se requiera la atención especial de determinada situación o grupos de víctimas;
Acompañar y documentar casos emblemáticos que puedan servir para fortalecer los procesos de atención a víctimas, realizar recomendaciones a las autoridades involucradas.
Difusión y vigilancia.
Elaborar una página web que brinde información sobre las instancias de atención a víctimas a nivel federal y estatal y constituye un observatorio del cumplimiento de las obligaciones en materia de atención de acuerdo a la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los delitos en materia de trata de personas y para la protección y asistencia a las víctimas de estos delitos.
Y, por último, la prevención de factores de riesgo con enfoque de justicia restaurativa.
Proponer y participar con las instancias correspondientes, bajo criterios de justicia restaurativa, programas para prevenir la captación de adolescentes y jóvenes por parte de las redes de trata en las comunidades y las escuelas que promuevan espacios de reflexión sobre la problemática, las consecuencias sobre la participación en estos delitos y la afectación que sufren las víctimas en sus vidas.
Proponer y participar con las instancias correspondientes el diseño y puesta en marcha de iniciativas sociales, educativas y económicas dirigidas a mitigar los factores de riesgo, sobre todo en comunidades vulnerables, haciendo particular hincapié en las mujeres, los niños, niñas y adolescentes y centrando la atención en el riesgo y los factores de protección relacionados con la delincuencia y la victimización.
Muchas gracias.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Muchas gracias.
Por favor, finalmente, la comisionada Rosario Torres.
COMISIONADA MARÍA DEL ROSARIO TORRES MATA: Muy buenos días senadores y senadoras. Ante todo, quiero agradecerles el darnos la oportunidad, en lo particular, de venir a informar el trabajo que se ha realizado en la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas y agradecerles que tuvieron confianza en su servidora.
Aquí tengo un concentrado y hay una carpeta que tiene todas las atenciones que se han realizado desde el día que tomamos protesta, que todavía no nacíamos pero teníamos que trabajar, teníamos un compromiso con la sociedad, con ustedes y principalmente las víctimas.
Yo les quiero agradecer esta gran oportunidad que nos dan para venir a decirles qué hemos trabajado, qué hemos hecho. El 8 de octubre –como ustedes saben– fue el día que ustedes nos dieron la oportunidad a estos comisionados de trabajar por esta sociedad y por estas personas que somos víctimas y que no habíamos sido reconocidos por esta sociedad, y que luchamos muchos años hasta lograr que se hiciera una ley.
Gracias a esa ley ahora las víctimas tenemos un respeto más, ya somos reconocidos.
Señores senadores, yo vengo nada más a decirles lo que ha realizado la Comisión. Yo –como ya lo dijeron varios comisionados que estamos presentes, mis compañeros– cuando llegamos sin tener nada tuvimos que ir a nuestra Presidenta, la comisionada Olga, y nos dividimos tareas.
A mí me dejaron la designación de atención a víctimas. ¿Por qué? Porque soy –como todos lo saben– fui víctima, soy víctima, sigo siéndolo porque sigue el proceso de mi hijo y continúa, eso no se termina jamás.
Nos designaron que a partir de esa fecha ha sido mi misión, porque no lo veo como un trabajo, lo veo como una misión de que tengo que servir a mi México y a esas víctimas que a gritos pedíamos justicia y que tuviéramos una ley.
Eso me gustó. Cuando me designaron yo no me opuse, porque era a lo que yo venía: a apoyar a esas víctimas. Dejé casa, dejé familia, dejé muchas cosas –perdonen, aquí sigue el dolor–, pero las víctimas tenemos que ser fuertes, tenemos que continuar con la lucha hasta que sean reconocidos nuestros derechos y hasta que se reconozca esta ley que se hizo.
He atendido, hasta la fecha, 20 mil 800 atenciones de diferentes delitos.
Como ustedes saben, esta ley decía –y esta Comisión– de haber trabajado nada más para políticas públicas. Yo, en lo particular, me opuse mucho, porque yo venía a una misión: no podía dejarse sin atender a una víctima y me da mucho gusto que concienticé a la mayoría de los comisionados.
Yo tuve que hacer un proyecto, se los puedo dejar, que costó mucho trabajo hacerlo y decirles que las víctimas necesitan una atención, aunque sea de primer contacto.
Sí es cierto, la Comisión Ejecutiva es para hacer políticas públicas, pero no podíamos cerrar la cortina y decirle, viene la víctima, no te puedo atender porque hago políticas públicas; vete.
Y la atención de víctimas no se ha dado a todo; sea fuero común o fuero federal, ¿Por qué?, porque no hay víctimas de primera, segunda ni tercera. No escogimos ser víctimas.
Merecemos un respeto a la víctima cuando llega a pedir el apoyo. No somos responsables de haber sido víctimas; por lo menos debemos ser atendidas.
Y yo hice este primer contacto de que teníamos que atender a víctimas directas, indirectas pero con un fuero federal.
Se decía que la ley, que fuero federal no podía ser posible porque en los Estados todo no se forma y el sistema, y sin armonizado ni las leyes. ¿A dónde mandamos esas víctimas?
Tengo que atenderlas, tengo que acobijarlas. A lo mejor como primer contacto tenemos que canalizarlas, pero no podemos cerrarles las puertas.
La verdad, me costó mucho trabajo concientizar a la mayoría de los comisionados. Sabemos y sé que la Comisión Ejecutiva se rige y que la máxima autoridad es un Pleno.
Tuve que subirla a Pleno y con la confianza que siempre me ha dado de que las víctimas tenemos una razón, les lleva a autorizar. Y gracias a Dios y a todas esas víctimas que somos se logró. Y hay un primer contacto de atención a víctimas.
Este es un concentrado que se lo puedo hacer llegar; un concentrado. Hay una carpeta muy enorme de todas las atenciones. La atención de víctimas no ha parado.
Yo la verdad estoy aquí por una misión y que ustedes me dieron la oportunidad y cuando yo se los dije cuando vine a comparecer: me den la oportunidad o no me la den, esté arriba, en medio o abajo mi lucha iba a seguir, estando aquí, estuviera donde estuviera, en la trinchera que estuviera.
Entonces yo sí les vengo a decir: es trabajo, nos ha costado mucho trabajo realmente formar la estructura de una comisión, es difícil, llegar y nos heredan una pro víctima que era otra forma de trabajo, llegamos nosotros a una estructura y volverla a las necesidades de la víctima. Es difícil.
Y la verdad se ha trabajado mucho y las víctimas merecemos mucho respeto y por esas víctimas tenemos que luchar.
