Senado de la República

Aspirantes a ocupar una posición en el Consejo Consultivo de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, coincidieron en señalar que la educación es la clave para que México logre un mayor respeto a los derechos humanos.
Martha Leticia Delgado López, de la iniciativa privada, comentó que puso en marcha los programas: “El Taller” y “El Sacapuntas”, que da trabajo a unas 300 personas de cuatro grupos vulnerables: personas de la tercera edad; con discapacidad; niños de calle y madres solteras.
Subrayó que la educación es la clave para lograr un mayor respeto a los derechos humanos y esto se puede lograr, dijo, a través de una intensa campaña en las escuelas preparatorias.
En su momento, Rafael López Castañares, ex secretario general de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior en México (ANUIES), resaltó que junto con el IPN se creó el observatorio: “Zona libre de violencia”, en instituciones de educación superior y la cual puede ser aplicable en todos los niveles educativos del país.
El académico enfatizó que la educación es la clave de todo e indicó que en materia de derechos humanos se debe trabajar desde el nivel primaria, pues dijo que si no somos capaces de inducir a los alumnos desde una temprana edad en este tema, “estamos teniendo problemas”, porque no sabemos, desde esa edad, qué derechos tenemos, cuándo no trasgredo el derecho de los demás”.
Mientras que Alberto Acosta Treviño, ex diplomático mexicano en retiro, sostuvo que su aspiración a formar parte del Consejo Consultivo se basa en su experiencia en tratamiento a víctimas en la OEA.
Al referirse a los derechos de los migrantes, dijo que en México se tuvo una apertura en el tema de los derechos humanos que trajo obligaciones en el ámbito internacional, pero “creo que honestamente no hemos sabido cumplir”. Se requiere, dijo, abrir las puertas para ser examinados.
Enfatizó, además, que existen caminos que no se deben de seguir como es el caso de la permisión de grupos armados de autodefensa, toda vez que posteriormente se convierten en los peores narcotraficantes y asesinos como sucedió en Colombia.
En su turno, Federico Manuel Fleischmann Loredo manifestó que es una de las casi 6 millones de personas con discapacidad que en el país enfrentan día a día múltiples barreras tanto físicas, como sociales y culturales que limitan e impiden la plena inclusión a los entornos educativos, laboral y social entre muchos otros.
Afirmó que es muy lamentable que a pesar de que México ha suscrito tratados internacionales como la Convención de los Derechos de las Personas con Discapacidad “seamos todavía motivo de discriminación”.
Por ello, explicó que para poner fin a esa injusticia social es necesario que los gobiernos en todos sus niveles presten más atención a las personas con discapacidad incluyéndolos en sus planes de gobierno y asignando a dichos planes los recursos necesarios, con el fin de que sean ejecutados de manera efectiva y oportuna y se promulguen leyes modernas y acordes con los preceptos de esa convención.
Por su parte, Teresa Columba Ulloa Ziáurriz aseguró contar con la experiencia académica necesaria pero, sobre todo, con una larga experiencia luchando por los derechos de las víctimas contra la violencia y la discriminación de género.
Asimismo, destacó que ha acompañado a más de 25 mil víctimas en el “tortuoso” camino de perseguir la justicia en el país.
Subrayó que es prioritario difundir las sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y demás recomendaciones que los cuerpos de control convencional han hecho al Estado mexicano en programas permanentes de capacitación y sensibilización, ya que hoy forman parte de la jurisprudencia en la nación, la tercera fuente del derecho a partir de la reforma al Primero Constitucional del 2011.
Aseveró que resulta indispensable impulsar campañas para la promoción de los derechos humanos de las mujeres y las niñas y en contra de la discriminación y la violencia de género, pero también sobre la igualdad sustantiva entre mujeres y hombres.
Se pronunció por sistematizar tanto las quejas como las recomendaciones emitidas y recibidas por los órganos de control convencional de los tratados y también de la propia Corte Interamericana produciendo estadísticas referenciadas que puedan dar una idea de dónde se están violando los derechos humanos.
