En México la palma de coco y sus derivados generan recursos por 588.64 millones de pesos, agregándose a ello que de su producción dependen 60 mil familias y 400 mil personas que laboran en el sector agro industrial; pese a ello, no existen apoyos para este sector.
Por ello, el Senado exhortó al titular de la Comisión Nacional Forestal (Conafor) a incluir la palma de coco en el listado de especies sujetas de apoyos en el Programa Proárbol, así como la elaboración de un programa de repoblamiento de cocoteros.
Lo anterior a propuesta de los senadores Mely Romero Celis, Manuel Humberto Cota Jiménez y Gerardo Sánchez García, quienes destacaron que el cocotero es llamado “fruta de la vida” por sus múltiples bondades en beneficio para la salud.
Apuntaron que en América Latina y el Caribe la producción de de esta especie contribuye con 10 por ciento de la producción mundial, colocándose México y Brasil como los países productores más destacados.
Empero, advirtieron, en México la mayor superficie cultivada con cocoteros se ubica en áreas marginadas de los suelos costeros, no obstante que son considerados como un cultivo de gran importancia económica y prominentemente social en el área rural.
Los legisladores precisaron que el valor de la producción del coco y sus derivados va en aumento, pues en 2000 representaba 588.64 millones de pesos, en tanto que en 2010 alcanzó los 1,294.1 millones, es decir registró un aumento de 220 por ciento y esto pone en evidencia la rentabilidad de esta cadena productiva.
Los estados que mayor participan en la generación de estos ingresos son Guerrero, Colima Michoacán, Oaxaca y Jalisco.
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