Senado de la República

La Senadora Luz María Beristain Navarrete, miembro de la Comisión de Cambio Climático del Senado de la República, se encuentra en la COP 19, que se realiza en Varsovia, Polonia, y donde se buscan generar políticas públicas a nivel internacional para mitigar el deterioro ambiental en el planeta.
La Senadora quintanarroense participó en la reunión plenaria desarrollada en el Estadio Nacional de Polonia.
Durante los diálogos efectuados con diversos representantes de las delegaciones internacionales, la Senadora busca impulsar el debate sobre el proceso industrial denominado “fracking” o en español fractura hidráulica, la cual se realiza para la explotación del gas de lutitas o gas de esquisto, mejor conocido por su nombre en inglés “Shale Gas”.
El objetivo de la legisladora del PRD es impulsar el tema coyuntural sobre el medio ambiente ante un escenario de reforma energética en México propuesta por el Gobierno Federal, que no sólo contempla entregar la explotación de las reservas petroleras a empresas extranjeras, ya que aunado a eso se busca concesionar el territorio nacional para explotar las reservas de dicho gas.
Beristain Navarrete busca priorizar el debate ambiental ante la coyuntura de la reforma energética en México.
En entrevista con medios europeos, la Senadora señaló tajantemente que países desarrollados como Francia y Holanda han prohibido el controversial proceso industrial de la fractura hidráulica debido a su alto impacto al medio ambiente.
La Senadora explicó que las investigaciones de las naciones europeas señalan que la fractura hidráulica contamina severamente los mantos freáticos, ya que para extraer el Shale Gas se realiza una explosión a varios kilómetros de profundidad con materiales químicos cancerígenos y dañinos para la salud.
De igual forma, señaló que el proceso industrial de la fractura hidráulica utiliza una cantidad de agua exorbitante de al rededor de 11 y 30 millones de litros de agua sólo para llevar a cabo la extracción del gas.
La Senadora Beristain se dijo preocupada y consternada ante la falta de seguimiento y de debate público sobre el medio ambiente en México ante una posible reforma energética, contraria a los intereses de la nación desde el punto de vista soberano y ambiental.
Finalmente, se dijo comprometida a confrontar la llamada “economía de la extinción” que plantea el Gobierno Federal con su propuesta de reforma energética anti-nacionalista y anti-ambientalista.
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