Ese es mi trabajo. Si ustedes me quieren cuestionar referente a mi atención de trabajo, yo vine a trabajar y estamos trabajando. Yo no vine a hacer otras cosas más que trabajar.
Tuve que sacrificar muchas cosas y aquí estoy, con esa ambición, porque es lo único que le puedo ofrecer a mi hijo.
Muchas gracias.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA: Muchas gracias Rosario. Pasamos al siguiente punto del Orden del Día. Me ha pedido la palabra la senadora Arely Gómez. Y levantamos la lista de las siguientes participaciones.
SENADORA ARELY GÓMEZ GONZÁLEZ: Buenos días tengan todos ustedes. Celebro que el día de hoy estemos realizando esta reunión de trabajo con los comisionados de esta Comisión de Víctimas, quienes fueron designados por el Senado de la República y donde para la designación de todos ustedes se analizaron muchos perfiles, tuvimos varias reuniones y para buscar lo que nosotros considerábamos que era el mejor perfil para integrar la Comisión.
Cuando uno, ahora que ya tenemos experiencia en integrar cuerpos colegiados, se da uno cuenta que no sólo es buscar el mejor perfil porque además del mejor perfil tiene que ser también como un equipo de alto rendimiento.
Tenemos que buscar personas que se integren todos entre ellos y eso es lo que espera uno en un cuerpo colegiado.
Trabajar en un cuerpo colegiado es un tema difícil. Yo he estado en cuerpos colegiados y donde no es como ser servidor público en el Ejecutivo, donde se recibe una línea vertical de mando, sino que en un cuerpo colegiado se tiene uno que enriquecer de todas las opiniones y lo que piensa uno que son discrepancias se vuelven fortalezas.
Entonces para mí es un gusto que estén el día de hoy aquí y que estemos ya viendo los frutos de lo que nosotros propusimos para la integración de esta Comisión de Víctimas de lo que ustedes han estado haciendo y cómo se han distribuido el trabajo y donde cada quien está aportando lo mejor de sí y de su experiencia personal de sus habilidades y enriqueciéndose de otras personas, así como las debilidades de cada uno porque como seres humanos tenemos fortalezas, tenemos debilidades y en un cuerpo colegiado así se debe de trabajar, aprovechando lo mejor y aportando lo mejor para la sociedad y cumpliendo con este gran compromiso que les fue encomendado.
Yo les puedo mencionar aquí que a nombre del Grupo Parlamentario del Partido Revolucionario Institucional les agradezco de nuevo, mi Grupo Parlamentario les agradece.
Ayer el senador Gamboa me pidió transmitirles su saludo; él no pudo pasar a saludarlos porque ahorita él ya está rumbo a San Lázaro, que vamos a iniciar el periodo extraordinario.
Pero es muy importante para nosotros su presencia; celebro que los presidentes de las comisiones lo hayan hecho y que podamos seguir teniendo reuniones para estar enterados de propia voz lo que ustedes están haciendo en un tema tan importante para la sociedad.
Como lo ha mencionado el Presidente Enrique Peña Nieto, la dignidad de una nación se refleja en la forma que se trata a las víctimas.
Ustedes, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, tienen encomendada esta labor muy importante. Así es que les pedimos que continúen con este entusiasmo, superen diferencias y sigamos adelante.
Ahora bien, la Ley General de Víctimas, que fue quien le dio vida a esta Comisión, surge del gran compromiso del Estado Mexicano que tiene con la sociedad civil. A mí me trabajó con algunos de ustedes, me tocó trabajarlo desde antes de estar integrando aquí el Senado es ley y es un compromiso que ustedes le hacen ahora frente.
Ahora bien, el día de ayer recibí tarde noche el Informe Ejecutivo que se me envió y me quedaron algunas inquietudes:
Sé que sería injusto evaluar con los mismos parámetros a una institución con años de trabajo que a una nueva creación, como es la Comisión de Víctimas.
Yo estuve pendiente y presente; supe lo que les costó obtener los recursos, el tránsito que tuvieron y por lo cual ahora ya están integrados. Fue un paso difícil su llegada, inclusive a las instalaciones, como lo mencionan en su informe y como lo supe de propia voz, a lo que era Pro Víctimas y a lo que ahora ya ustedes están haciendo.
Sin embargo ya, después de ocho meses de trabajo, sabemos que también ya tiene que haber resultados y avances, ¿verdad?
Entonces a mí, yo tenía ciertas dudas pero prácticamente todas –y yo hice mis anotaciones—han sido solventadas. Las voy a leer nada más por si en alguna se puede profesionalizar:
Cómo están trabajando en el Programa Nacional de Atención de Víctimas. Ya Julio comento los avances del Registro Nacional de Víctimas. Y ahí yo veía que en el Formato Único de Declaración, que estaba listo pero no publicado en el Diario Oficial, pero mencionas que ya se publicará ahorita, ¿verdad?
Ahora, en el documento que nos presentaron se encontraban los comités y la distribución entre los comisionados y yo me preguntaba cuál era el trabajo de estos comités para la generación de políticas públicas. Ya quedó totalmente aclarado.
Y también mi pregunta era, porque venía muy breve, sé que hay un informe, no lo tenía: qué me podrían hablar sobre la atención directa que se ha dado a víctimas.
Ya con lo que tú dices que venía aquí en un pequeño cuadro de 20 mil o algo y con el amor con el que lo platicas me ha sensibilizado totalmente. Me gustaría luego tener a la vista este documento porque creo que con todo eso también nosotros los senadores nos enriquecemos en nuestro contacto con esto.
Y los avances del estatuto orgánico de esta comisión sé que fue un trance difícil. Yo sí he escuchado y considero que quien es el Presidente de uno de estos órganos, debe de ser un Presidente que sume los esfuerzos y que comparta con todos sus compañeros toda la organización, aunque él es el responsable, pero tiene que haber una gran organización porque todos son pares, como es la Suprema Corte, que realmente el Presidente es para representar en cuestiones políticas, actos, eventos, es el representante per a la vez es un par más de la Comisión.
Qué bueno que ahora estén así llevándolo y qué bueno que pudieron solventar todos estos asuntos.
Y la administración de los recursos, cómo ha sido, ya tienen a un Director General encargado de esto.
Entonces si alguna de estas respuestas no fue atendida, brevemente, si quieren al final de todas las preguntas, ¿verdad?, porque a lo mejor puede haber que algunas preguntas se repiten.
Pero tengan la seguridad, les reitero, que el Senado de la República en particular, las Comisiones aquí presentes y los senadores aquí presentes, estaremos muy al pendiente de su trabajo y tienen las puertas abiertas para lo que necesiten.
