La coordinadora del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado, Dolores Padierna Luna afirmó que el aniversario del Partido de la Revolución Democrática ocurre en un escenario en que los grandes males del país parecen ajenos a la mayoría de las fuerzas políticas, particularmente las de la derecha, están más ocupadas en conservar posiciones que en atender nuestros graves problemas de inseguridad, pobreza, desigualdad y violencia.
“El México contemporáneo no se puede entender sin las aportaciones del PRD a la vida política nacional. Al igual que el conjunto de los partidos, el partido del sol azteca vive una crisis interna derivada, por un lado, del descrédito general de la política”, agregó.
Padierna Luna consideró que la profunda decepción que los dos sexenios del PAN y el actual gobierno han generado en la población pasa la factura al conjunto de los actores de la vida pública. “En nuestro caso, además, estamos frente a una compleja recomposición de la izquierda, cuyas distintas expresiones llegan divididas a un momento crucial de nuestra historia”.
“Desde sus orígenes en la gesta electoral de 1988, el PRD caminó en la lógica de la unidad de fuerzas con historias y posturas muy diversas. Tras la significativa ruptura que siguió a los comicios de 2012, las izquierdas no hemos podido rehacer la ruta de la unidad, un camino que más temprano que tarde hemos de retomar si queremos derrotar la continuidad neoliberal y evitar la intentona de consolidar un bipartidismo de derecha en nuestro país”, subrayó.
La coordinadora parlamentaria afirmó que “los dirigentes y militantes del PRD nos debemos a nuestra historia y estamos en deuda con los más de 500 de nuestros militantes asesinados en el contexto de una guerra sucia del gobierno. Nos debemos también a los millones de ciudadanos cuyas causas hemos enarbolado en el Congreso y a los millones que nos han dado la confianza de su voto, lo que nos ha permitido gobernar la Ciudad de México desde 1997”.
“La Ciudad de México ha refrendado una y otra vez que su corazón late a la izquierda, y con los gobiernos del PRD se ha convertido en territorio de políticas sociales ejemplares y de avances inéditos en la consolidación de las libertades democráticas”, refirió.
A consideración de la coordinadora del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado, “hoy podemos decir que fallaron los intentos del grupo en el poder presidencial de domesticar a la oposición. Las reformas derivadas del Pacto por México han dado magros resultados en unos casos y sonados fracasos en otros”.
“De cara al 2018, el PRD se juega su propio futuro. Es convicción de muchos militantes que nuestro partido debe recobrar autoridad política y esforzarse por mantener el respaldo ciudadano conseguido en la Ciudad de México y otras regiones del país. Ha de hacerlo, creemos muchos, como una oposición de izquierda, democrática y progresista, claramente diferenciada del bipartidismo de derecha”, advirtió.
La coordinadora parlamentaria recordó que el PRD nació como un instrumento del pueblo. “Lo seguirán siendo porque está en su historia, su vocación y en el compromiso que día a día refrendamos con la gente. ¡Democracia ya, patria para todos!”