BEBIDAS CON MENOS AZÚCARES, PODRÁN TENER BENEFICIOS FISCALES: MARIO DELGADO
• México, principal consumidor de refresco en el mundo.
• Industria de bebidas saborizadas debe reducir sus elementos dañinos para la salud.
Con el objetivo de establecer estrategias que coadyuven al bienestar de la salud de los mexicanos, el senador Mario Delgado Carrillo presentó una iniciativa que reforma el Artículo 2º de la Ley del Impuesto Especial sobre la Producción y Servicios (IEPE´s) sobre bebidas saborizadas.
“La iniciativa pretende transformar el impuesto vigente a las bebidas azucaradas por uno relacionado directamente con la cantidad añadida de azúcar y edulcorantes nutritivos, con lo que se reducirían los niveles de azúcar que se consumen en México por bebidas saborizadas”, señaló el senador del PRD.
Mario Delgado puntualizó que la idea fundamental de esta propuesta es que la industria de bebidas saborizadas reduzca sus elementos dañinos para la salud mediante la generación de incentivos, “quien decida bajar o reducir azúcares pagará menos impuestos, mientras que quien decida mantener los niveles actuales, soportará una carga impositiva mayor”.
El legislador por el Distrito Federal expresó que esta iniciativa nace ante la preocupación del desarrollo acelerado de diabetes y obesidad entre los mexicanos, pues esta situación está directamente relacionada con que México actualmente sea el principal consumidor de refrescos en el mundo, con una ingesta de 163 litros por persona al año, lo que representa un 40% más que el segundo lugar, Estados Unidos de América.
Delgado Carrillo subrayó que a finales del año 2013 el Gobierno Federal decidió implementar un impuesto sobre las bebidas saborizadas (entre ellas, el refresco), el cual hasta ahora solo ha sido recaudatorio, generando hasta el mes de agosto de 2014 un total de 10 mil 953.3 millones de pesos.
En ese sentido, el senador perredista, apuntó que el Estado debe ser cuidadoso de que este instrumento fiscal no sea temporal y las tendencias de precios no se estabilicen, “porque de lo contrario el efecto deseado desaparece y queda sólo como una medida fiscal”.
El documento presentado al Pleno específica además, que lo recaudado con este nuevo impuesto debe destinarse a los objetivos primordiales; es decir, a la investigación, medicina de calidad y proyectos sociales.
La iniciativa fue turnada a la Cámara de Diputados para su análisis y posterior dictamen.
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