Gracias.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Muchísimas gracias senadora Arely Gómez. Tiene el uso de la voz la senadora Lucero Saldaña.
SENADORA MARÍA LUCERO SALDAÑA PÉREZ: Muchas gracias presidentes de las Comisiones de Justicia y Derechos Humanos.
Como lo señaló mi compañera senadora Arely Gómez, también por parte del Grupo Parlamentario del PRI, en la Comisión de Derechos Humanos, el interés no solamente de conocer la información sino sobre todo de tener reuniones de trabajo con mayor análisis de lo que ya estamos viendo frutos y creo que en una valoración muy sucinta podemos ver que hay resultados, que ha habido una responsabilidad, compromiso y sensibilidad de todos ustedes y que ese análisis nos pueda permitir generar mejores leyes, política pública, es decir, bienes públicos.
Creo que estamos íntimamente relacionados; hay otras Comisiones a las que también nos interesa esta participación, trata, niñez, el tema del bullying, que no se tocó específicamente, pero que de alguna manera se está contemplando con el Comité que ustedes están planeando, con lo relativo a la niñez.
Pero bueno, hemos visto casos dramáticos, efectivamente, que la ciudadanía no sabe qué hacer; las instituciones no saben qué hacer; las autoridades no saben qué hacer. Entonces sí es importante.
Aquí tenemos ya presentadas iniciativas de manera plural en el tema del bullying, que más allá de lo que significa el concepto de acoso escolar, va una iniciativa integral de lo que es una vida libre de violencia en el ámbito escolar, que trata abuso sexual infantil, o separaciones de adolescentes si se embarazan, que es un tipo de discriminación también y que trastoca sus derechos.
Entonces queremos que más que datos o información es muy relevante el trabajo conjunto para el análisis de nuestros trabajos.
Creo que hay muchos retos, por supuesto. Se ha avanzado, hemos visto que por supuesto la parte administrativa cobró mucho tiempo pero que ya cada uno se está abocando a sus ámbitos de trabajo.
Veo, por ejemplo, en el Registro Nacional de Víctimas, que a veces la clasificación, también, puede ser diferente entre lo local, lo federal y pareciera que no se visibilizan algunos de los problemas por una clasificación errónea.
Hemos visto estos casos en los temas de feminicidios, en los temas de violencia doméstica o violencia en el ámbito familiar.
Entonces sí es importante no solamente como aquí se ha dicho, números; también esos casos humanos, el trasfondo y una correcta clasificación para entender el fenómeno y sobre todo la raíz de los males, de los problemas que, como aquí lo han señalado, tiene que ver con una violencia generalizada y, por otro lado, con lo que ha significado la victoria de la sociedad civil de cada vez participar más en la toma de decisiones.
Ante ello, primeramente yo sí creo que hay más coincidencias, que hay más cosas a favor de lo que aquí tenemos, un mar de oportunidades. No es gratuita su presencia, hay una trayectoria personal, individual, profesional, hay una representación de todos ustedes.
Entonces sí creo que puedan buscar la manera de cómo superar esas diferencias que no afecten la operación o la eficacia, que son los objetivos fundamentales de la creación de esta Comisión y que se pueda ver la forma de esa reconciliación en el trabajo mismo.
Queremos que, también, es un cuerpo colegiado, tenemos diversos partidos, pero muchas veces por encima de los intereses que a veces se puedan pensar, se ve el interés de la Nación. Y esa es la alta responsabilidad que tenemos, conjunta.
Por eso creo que en esto es el ánimo de que al superarlo podamos tener mejores protocolos, mejores modelos, mejores mecanismos, en esos mecanismos yo subrayo la participación de la sociedad civil, que está interesada en una real participación, no solamente de que se le informe con transparencia la rendición de cuentas, sino en el ejercicio de la política pública, de lo que es la gobernanza y creo que ustedes y nosotros podemos abonar mucho en una apertura más formal, más esquemática, sistemática, también, de la sociedad civil.
Quisiera subrayar el aspecto entonces de la niñez y de la sociedad civil y del aliento a que estas situaciones puedan prosperar en que los retos que tenemos sigamos en un análisis más a fondo en reuniones más de trabajo que de información.
Muchas gracias.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Gracias senadora Saldaña. Tiene el uso de la voz la senadora Adriana Dávila.
SENADORA ADRIANA DÁVILA FERNÁNDEZ: Buenos días a todas y a todos. Bienvenidos a este Senado de la República.
Yo no quisiera ser el prietito en el arroz y entiendo perfectamente que este Senado de la república tuvo un motivo para poder platicar con ustedes.
Primero, yo quisiera empezar por reconocer la trayectoria de cada uno de ustedes. Por algo fueron electos, por algo fueron designados. Cada uno tiene características específicas, especiales y son profesionales en las cosas que plantean y son profesionales en las cosas que están señalándose.
Pero la realidad es que hay un problema en la Comisión Ejecutiva de Víctimas. Sí hay un problema que tenemos que atender y es un problema de responsabilidad compartida.
Yo quisiera plantearlo no como un asunto de una comparecencia en la que ustedes vienen acá y son regañados, porque los primeros regañados tendríamos que ser nosotros como legisladores.
Primero, porque lo que está sucediendo en la Comisión Ejecutiva de Víctimas evidencia claramente que nosotros cometimos errores en la elaboración. Evidencia claramente que hay deficiencias que tenemos que corregir para mejorar el funcionamiento de la ley y por supuesto facilitarles a ustedes el trabajo.
Desde el primer momento en el que ustedes tienen que estar peleando por un presupuesto, por una organización administrativa que les dé herramientas para poder atender los cientos, cientos y cientos de problemas que les llegan todos los días, porque no es fácil atender una víctima. Desde ese tema hasta la elaboración concreta de programas y planes de trabajo de lo que la ley ya les está mandatando.
Yo reconozco también, como lo hicieron mis compañeras senadoras, la participación de la sociedad civil, especialmente de lo que ustedes han venido haciendo; porque muchos de ustedes no sólo se formaron ahí, no sólo fueron activistas, no sólo han estado haciendo esto. Se han preparado profesionalmente para dar un paso adicional a este tema; y es justo en lo que quisiera hacer hincapié y poner un poco el dedo en la llaga, y primero ofreciendo a todos ustedes una disculpa si mis comentarios pudieran hacer sentir que es como un regaño, insisto, los primeros responsables de esto somos nosotros como legisladores.
