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El dictamen para aplazar por un año el apagón analógico a televisoras públicas tiene como propósito fundamental atender una necesidad imperiosa, dado que la fecha fatal establecida en la Constitución es el próximo 31 del mes en curso, aseguró el senador panista Javier Lozano Alarcón.
Argumentó que la propuesta contenida en la iniciativa presentada por el senador Roberto Gil Zuarth es para que este tipo de emisoras públicas y sociales, incluidas las comunitarias y las indígenas, tengan como plazo adicional hasta diciembre de 2016, a efecto de que puedan contar con los recursos para invertir y hacer la migración a la televisión digital.
Al presentar el dictamen, Lozano Alarcón explicó que un segundo componente de la iniciativa se refiere a las estaciones de baja potencia o complementarias, “que no son una concesionaria distinta” sino que forman parte de la infraestructura de la estación principal y de hecho transmiten la misma programación.
En este sentido, puso como ejemplo que en Estados Unidos, donde ya se concretó el apagón analógico, las estaciones de baja potencia siguen en operación por la función social que desempeñan.
En tercer lugar, dijo, se establece que durante el proceso electoral de 2016 se suspenderá la entrega de televisores digitales, codificadores o la sustitución de equipos por parte de los gobiernos, y en caso de violación se considerará como propaganda gubernamental en los términos de la legislación electoral aplicable.
Aclaró que no hay modificación en cuanto a la fecha del apagón analógico y se mantiene la fecha del 31 de diciembre de 2015, particularmente en el caso de las estaciones comerciales.
El legislador por Puebla dejó en claro que en el dictamen no hay una sola palabra que directa o indirectamente modifique en forma alguna las facultades o atribuciones que tiene el Instituto Federal de Telecomunicaciones en materia de regulación, supervisión, vigilancia o sanción respecto de los concesionarios de radio, televisión o de telecomunicaciones.
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