Versión del discurso de la senadora Marcela Torres Peimbert durante la inauguración del foro “Derechos Alimentarios de la Niñez y la Adolescencia; mecanismos para garantizarlos"
Muy buenos días, amigas, amigos, a todas y a todos bienvenidos al Senado de la República.
Antes que nada agradecer a la presidenta de la Comisión, a la senadora Martha Elena García Gómez la posibilidad de comentar con ustedes, de intercambiar ideas, propuestas, dudas sobre esta iniciativa que pude presentar; muchísimas gracias Martha Elena, por esto.
Presidente ejecutivo del Sistema Nacional de Protección Integral de Niños, Niñas y Adolescentes, muchas gracias.
Agradecer también a mi muy querida amiga Rosa Adriana Díaz Lizama, que viene en representación del presidente del Senado, senador Roberto Gil, muchísimas gracias. Además otra mujer muy aguerrida en el tema de defensa de derechos de la niñez y también de la infancia.
Agradecer también al maestro Ricardo Bucio, secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, muchas gracias.
Agradecer también la presencia del doctor Ismael Eslava Pérez, primer visitador general en representación de Luis Raúl González Pérez, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Muchísimas gracias a la maestra Nelly Montealegre Díaz, procuradora federal de Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes. Muchas gracias, en representación de la licenciada Laura Vargas Carrillo, titular del DIF, muchas gracias.
Muchas gracias a la señora Isabel Crowley, representante del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia, muchas gracias.
También agradecer la presencia de Marcela Eternod, directora general de Institucionalización de la Perspectiva de Género.
También agradecer la presencia del licenciado Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia en México, muchas gracias.
Bueno, ya decía hace muchos años, instancia es destino, y aun cuando yo misma en el trabajo terapéutico que realizo, he tratado de no cerrarme a esta frase y decir que el ser humano es un organismo vivo en constante cambio, y que siempre podemos resurgir y renacer y cada día estamos llamados a hacerlo.
Sí creo que esta sentencia de Freud, en donde dice: Las bases de la personalidad de un individuo se generan en sus primeros años de vida, en la infancia y en la juventud, creo que viene mucho al cuento el día de hoy en este foro y es lo que inspira esta iniciativa que presentamos en el Partido Acción Nacional.
En este sentido, el perfeccionamiento de las leyes encargadas de garantizar la pensión alimenticia, que es el sustento físico indispensable para que la personalidad pueda florecer en cualquier individuo; pues es sin duda un tema fundamental para todas las mexicanas y mexicanos, y desde luego para el Senado de la República que hoy representamos.
Debe de ser un derecho prioritario en la Constitución y una obligación para el Estado, no sólo protegerlo de manera enunciativa, que ya lo tenemos en nuestra Constitución a través de un marco normativo idóneo, sino también realmente en la práctica asegurar que su cumplimiento sea puntual y real.
El pasado 4 de diciembre de 2014, ya lo mencionábamos, fue publicado en el Diario Oficial de la Federación, la Ley General de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, esto representa un enorme logro en materia normativa, sin embargo estoy segura que tenemos la oportunidad de construir una ley todavía más sólida en beneficio de las niñas y niños y jóvenes mexicanos.
La pensión alimenticia es un tema fundamental. Estoy absolutamente convencida que debemos fortalecer su ejecución y garantizar su cumplimiento en todas las entidades del país, ya que si bien es cierto en la actualidad existen diversas normas que buscan alcanzar ese objetivo, en la realidad no lo hemos logrado, dejando así desprotegida a una buena parte de nuestra niñez.
Voy a mencionar algunos datos que seguramente ya todos ustedes conocen inclusive mejor que yo, pero vale la pena que los tengamos muy en mente:
En promedio hay un gran número de niñas y niños que provienen de uniones no oficializadas, pero de las sí oficializadas, los matrimonios tienen un promedio de duración en México de nueve años; ese es el promedio de duración de un matrimonio en nuestro país.
La más reciente cifra de INEGI, indica que una de cada tres familias en nuestro México es monoparental y aquí hago un paréntesis, la migración ha venido a traer una enorme ruptura de familias mexicanas. Migración al extranjero, sí, pero también migración interna para conseguir los recursos económicos necesarios.
Y en esta una de cada tres familias, ya sé que a lo mejor algunos de nuestros varones se enojarán, pero las cifras así lo indican, el 90 por ciento están sólo con mamá. Con una mujer que tiene que cumplir con las cinco funciones básicas de la familia: sostenimiento económico, transmisión de valores, trabajo doméstico, generar identidad y pertenencia, y como falta, protección de débiles, ancianos, niños, enfermos, discapacitados, etcétera. Y claro que eso lo hace muy complicado.