En ese sentido, yo quisiera plantear primero lo que la propia ley establece, y la ley establece en su aplicación objeto e interpretación, en el capítulo I, un párrafo que quisiera señalar: “La presente ley obliga en sus respectivas competencias, a las autoridades de todos los ámbitos de Gobierno y de sus poderes constitucionales, así como a cualquiera de sus oficinas, dependencias, organismos o instituciones públicas o privadas, que velen por la protección de las víctimas para proporcionar ayuda, asistencia o reparación integral”.
En el objeto de esta ley, ustedes tienen un propósito mayor. No sé cómo se puede interpretar lo que voy a decir, pero lo que yo quiero señalar aquí es que ustedes están dando un paso más allá de dejar de ser organizaciones civiles, a ser servidores públicos; y esa es una responsabilidad más grande.
Perdón, no lo digo porque la responsabilidad de las organizaciones no lo sean; por supuesto que tienen una responsabilidad, nada más que ustedes al ser servidores públicos son pagados por los impuestos de los ciudadanos, reciben y perciben como nosotros, un sueldo por los ciudadanos y, por tanto, tienen una obligación mayor para atender aquello que tanto ustedes defendieron fuera de ser la Comisión Ejecutiva de Víctimas.
Esa es la gran diferencia entre lo que ustedes eran antes y lo que hoy ustedes son; y creo que en una reunión de esta naturaleza, no pudiéramos avanzar muy claro. A mí me gustaría, en principio, sentarme con cada uno de los comisionados para saber no sólo qué están haciendo, sino en qué podemos ayudar: mejorar los marcos normativos, establecer mejores condiciones, revisar qué otras leyes tendríamos que estar modificando adicional a este tema. En fin, un análisis muy claro, y de qué manera podemos coadyuvar.
Voy a leer otro párrafo, y perdón que me alargue un poco, ofrezco disculpas a los presidentes de las comisiones; pero dice: De la estructura operativa del Sistema Nacional de Atención a Víctimas, ustedes son parte de este Sistema Nacional de Atención a Víctimas, por tanto, son parte de un órgano de Gobierno; insisto, servidores públicos.
Y dice, fíjense bien: “La Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas es el órgano operativo del Sistema Nacional de Atención a Víctimas”. Por supuesto que tiene personalidad jurídica propia; por supuesto que debe tener personalidad propia; por supuesto que debe tener recursos propios; por supuesto que no son lo mismo que el Ejecutivo Federal, pero sí forman parte de este Sistema Nacional de Atención a Víctimas, que tiene una obligación mayor; y no podemos quedarnos en el paso, insisto, de pensarnos nuevamente como organizaciones civiles, porque entonces estaríamos faltando –y lo digo con mucho respeto– a aquellos que les dieron a ustedes la confianza para proponerlos –en algunos de los casos– y otros que están esperando mucho más de ustedes y de nosotros como servidores públicos.
Y justamente dice que de esta Comisión depende el fondo, la Asesoría Jurídica Federal y el Registro Nacional de Víctimas. Qué pasaría si en el proceso, como lo que se ha venido dando, alguien decide: “yo ya voy a renunciar a este cargo” o en su defecto, “por las condiciones que sean, renuncio a este cargo”, llámese renunciar a la Presidencia de la Comisión o al cargo de comisionado.
¿Qué es lo que cada uno de ustedes está dejándole a esta Comisión Ejecutiva de Víctimas, para que el que llegue o en su momento para que cuando ustedes cambien y dejen el cargo, este proceso siga con o sin ustedes?
Porque el cargo trasciende a la persona, el cargo que ustedes tienen fue el fruto de una –yo diría– inequitativa lucha en su momento y de una lucha por la que muchos ni siquiera vieron reflejado lo que pasaron en ese proceso.
Me explico más claramente: muchas víctimas tienen puesta la mirada sobre ustedes, porque lo que ellos hicieron en su momento quizá no se vio; en su momento ni siquiera se escuchaba; en su momento ni siquiera se oía. Tenemos casos de los que no quiero hablar, porque luego se hieren susceptibilidades, y tenemos casos en todos los sexenios, de todos los colores y de todos los partidos, que son verdaderamente dogmáticos y que nos han marcado como país.
Y en esos casos, esos casos fueron el referente para que ustedes hoy sean los comisionados de una Comisión Ejecutiva tan noble; pero que tiene una responsabilidad mayor que sólo el simple pronunciamiento.
Por eso, para mí es importante que hagamos una reflexión sobre lo que está pasando. Claro que le corresponde a ustedes ponerse de acuerdo; claro que si se ponen ustedes de acuerdo sobre quién es el presidente o la presidenta, sobre cómo se distribuyen los comités, sobre cómo trabajan en cada comité, sobre qué personal entra a trabajar o no, sobre quién les administra o no los recursos. Esa es una facultad que ustedes tienen establecida en la ley, en el pleno.
Pero yo quisiera que ustedes revisaran si eso que están haciendo está ayudando en este primer momento a poder organizarnos. Es decir, entraron con una dificultad mayor, primero, porque no había recursos; segundo, porque heredaron parte de Províctima, con sus deficiencias y con sus bondades, ¿eh?, y con sus grandes bondades que tuvo Províctima.
Pero en esa primera etapa es, ¿hasta dónde ustedes se harán cargo de las cuestiones de carácter administrativo? Y ¿Hasta dónde tendremos que dejar que esas cuestiones de carácter administrativo las lleve alguien más y ustedes hagan la tarea más importante, que es la parte de la política pública?
Y que en esa parte hay no sólo la experiencia de Susana, de Jaime, por supuesto de Olga, de quienes ya han vivido en carne propia una circunstancia de esta naturaleza, de Julio, por supuesto de todos, ya no quisiera dejar de mencionar a ninguno de los comisionados, porque todos son valiosos para un trabajo de esta naturaleza.
Pero en este sentido, la creación y objeto de la que ustedes fueron y están plasmados en la ley, también tiene una obligación, que es el Estado de Derecho; ¿y qué significa?, que ustedes son los primeros responsable en cumplir y hacer cumplir la ley.
Entiendo perfecto lo que señala una de las comisionadas, no Susi, Rosario, cuando dice: “nosotros tenemos la obligación de atender a todos”, porque efectivamente, tenemos que atender a todos si son víctimas; la ley establece que hay que atender a las víctimas del fuero federal.
Entiendo que en esa intención de poder ayudar a otros, lo que le estamos haciendo es restando obligaciones a las entidades federativas, que tienen que comprometerse también. Y en la medida en que ustedes sigan supliendo las funciones que tienen que obligar a que el resto las cumpla, como los gobernadores de los estados en sus congresos locales, en su participación; es en la medida en la que ustedes podrán tener una carga no menor, porque la carga sigue siendo la misma y la responsabilidad la misma; pero podrán ser más eficientes en su atención.
