El presidente de la Comisión de Seguridad Pública del Senado, Omar Fayad Meneses, propuso una iniciativa para crear la figura de colaborador de la justicia, debido al abuso por parte de las autoridades del concepto de testigo protegido.
Para ello, dijo, se plantea reformar diversas disposiciones de la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada, de la Protección a Personas que intervienen en el Procedimiento Penal, de la Ley General para Prevenir, Sancionar y Erradicar los Delitos en materia de Trata de Personas, y Protección y Asistencia a las Víctimas del Delito, y del Código Penal Federal.
El objetivo de esta iniciativa, indicó el también legislador por el estado de Hidalgo, es instituir la figura de colaborador para denominar al delincuente o presunto delincuente, que pretenda ayudar a la autoridad en su lucha contra la delincuencia organizada, denunciando o incriminando a otros miembros de su o de otros grupos criminales.
Con base en esta propuesta, turnada a las comisiones unidas de Justicia y Seguridad Pública de la Cámara alta, ya no se podrá llamar más a los delincuentes testigos protegidos, “porque no es la misma figura, simplemente denominémosle colaborador”, destacó.
Además, agregó Fayad Meneses, es necesario establecer en la Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada, el procedimiento para tratar a los miembros de la delincuencia organizada.
De esta forma, al colaborador únicamente se le otorgaría, la reducción de la condena, de conformidad con el artículo 35 de la Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada.
Sin embargo, advirtió el senador priista, hay que incrementar la pena de aquellos que se digan colaboradores y que falseen sus declaraciones para poder obtener un beneficio que establece la ley, o para poder lograr que se incrimine a un inocente.
Al respecto, precisó que los colaboradores deben cubrir ciertos requisitos, a fin de hacerse acreedores al beneficio de la reducción de la condena, como: comprobar la veracidad del hecho, pues no es posible que un inocente entre a la cárcel por la declaración “de un pillo, de un delincuente”.
“No es justo que en una sociedad como la nuestra, que en un sistema de Derecho como este, permitamos tal barbaridad. Si un delincuente acusa a un servidor público de cualquier nivel o a un ciudadano, antes de darle cualquier beneficio o de que sus declaraciones puedan hacer prueba, debe comprobarse la veracidad de lo que el delincuente colaborador aporte”, aseveró Omar Fayad.
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