Número-496
- El objetivo es ampliar el Programa Pensión para el Bienestar en todo el país e impedir acciones contra los beneficiarios, afirma el diputado Fernando Luis Manzanilla Prieto.
El diputado Fernando Luis Manzanilla Prieto solicitó en la Comisión Permanente del Congreso, se exhorte a la Secretaría de Bienestar a que diseñe de manera prioritaria una política de atención integral hacia los adultos mayores de más de 65 años de edad en el país; además de garantizarles el pago del Programa Pensión para el Bienestar y se eviten las duplicidades y cobros indebidos por personas menores que no son beneficiarias.
En su propuesta con punto de acuerdo, el legislador del PES señaló que el objetivo es ampliar los alcances de ese Programa y se beneficie, en su totalidad, a esa población en todo el país, pero evitando conductas fraudulentas en su pago.
Indicó que de acuerdo con reportes del INEGI, hasta 2018 habían 15.4 millones de adultos mayores en el país, de quienes el 12.3 por ciento eran mayores de 60 años.
Reconoció que ese sector de la población es sumamente vulnerable en materia de salud, ingreso y tienen mayores necesidades que cualquier otra persona. Económicamente, se ven afectados por la falta de ingresos, porque en su mayoría no son autosuficientes y muy pocos tienen pensiones que les garanticen una vida digna, apuntó.
Otro problema que padecen, refirió, es el abandono. En el país, el 16 por ciento de ellos sufren de abandono y maltrato. De estos, el 20 por ciento están en soledad tanto por sus familiares como por el gobierno, lo que hace que sean fuertemente dependientes, acotó.
Para ello, también planteó que la Secretaría de Bienestar, en coordinación con el DIF Nacional, elaboren políticas para la atención en establecimientos especializados a adultos mayores en todo el país, con especial atención a aquellos que se encuentren en situación de abandono, desamparo o calle, procurándoles alimentación sana y suficiente.
En coordinación con la Secretaría de Salud, abundó, deberán elaborar mecanismos de atención física, psicológica y emocional, preferentemente ambulatorios y domiciliarios para favorecer el menor traslado físico de la población adulta mayor y puedan acceder a los servicios de salud.
Propuso que con la Secretaría de Educación Pública, a través del Instituto Nacional de Educación para los Adultos, instrumenten contenidos para su difusión en los canales de televisión pública y privada, en horarios que no sean destinados a la difusión de clases a distancia de las y los menores de edad.
De igual manera, planteó que las dependencias mencionadas también promuevan por medios tradicionales como radio y televisión, así como por redes sociales, campañas tendientes a generar cohesión, corresponsabilidad e integración comunitaria en beneficio de las y los adultos mayores, para sensibilizar a la población sobre las medidas que todas y todos podemos llevar a cabo para procurar bienestar a ese sector social.
La propuesta fue remitida a la Cámara de Diputados para su trámite correspondiente.