Que no se confunda que la atención a las víctimas sólo es una responsabilidad de hablarles y tratarlos bien; no, significa que salgan y que pasen –y más que nadie tú lo sabes, Rosario– de ser víctimas a ser sobrevivientes. Ese es el reto que esta Comisión Ejecutiva de Víctimas tiene. La atención a víctimas no puede quedarse sólo en esta atención.
Y perdón que ya me extendí. Este tema, al igual que a ustedes, a muchos de nosotros nos apasiona y a muchos de nosotros nos genera ciertas condiciones de sensibilización y también, por supuesto, nos genera condiciones que tienen que ver con la compasión. Pero la compasión no puede ser para un órgano de servidores públicos; el único instrumento que nos ayuda a generar políticas públicas.
Tienen que revisar, primero, su propio Reglamento, que es facultad del Gobierno Federal y de la Secretaría de Gobernación, de establecerlo para que ustedes funcionen. Si hay diferencias en ese Reglamento, que puede haberlas, y válidas, tienen que utilizar los mecanismos adecuados para plantear esos argumentos y para pelear lo que pelearon muy bien antes de ser ustedes nombrados comisionados; porque de la lucha que muchos de ustedes hicieron, hoy están ustedes en esta Comisión Ejecutiva; y hoy tenemos una ley y hoy tenemos muchas cosas.
Pero entonces tienen que repetir, no el modelo, tienen que mejorar el modelo que utilizaron para esto, porque hoy su responsabilidad es mayor.
Yo quisiera proponer –y con esto finalizo, y perdón por la extensa participación– a esta reunión de Comisiones Unidas, a ambas comisiones, que tenemos que pasar de una reunión de esta naturaleza, de información –como lo plantea la senadora Lucero Saldaña–, a una reunión de trabajo con cada una de las comisiones y los comités que fueron conformados aquí, para establecer concretamente, insisto, dos cosas:
Uno, ¿en qué podemos ayudar nosotros? ¿Cómo podemos mejorar esos mecanismos de ayuda?
Y segundo, ¿cómo pueden ustedes también mejorar su trabajo al interior de la Comisión?, pensando que principalmente quienes tienen la responsabilidad mayor de esta atención, hoy son ustedes. Hoy recae en ustedes.
Sí está pesado el trabajo, nadie les dijo que era fácil; pero perdón que lo diga, también ustedes lo aceptaron y apechuguen lo que aceptaron y asuman la responsabilidad que les dimos, no el Senado de la República, porque nosotros los senadores también nos vamos a ir y el traje nos lo vamos a quitar en algunos años, se pasan rapidísimos.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Desafortunadamente.
SENADORA ADRIANA DÁVILA FERNÁNDEZ: Desafortunadamente, dice Roberto Gil, o afortunadamente para muchos ciudadanos ¿verdad? que también van a decir, chin, ¿verdad?
Pero creo que hoy hay algo más allá. El país está en una depresión social y eso nadie lo puede negar. Bueno, entonces contribuyamos a que esto mejore.
No es un regaño del Senado de la República: es una responsabilidad compartida, así la asumo y asumo, en el caso concreto del Grupo Parlamentario del PAN y sin intentar hablar por el resto de mis compañeros, porque hablará Mariana Gómez del Campo también, asumo la responsabilidad que nos toca: hay que hacer revisiones, por supuesto, a este ordenamiento de la Ley General de Víctimas, pero a muchos otros para que les faciliten a ustedes el trabajo.
Tómenos como coadyuvantes en este tema, pero también tomemos todos juntos una responsabilidad distinta. Insisto y reitero mi petición para ustedes: den el paso de ser organizaciones civiles a ser servidores públicos. Es difícil, son muy criticados y serán muy criticados también, pero vale la pena por lo que ustedes lucharon y vale la pena porque de verdad creo que hay muchas cosas más que hacer y también coincido en que hay muchas más coincidencias entre ustedes, sólo asumámoslo todos con esta responsabilidad.
Bienvenidos nuevamente y estoy a la orden. Muchas gracias.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Muchas gracias, senadora Dávila.
Tiene el uso de la voz la senadora Mariana Gómez del Campo.
SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA: Muchas gracias, Presidente, trataré de ser muy ejecutiva después de la intervención de mi compañera Adriana Dávila.
Yo solamente, primero, celebrar que estemos llevando a cabo esta reunión, la iniciativa de ambos presidentes: de la Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos y del Presidente de la Comisión de Justicia.
Me parece crucial que trabajemos de la mano con ustedes, con esta Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas y creo que debiera ser mucho más frecuente el que pudiéramos tener estas reuniones de trabajo y que no solamente sea por la coyuntura por la que están atravesando.
Me imagino, además, que parte de la coyuntura por la que están atravesando es lo complicado que ha sido esta transformación de PROVÍCTIMA a tener una Comisión tan distinta a lo que venía operando desde ahí.
Yo quisiera, y no me voy a centrar tanto en la parte de cómo se están organizando internamente, yo espero que pueda superarse y –como decía aquí mi compañera Adriana Dávila– que podamos ver también desde el Senado de la República cómo podemos perfeccionar las leyes para que su trabajo sea más eficiente y para que pueda haber un mayor entendimiento.
Ya lo decía la senadora Lucero Saldaña, a mí me inquieta mucho el tema del acoso escolar que, más allá de una coyuntura –porque lo vería en este momento una coyuntura en los medios de comunicación– es un tema y es un problema que lleva ocurriendo durante décadas en nuestro país, pero ahora es mucho más marcado por la presencia de las redes sociales y por el acceso de nuestros niños, de nuestros jóvenes adolescentes a las redes sociales y que puedan contar con un celular en el salón de clases, cosa que no ocurría antes en nuestros tiempos y, me atrevería a decir, en los tiempos de todos los que estamos en esta mesa, cuando tú ibas en primaria o en secundaria no había manera de tener un celular a la mano y además muy probablemente tenías de las cámaras de antes que tenías que comprar el rollo, revelar, era muy complicado que el acoso escolar saliera o del salón de clases o del patio de la escuela o del camión escolar.
Ahora es un tema que afortunadamente muchas instancias, tanto al Gobierno Federal en la parte legislativa, ya lo decía aquí Lucero, presentamos varias iniciativas que más adelante a mí me gustaría conocer su opinión con respecto a una iniciativa firmada por todos los partidos políticos en donde creemos que debiera existir una ley general para combatir, erradicar, evitar el acoso escolar en nuestro país. Me encantaría conocer su opinión.