Cifras oficiales en nuestro país, nos dicen que aproximadamente el 67 por ciento de las mujeres madres solteras no reciben pensión alimenticia, sólo una tercera parte recibe el recurso necesario para poder alimentar a sus hijos.
Esto es que aproximadamente sólo 20 de cada cien padres, que están obligados por ley a dar la pensión, lo hace.
Y aquí también quiero agregar algo, y que la carga de probar que no lo hacen, recae nuevamente sobre la mamá o sobre la mujer que tiene a su cargo las cinco funciones básicas, y que está en la disyuntiva de seguir un proceso legislativo judicial, largo y costoso, o llevar ese dinero a la familia para el sustento de sus hijos.
Y que entonces, normalmente las madres toman el camino “b”, es decir, la prioridad es sacar adelante a mis hijos, darles de comer y no me meto al pleito. Entonces, vuelve a dejar como víctimas a las niñas y niños, y a esta mujer que por supuesto tiene que avocarse a darle el alimento y la casa que estas niñas y niños necesitan para poder generar estas bases mínimas de su personalidad.
A nivel internacional, países como Argentina, Perú, Uruguay, garantizan el derecho alimentario de niñas y niños, pero en comparación con nosotros dan un paso más allá, y tienen mecanismos legales que hagan real esta obligación de dar esta pensión alimenticia para que niñas y niños y jóvenes, independientemente de las circunstancias que les rodeen,puedan hacer valer este derecho que está ya puesto en nuestra Constitución de tener un sustento.
Este registro de deudores que proponemos en esta iniciativa y ponemos a su consideración, no solamente sirve para tener una base de datos pública a nivel nacional, y que sea de fácil acceso a cualquier madre de familia en cualquier municipio, porque sería a través del DIF municipal, que sí es una instancia que afortunadamente está en todo México y que muchas mujeres independientemente de sus conocimientos o de sus recursos económicos, reconocen y pueden asistir con facilidad, sería la responsable de subir y tener en su custodia pues este listado nacional de deudores alimentarios.
Además con la colaboración de diversas instancias gubernamentales, públicas y privadas, lograr que estos deudores alimentarios puedan ser cuestionados al momento por ejemplo de solicitar un crédito bancario. Cómo vas a solicitar un crédito bancario, si le debes a lo más preciado que tienes, que son tus hijas y tus hijos y tu primera responsabilidad.
Al momento por ejemplo de que una empresa contrate a una persona, podría revisar este listado nacional y decir: “Oye con mucho gusto estás muy calificado, pero hay aquí una responsabilidad primaria que tienes que cumplir y que habla de ti”.
Creo que es elevar el costo, tener una presión social, hacer leyes que incentiven la responsabilidad primaria que tenemos los padres, que son nuestros hijos, nuestras niñas y niños. Probablemente podemos facilitar así que se cumpla con esta obligación.
Resulta también relevante y enriquecedor analizar lo que sucede en nuestro país, en tres entidades ya contamos con estos registros de deudores alimentarios, Chiapas, Coahuila y aquí en el Distrito Federal. Sin embargo, la falta de homogeneidad en la legislación local, hace que este derecho no sea fácilmente exigible en el resto del país.
Con el fin de alcanzar este objetivo, la iniciativa propone en términos gruesos, crear este registro nacional de obligados alimentarios, morosos, con sus siglas Renoam.
Este registro estará a cargo del Sistema Nacional de Protección Integral, en la sociedad contribuirá alertando sobre las operaciones financieras, crediticias, comerciales, corporativas, bursátiles, laborales, en las que pretenda participar un deudor, moroso.
Señalar como requisito la presentación del certificado de no inscripción en el registro, en diversos trámites y procedimientos administrativos, políticos o civiles.
La persona que quiere casarse por lo civil, pero que resulta que está en el listado de deudor alimentario, a lo mejor el cónyuge o el posible cónyuge no lo sabe ni siquiera. Entonces que pueda ser un requisito: Oye, pues estas aquí en este registro, vamos a ver si puedes tomar otro compromiso o no.
Y se pretende que el deudor alimentario cumpla de manera oportuna, eficaz y suficiente con su obligación.
No me extiendo más, vuelvo a repetir como abrí: Infancia es destino. Creo que tenemos que asegurar que el destino de nuestras niñas, niños y adolescentes, pueda ser lo más pleno posible en esta unicidad, en esta pensar que cada niño y niña que nace en este país es único.
Y lo que ellas puedan aportar a la construcción del bien público es tan bien único, y que nosotros estamos simplemente obligados como sociedad mexicana de proteger este derecho, apegarlos y asegurar que su destino pueda ser un destino próspero y de bien.
Muchas gracias.