Senado de la República

COORDINACIÓN DE COMUNICACIÓN SOCIAL

El Gobierno debe estar listo para el diálogo o la aplicación de la ley, advierte
La realización de la evaluación educativa constituye un elemento fundamental para el éxito de la reforma en la materia y que con ello se acabe con los vicios, prácticas e inercias que impiden el desarrollo del sistema educativo mexicano, sostuvo el senador Miguel Barbosa Huerta.
Y en algunos estados, por sus antecedentes, actores involucrados y situación educativa, el Gobierno requiere estar listo para impulsar el diálogo o aplicar con firmeza la ley, señaló.
El coordinador del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado de la República aseguró que la evaluación educativa se ha constituido en los últimos tiempos en una herramienta esencial para conocer el estado de la educación, pues aporta información objetiva, útil y relevante para la toma de decisiones en la materia.
Condenó que el sistema educativo en México sea “un sistema con una estructura corporativa, ajena a la transparencia y con orientaciones políticas”.
En ese sentido, Barbosa Huerta afirmó que la Reforma Educativa trata de cambiar esa circunstancia y terminar con los privilegios de algunas agrupaciones de docentes, siempre respetando los derechos laborales sustanciales de las profesoras y profesores.
“Sin evaluación de los profesores, no existe reforma educativa posible”, apuntó.
Por ello, reiteró la necesidad de un diagnóstico preciso del nivel del personal docente para entonces mejorar su capacitación y con ello su trabajo en las escuelas de nivel básico.
El senador poblano destacó que, en algunos estados, llevar a cabo la evaluación educativa es un reto mayúsculo para los institutos locales de educación y la Secretaría de Educación Pública.
“No se trata de una medición de fuerzas o una batalla, sino de la aplicación de la ley y cumplir con la meta de realizar la evaluación correspondiente”, subrayó.
Miguel Barbosa reconoció que si bien la presencia de miles de efectivos de las fuerzas de seguridad para resguardar el proceso de evaluación podría interpretarse como una suerte de esquizofrenia, esto es necesario para cumplir la ley y avanzar en la reforma educativa.
Efectivamente, como lo ha declarado el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, el Gobierno federal debe estar listo para transitar por el camino del diálogo o de la aplicación de la ley.

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