Número-1201
- México necesita una reivindicación en términos de derechos humanos.
- “Viacrucis Migrante”, peligro de muerte a lo largo de mil 700 kilómetros para llegar a Estados Unidos.
México requiere una política integral migratoria que tenga como principio básico el respeto a los derechos humanos y garantice condiciones mínimas de estabilidad, señaló el senador Armando Ríos Piter, durante el conversatorio y proyección del documental "Viacrucis Migrante".
El senador insistió que el gobierno mexicano requiere congruencia en su política, ya que pide respetar a los connacionales que viven en Estados Unidos y, por otra parte, el trato que se da a los migrantes centroamericanos en la frontera sur está lejos de ser un trato digno.
“Hoy México vive en la necesidad de una reivindicación en términos de derechos humanos”, para acoger a quienes vienen de otros países. Primero, se requiere dar prioridad a las necesidades de los mexicanos, porque el gobierno ha dejado que 12 millones de personas se vayan a construir otra nación, apuntó.
El cineasta Hauke Lorenz consideró que se debe privilegiar el respeto a los derechos humanos de los migrantes sin importar el país de origen, pues si bien encuentran apoyo en los albergues de la zona sur del país, en su paso por México se enfrentan a vejaciones, discriminación y violencia.
Nadia Nehls, acusó que la implementación del Plan Frontera Sur, lejos de proteger a quienes huyen de la violencia en su país, ha hecho que la migración sea más costosa y de mayor riesgo, ya que alerta a agentes migratorios y grupos del crimen organizado de la presencia de migrantes.
El documental “Viacrucis Migrante”, que se proyectó en el marco del Año Dual Alemania-México, expone las dificultades que atraviesan las personas en su paso por México para llegar a Estados Unidos, y los obstáculos a los que se enfrentan al pedir asilo en territorio mexicano.
Es el testimonio de hombres, mujeres, niños y niñas que huyen por la precaria y violenta situación que enfrentan en sus países: El Salvador, Guatemala y Honduras. Inician un arriesgado viaje que implica peligro de muerte a lo largo de mil 700 kilómetros hacia el vecino país del norte.