Desconozco si ya tengan la iniciativa, pero si no, con mucho gusto se las voy a hacer llegar, porque me parecería crucial que también esta Comisión Ejecutiva estuviera atendiendo a víctimas de acoso escolar. Yo no sé si al día de hoy han recibido a víctimas de acoso escolar, pero por falta de información, tanto de los padres de familia como de los estudiantes, como de los maestros, que muy probablemente ni siquiera sepan que existe esta Comisión de Atención a Víctimas y acuden a la instancia que se les presenta, que se les pone enfrente, como pueden ser diversas organizaciones que llevan trabajando el tema mucho tiempo.
Yo sólo quiero decirles que es triste que estemos tomando cartas en el asunto con un tema tan sensible para los mexicanos de manera tardía, desde mi punto de vista. Yo les pongo el ejemplo porque en 1982, en un país como Noruega, se presentó un caso de bullying y en 1983 ya tenían implementado, y de ahí nace además el término bullying, en 1983 ya tenían implementada una campaña nacional, ya había materiales en las escuelas, ya los debatían, ya había debate entre los maestros, padres de familia, estudiantes; sensibilizaron a la población de volada y hoy hay pocos casos de acoso escolar. Siento que nosotros vamos muy tarde en el tema y hoy tenemos el penoso primer lugar a nivel internacional en casos de acoso escolar, de acuerdo a cifras de la OCDE. Ese sería el primer tema.
El segundo, ¿de qué manera ustedes están atendiendo a los familiares de las personas desaparecidas?
Y, en particular, a mí me preocupa el tema de los familiares de los migrantes desaparecidos. Siento que es un tema que ahí sigue, seguimos escuchando historias y lamentablemente pocas respuestas.
¿Ustedes cómo los localizan?, ¿a cuántos han localizado?, ¿cómo están implementando esta parte para que, en el tema de migrantes, esta Comisión pueda jugar un rol muy importante?
Y, por último, solamente quisiera saber qué tanto apoyo están recibiendo del Gobierno Federal, concretamente de la Secretaría de Gobernación para poder hacer más eficiente su trabajo.
Muchísimas gracias por estar aquí en el Senado.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Gracias, senadora Gómez del Campo.
A continuación tiene el uso de la voz el senador Manuel Camacho Solís.
SENADOR MANUEL CAMACHO SOLÍS: En toda nueva actividad siempre el arranque es difícil, no es la excepción, eso pasa desde que uno entra a clases, no habría que preocuparse de más siempre y cuando exista buena voluntad de todos los integrantes de esta Comisión. Yo estoy seguro de que ya existe.
No quisiera extenderme más, pero sí decirles nada más dos cosas:
Primero, quienes participamos en estas decisiones, lo hicimos no sólo porque era nuestra obligación política, nuestra obligación como legisladores, sino por nuestra enorme preocupación por el problema de las víctimas que para mí es el problema más grave del Estado Mexicano; o sea, no estamos hablando de uno de los tantos problemas del país.
Ese hueco que tiene el Estado Mexicano es el asunto más doloroso, más lacerante y tenemos que hacer todo lo que esté en nuestras manos para bajarlo, para reducirlo, para encausarlo y me parece que ese era el propósito de la ley y el propósito de esta Comisión.
Y, lo segundo, que creo que hicimos una buena selección. La verdad es que no fue un trabajo que se hizo a la ligera, sino que nos fijamos en las cualidades morales, profesionales de cada una y cada uno de ustedes.
Yo sigo reiterando la confianza con la que tomamos las decisiones. Sabemos que ha habido algunas diferencias, yo espero que esas diferencias las resuelvan.
Una vez yo estaba en una reunión y le pregunté a un político, le dije: “Oye, ¿por qué no me dices cuáles son mis errores?” y me dice: “Si te quieres dedicar a la política, no me hagas esa pregunta”.
Ya todos estamos grandes, ya todos sabemos lo que tenemos que hacer. Para que haya un conflicto tiene que haber dos partes; a veces la responsabilidad de una parte es del 10 por ciento y el otro es del 90, a veces es de 50-50, pero es casi imposible que haya un conflicto en donde una de las partes no tenga algo de responsabilidad.
Si uno parte de ese hecho, sí me parece que están en la obligación y ha de cerrar este capítulo de manera definitiva ya ni mencionarlo, porque no vale la pena y concentrarse en lo que es su responsabilidad que, por cierto, es bastante grande.
Entonces, ustedes tienen toda nuestra confianza, habrá problemas administrativos, habrá todo, yo no me metería ahorita en reformas en leyes ni en reglamentos ni nada, sino simplemente en ponerse a operar de la mejor manera posible y en atender un asunto que es apabullante.
Entonces, en todo lo que pueden hacer para ello tienen la confianza de todas estas comisiones, de cada una de las senadoras, de cada uno de los senadores y confiamos que la próxima reunión sea para que nos compartan sus experiencias sobre la sustancia de la comisión.
Es decir, tres preguntas: este debate que hay en este momento sobre las cifras de los desaparecidos, o sea, cual es la opinión de la comisión al respecto, porque a nosotros el Secretario de Gobernación nos ha dado una información de revisión de número y quisiera saber si ustedes están de acuerdo o no con esa información.
Lo segundo es si lo que están haciendo tiene una utilidad práctica para resolver el problema para el que fue creada la comisión, aunque me está siendo esto útil y, tercero, si ustedes observan a nivel nacional que el problema que dio origen a esta comisión está siendo mitigado o si persiste el problema en la misma dimensión que dio lugar a esta comisión.
Es decir, que pudiéramos compartir con ustedes la evaluación que ustedes hacen de la decisión que tomó el estado Mexicano para atender el problema y cómo vamos realmente o qué tendríamos que hacer para mejorar nuestra actuación, pero reiterándoles la confianza, cada uno lo tratamos, vimos que había una buena intención, que hay capacidad profesional y creo que al combinación de personalidades y experiencias es lo que va a hacer la riqueza de este cuerpo colegiado.
SENADOR LUIS ALBERTO GIL ZUARTH: Gracias senador Camacho.
Presidenta Angélica de la Peña, por favor.
SENADORA ANGÉLICA DE LA PEÑA GÓMEZ: Gracias Presidente.
Creo que las intervenciones de ustedes y por supuesto la de mis colegas, no tienen desperdicio y me sumo a cada una de ellas. Creo que lo que ha planteado el senador Camacho no tiene desperdicio.
