Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL

Conferencia de prensa ofrecida por senadores del Grupo Parlamentario del PRD, encabezados por el coordinador Miguel Barbosa Huerta, para fijar un posicionamiento sobre la jornada electoral del pasado 5 de junio y sus resultados.

Miguel Barbosa Huerta, (MBH): Buenas tardes, muchas gracias a los medios de información.

Va en algún momento, pronto, a incorporarse a la conferencia la senadora Lorena Cuéllar Cisneros para que nos haga una presentación gráfica de las irregularidades que se cometieron en la jornada electoral en el PREP y el contraste entre las actas que están en su poder y la forma cómo están reflejados los resultados de esas actas y con ello acreditar que, lo que esperamos, que en los cómputos se haga la corrección de los resultados o en su caso acreditar que tenemos los elementos suficientes para la impugnación y para la reversión de cualquier resultado que pudiera venir o devenir a favor del candidato del Partido revolucionario Institucional.

Antes de que llegue la senadora, quiero fijar una posición en relación, una reflexión en relación al proceso electoral y al escenario del PRD:

El pasado 5 de junio, la ciudadanía expresó su preferencia política. La decisión de cambio y alternancia dominó el escenario, los procesos electorales en todas las entidades del país estuvieron caracterizados por el rebase de los gastos de campaña, el uso y desvío de recursos públicos, el uso de recursos privados de origen lícito o ilícito, la manipulación y presión a votantes, la injerencia de gobiernos estatales, las campañas negras y la utilización de encuestas con fines de desorientación a la ciudadanía.

En medio de este escenario de irregularidades, que tal parece ya se convirtió en la normalidad de la vida política-electoral en México, siete gubernaturas alcanzadas por la oposición -y una más que es la de Tlaxcala donde todo apunta deberá haber un resultado final a favor del PRD y Lorena Cuéllar- constituyen un nuevo escenario, en medio del cual los partidos políticos deberán asumir rumbo al 2018, decisiones trascendentales que marcarán su existencia y destino.

El propósito de esta declaración política es hacer una primera reflexión para el Partido de la Revolución Democrática.

I. Llamamos al Presidente Nacional del PRD, Agustín Basave, a mantenerse en su cargo; su desempeño ha cumplido con las expectativas esperadas.

II. Todos fuimos testigos, cómo para este año 2016 en el país se fue constituyendo un ambiente político en contra del priismo, arrojando datos de los cuales se desprendía la voluntad ciudadana de sacar del poder a este partido.

La lectura en el análisis, en el análisis previo a las elecciones, inducía a ver a Andrés Manuel López Obrador como el beneficiario de esa decisión popular y situarlo como el único candidato a vencer en el 2018.

Hoy nos encontramos que no fue Andrés Manuel López Obrador, sino  el Partido Acción Nacional el beneficiario del voto popular, partido político, el PAN, por cierto, aliando del actual gobierno en todas sus acciones y reformas.

III. El PRD participó con candidatos propios en siete estados y en cinco aliado con el PAN, en tres de los cuales la coalición alcanzó la victoria.

En los tres estados donde la alianza triunfó, el PRD contribuyó a derrotar al PRI; fueron elecciones tan cerradas que el porcentaje del PRD hizo la diferencia.

Lo que no se puede afirmar es que la opinión pública vea al PRD como parte de la victoria, lo real es que de manera indignante se espere un acto de generosidad política de parte del Presidente Nacional del PAN, Ricardo Anaya, para agradecer la contribución del PRD.

IV. El 2018 ya empezó. Para el PRI hoy tiene dos contendientes, según él, sólo era Andrés Manuel López Obrador, hoy también es el PAN; el PAN se siente reconstituido para recuperar el poder público federal.

Andrés Manuel López Obrador no logró lo que esperaba; recuérdenlo la noche del 7 de junio de 2015, cuando por haber ganado la Ciudad se presentó como el gran triunfador de la elección nacional, hoy está cauteloso, nadie lo ve como triunfador de la jornada, ya no es el único candidato a vencer.

V. El PRD tiene que empezar a dilucidar su destino:

1. Su futuro se define entre ser un partido político de oposición real que busque, luche y dispute el poder público a nivel federal y en los estados; o el de un partido político funcional a otro, que sólo forme parte de su estrategia y que conserve su registro.

2. Cerrémosle la puerta a las visiones que sólo ven al PRD como un partido bisagra o como fiel de la balanza rumbo a las elecciones del 2018.

Ni parte de la estrategia del PRI para detener a Andrés Manuel López Obrador, ni parte de la estrategia del PAN para regresar al poder. El PRD no puede convertirse en el Partido Verde del PAN. 

3. Pongamos dentro del PRD toda nuestra capacidad de hacer política, conscientes de la difícil realidad que nos rodea. Resolvamos el tema del relevo de nuestra dirección nacional mediante acuerdo de todos, vayamos a la reconstrucción de nuestro partido, con base en un proyecto sustentado en la visión de una izquierda moderna y progresista, tengamos claro que sólo si recuperamos la opinión favorable de la gente podremos alcanzar el poder público.

En el 2017 y 2018 debemos de ir con candidatos propios y no esperar, desde ahora, ser incluidos en una estrategia ajena.

Es la reflexión que quería hacerles saber esperando la llegada de Lorena Cuéllar pero si hubiera preguntas al respecto, con mucho gusto.