En su oportunidad, el ex magistrado de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo Ortiz Mayagoitia, se comprometió, en caso de ser designado por la Comisión de Derechos Humanos para ocupar un cargo en el Consejo Consultivo, a ejercerlo con entrega y entusiasmo, de buena fe y con miras a contribuir el mayor engrandecimiento de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
Precisó que la pretensión de integrar el cuerpo colegiado no da lugar a presentar un programa personal de trabajo sino solamente de solidaridad y servicio en la función.
Dijo que se requiere de grandes esfuerzos para lograr que en México los derechos humanos sea una actividad cotidiana, que haya presupuesto y muchas personas capacitadas para lograr su efectividad de justicia distributiva.
“Empeño mi palabra en que haré todo lo que esté de mi parte para contribuir a este noble propósito, en caso de ser electo”, enfatizó.
En tanto, el ex diputado federal  y senador de la República, Fauzi Hamdan Amad, señaló que de llegar a ser miembro del Consejo Consultivo, promovería la difusión de los derechos y de los deberes humanos, ya que todos hablan de derechos y nadie de las obligaciones transversales o vinculadas con un derecho para protegerlo y salvaguardarlo.
Consideró que el Ombudsman debe ampliar el ámbito de fiscalización y observación de la administración pública; ésta aplica 100 leyes federales administrativas de todos los ámbitos, por lo que, ahora que empieza un nuevo gobierno, es oportunidad para ampliar el número de visitadurías para vigilar el cumplimento y ejecución de los derechos económicos, sociales, culturales y libertades.
Asimismo, Hamdan Amad destacó que sería bueno regular las marchas y dejar abierta la posibilidad de tránsito y del desarrollo de las actividades comerciales.
Por lo que se refiere a la transversalidad apuntó, a manera de ejemplo, el caso de la educación, en la que el deber del profesor es de ser un guía que ofrece bases, mientras que el educando es el obligado a estudiar.
Por su parte, José Antonio Barón Aguilar indicó que coadyuvar en el ámbito de las atribuciones, ante la alarmante vulneración de los derechos humanos, es lo que le motiva a ser parte del Consejo.
De ser electo, precisó que buscará analizar los ordenamientos legales que rigen a la Comisión, dar mayor claridad a la actuación de los funcionarios públicos y mayor prioridad a la normatividad, así como una difusión más amplia de los lineamientos de la Comisión.
Barón Aguilar comentó que muchos ciudadanos violentan los derechos humanos de sus semejantes, principalmente por la falta de conocimiento de los mismos, por lo que es importante que asuman su responsabilidad y los respeten.
Finalmente, Brenda Patricia González Alejandro puntualizó que es urgente atender con grandes expectativas aspectos, realidades y controversias para que cualquier persona tenga los medios necesarios para desarrollarse plenamente y para cumplir con sus deberes y derechos como ciudadano digno en un país, pluri, inter y multicultural.
Asimismo, recalcó su interés por trabajar en conjunto con personas altamente calificadas y distinguidas en materia del análisis y propuestas dentro del marco jurídico, social, cultural y educativo en derechos humanos, ya que es un eje transversal que compete a todo individuo que tenga el interés de promover, ofrecer y ejercer una formación al receptor de forma clara, ordenada y progresiva, descartando toda posible ambigüedad e imprecisión en esta área para su ejercicio.
Estuvieron presentes en estas comparecencias la senadoras panistas Mariana Gómez del Campo y Adriana Dávila Fernández; del PRD, Angélica de la Peña y las priistas Lucero Saldaña, Diva Hadamira Gastélum Bajo y Arely Gómez González, Verónica Martínez Espinosa, quienes realizaron preguntas acerca del trabajo que han desarrollado los aspirantes y del porqué quieren ser considerados para una de las tres consejerías vacantes.
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