El problema es muy complejo, la situación que se intenta resolver con una ley totalmente nueva, pero totalmente novedosa también para el país, que dé respuesta a un problema grave, que es un problema del Estado Mexicano, ahí estamos incluidos todos los partidos políticos.
No puede uno ver hacia el futuro si quiere uno verlo de manera constructiva, no asumir todos la responsabilidad, donde estemos, porque resulta que quienes estamos aquí pertenecemos a grupos parlamentarios que gobernamos este país, unos a nivel federal, otros a nivel de las entidades, otros a nivel de los municipios, y todos tenemos responsabilidades.
Yo no me distingo por buscar a quién le paso la culpa, sino asumir la responsabilidad que me compete también formando parte de quienes asumen la responsabilidad política en la conducción de la gobernanza.
El problema de víctimas de violaciones a derechos humanos es grave en el país. Es lamentable escuchar la historia de cada una de estas víctimas, de sus familiares. Creo que todos los que estamos aquí hemos recibido y seguimos recibiendo a familiares y es verdaderamente conmovedor, pero hay una diferencia.
La diferencia es que estamos en un espacio de poder, tenemos capacidad, nuestra obligación es atender la incapacidad que ll¿¿viene a evidenciarnos, distintas familias con cada una de sus historias, donde tienen, uno, dos, tres, cuatro, seis años, es algo verdaderamente terrible.
Nuestra obligación, además de conmovernos es ocuparnos y Manuel lo dijo muy bien: ¿qué es lo que nos unió? Incluso resolviendo alguna confrontación, como lo decía Adriana, muy bien, la senadora Dávila, para que finalmente resolviésemos desmontar la parte política para entrar a la parte propiamente legislativa, siguiendo esta dinámica que caracterizó la decisión en primerísimo lugar del Presidente Peña Nieto, de quitar la litis en el Poder Judicial y publicar la ley y entonces entrar a la siguiente etapa, como también lo dice Arely, la senadora Gómez, de corregir hasta donde se podía corregir, como bien señala la senadora Dávila.
Esa es la historia que ustedes tienen como un bagaje que no debe ser una carga sino al contrario, porque todos nos unimos para construir.
Reformas que por cierto, efectivamente senador, tenemos que emprender nuevamente a la ley, por muchas cosas, pero sobre todo por una. Nada más voy a mencionar una:
La homologación con el Código Nacional de Procedimientos Penales. Y no lo podemos hacer sin ustedes. Y queremos ser Cámara de origen y para hacerlo con ustedes, a partir de lo que nos han informado ahora cada uno de ustedes, me parece que debemos también aprender de lo que ustedes han enfrentado.
Yo no quiero justificar las broncas que han tenido. Tienen también; por cierto, pues han sido públicas, queridas y queridos.
Si ustedes son, creo que nuestro primer producto de la conjunción de voluntades, conjunción de voluntades políticas, y me acuerdo que efectivamente vimos los perfiles y no nos equivocamos.
Pero bueno, somos humanos y humanas y un órgano colegiado que tiene que asumir responsabilidades, como ustedes también lo observaron, sin haber tenido una ley, con una vácate o legis que integrara un órgano que era Pro Víctima con otro órgano nuevo, la bronca del presupuesto.
En fin, todo ese tipo de cuestiones claro que contribuyen hasta en el ánimo de ustedes para enfrentar las broncas, hasta en el ánimo, como pasa con las parejas y con las familias. La bronca económica luego también puede ser motivo de una bronca marital. ¡Sí!, por supuesto que sí.
Y cuando tienes una presión del tamaño de la responsabilidad que ustedes tienen claro que puedo entender y justificar. Lo que no se puede justificar es que salgan a los medios de comunicación, se los digo con mucho cariño.
No hagan eso ya, porque eso lo único que contribuye es que a ustedes venga el asunto; vaya hacia el camino de la rispidez y no al camino de haber. Pensemos, respiremos hondo y profundo y replanteemos como un órgano colegiado qué es lo que hay que corregir y efectivame3nte son pares. En fin.
Yo celebro mucho esta reunión. Me parece que cuando la propuso el senador Gil, preocupado igual que todos los demás y todas las demás por las circunstancias que estábamos viendo, dijimos sí, hay que parar esto porque no pueden seguir la ruta de otros órganos que hemos también tenido aquí, que tuvimos que tomar decisiones drásticas.
Yo creo que, igual que mis compañeras y mis compañeros, van ya articulados con los informes, han articulado dónde están las acciones y las preocupaciones planteadas en algunos temas específicos como lo de trata, lo de bullying, lo de migrantes, que ha planteado la senadora Gómez del Campo, son parte de lo que queremos que ya se empiece a notar; la atención a la primera infancia, en fin.
Me parece que no hay desperdicio en que esta reunión tuvo, cumplió su objetivo y por supuesto tenemos que seguir trabajando para que podamos lograr que esta transición de Pro Víctima a esta Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, se concrete lo más pronto posible, tengan los fondos, sigan por esta ruta que ya han articulado y esperamos que tengamos esta misma dinámica de reuniones para que también ustedes nos digan cómo podemos seguir coadyuvando, cómo podemos corresponsabilizarnos con ustedes para que puedan ustedes lograr la encomienda que este Senado de la República les dio cuando los elegimos. Por cierto, no por dos terceras partes. Fue por unanimidad del Senado.
SENADOR ROBERTO GIL ZUARTH: Muchísimas gracias presidenta De la Peña. Yo quisiera hacer, para concluir, unos cuantos comentarios, muy breves, para no extender más el turno de intervenciones a cargo de los senadores.
Lo que motivó esta reunión, en buena medida fue la circunstancia pública de un sisma, como ustedes mismos llamaron en las discusiones internas.
Estoy prácticamente citando textualmente expresiones de ustedes que están consignadas en las actas de algunas de sus sesiones.
Para nosotros es motivo de enorme preocupación que la Comisión entrara en un desgaste interno que afectara el mandato, que afectara su dinámica de trabajo y que pudiera retrasar los esfuerzos que se requieren hacer para lograr el primer objetivo en el corto plazo, que es la evolución de las instituciones muy precarias en materia de atención a víctimas, hacia el modelo que dejamos plasmado en la ley.
Porque sí tenemos todos claro que no es la responsabilidad de ustedes cargar con la herencia de PROVICTIMA, sino evolucionar hacia la creación de una nueva institución que debe, en efecto, partir de las capacidades que están instaladas y que con sus propios defectos, dado el diseño, los mandatos que recibió, no era la institución propicia para poder cumplir con eficacia el mandato petico, político y legal de atender y proteger a las víctimas.
Esa es la razón por la cual les pedimos celebrar esta reunión, no solamente para que de lo que se habla en los medios o incluso en los pasillos del Senado sobre la Comisión de Víctimas es sobre ese sisma, sino sobre lo que están haciendo, hacia dónde quieren llevar la institución, qué derroteros institucionales están ustedes construyendo.
Extraño un poco de estos primeros meses de trabajo de la Comisión Ejecutiva tres grandes temas: uno, diagnósticos de realidades de victimización.
Hay un pendiente, por lo menos me imagino que ustedes están trabajando en eso, pero creo que es importante que el Senado de la República, el Congreso, la propia sociedad, conozca estos diagnósticos de realidades de victimización, para saber cuál es el punto de partida, la realidad a la cual nos vamos a enfrentar ustedes y nosotros para poder ir superando esas realidades de victimización.
Me quedo muy preocupado por el retraso en la concreción del proyecto del Reglamento Interior. Por lo que entendí, ha habido algunas diferencias entre ustedes, que ha dificultado la conclusión de la emisión de este Reglamento.
Creo que es fundamental que ese Reglamento pueda concluirse en el corto plazo, es el instructivo de trabajo de ustedes. Celebro que el Estatuto Orgánico haya quedado ya concluido, pero lo que entendí, el Reglamento todavía tiene algunas diferencias.
Ya se arregló, qué bueno. Así lo entendí, por una intervención, que había todavía algunas diferencias sobre el contenido del Reglamento.
Y lo tercero que me genera cierta preocupación y lo dijo de manera muy clara la senadora Adriana Dávila y creo que sus palabras son contundentes.
Hay que, personalmente, desde el punto de vista individual, de cada uno de los miembros de este colegiado, trasladar en una evolución personal del activismo, la responsabilidad pública.
Y eso implica no solamente un trabajo diferente, sino también, déjenme decirlo de manera coloquial, un cambo de chip. Si, en efecto, ustedes conocen la realidad de la victimización porque vienen de ahí, vienen de su atención, vienen de su cercanía, pero ahora tienen que convertirlo en políticas públicas, con objetivos, sistemas de evaluación, de claridad de propósitos, en fin.
Por supuesto que se entiende y se antoja difícil el aterrizaje administrativo. Lo que vemos en los documentos es que se ha ido avanzando, se han ido ya resolviendo algunos problemas.
Alguno de ustedes me comentaba que no habían logrado que se les pagase su sueldo en varios meses y que, bueno, afortunadamente eso se ha ido arreglando, que ya han avanzado en la creación de plazas, en los nombramientos, lo cual me da gusto, pero sí debiéramos superarlo lo antes posible, para que pueda la Comisión en pleno y en sus distintas áreas poder empezar a trabajar en lo verdaderamente fundamental.
Y por eso ofrecemos, como Senado de la República, el respaldo, el apoyo y la gestión para que esos asuntos que queden pendientes puedan ser resueltos en el corto plazo.
Sigo insistiendo en que uno de los problemas que tienen los colegiados que tienen cierto grado de autonomía funcional tiene que ver con la manzana de la discordia que es la Presidencia.
Donde hay Presidencia decidida por los colegiados, hay problemas. Problemas provocados por diferencias, problemas por una visión de grupo, por problemas de muchos tipos.
No es la primera ocasión que tenemos un problema asociado a una Presidencia, si las razones habrá para la renuncia, las personas habrá para un nuevo nombramiento, pero lo cierto es que no hay estabilidad institucional cuando la Presidencia está sujeta a dinámicas internas.
Creo que una de las cosas que tenemos que resolver en esta inminente reforma a la Ley es corregir que el Senado de la República sea quien decida la Presidencia y que sea una presidencia que concluya un mandato para darle calidad institucional al órgano.
Es una opinión personal y estoy convencido: donde hay sistemas de nombramiento externo a las presidencias, los colegiados funcionan. Donde no hay, existen tensiones permanentes y lo digo con mucho respeto para la Suprema Corte de Justicia, lo digo con mucho respeto para el IFAI y lo digo con mucho respeto para ustedes.
Es un antídoto también que evita la distracción de dinámicas internas, evita la formación de grupos e implica, evita o genera antídotos para transacciones de tipo institucional.
Creo que es una cosa que tenemos que resolver, no es elemento de desconfianza hacia ustedes, sino simplemente significa sacar una manzana de la discordia con una dinámica permanente.
Estoy convencido de eso, creo que hay realidades y evidencias que nos demuestran que funcionan mejor los modelos que sacan de esas dinámicas coyunturales esa decisión, que no solamente es una decisión de condicionamiento activa, sino también es una decisión de estabilidad institucional de las políticas internas.
Y, por último, hacer una propuesta: aquí hay tres comisiones representadas, la Comisión de Derechos Humanos, la Comisión de Trata, la Comisión de Justicia, han salido una serie de temas y propondría que estas tres comisiones formaran subcomisiones temáticas en materia de migración, en materia de bullying, en materia de trata, en materia de desaparecidos, en materia del Registro Nacional de Víctimas y en subcomisiones de fondo, que tuvieran un contacto permanente con el área correspondiente de la Comisión de Atención a Víctimas, sobre todo para entrarle a la revisión de los diagnósticos de realidad de victimización y también ver el acompañamiento en materia de políticas públicos y así lo hacemos de manera temática y mucho más profunda, sobre la base de la experiencia que ustedes van desarrollando desde la Comisión Ejecutiva y la experiencia que hay en Senado de la República, porque las senadoras y senadores van decantando la evolución, a partir no solamente del interés, sino también de la forma en la que se aproximan a estos temas.
Esas serían mis reflexiones, no sin antes celebrar, como lo ha hecho la senadora Angélica de la Peña, la oportunidad de esta reunión y de nueva cuenta expresarles, aquí por el Grupo Parlamentario de Acción Nacional y en nombre del Senado, nuestro respaldo, nos interesa que le vaya bien a la Comisión Ejecutiva y eso significa que los problemas sociales van evolucionando y se van resolviendo.
Estaremos pendientes y a la orden de ustedes para poder apoyar el mandato que han recibido en todos los términos, en lo administrativo, en lo político y también en la definición y concreción de la política pública y pedirles, en consecuencia, que logremos encontrar un sistema de acompañamiento permanente entre el Senado de la República y la Comisión Ejecutiva, para que las definiciones de política pública y los mandatos consignados en la ley, sean realidades tangibles para quienes sufren o han sufrido alguna condición de victimización.
Por su atención, muchas gracias. Muchísimas gracias por su asistencia.
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