Las reformas al sistema financiero deben privilegiar la estabilidad económica para México y garantizar que no existan áreas de concentración de dinero ni espacios para la especulación, ya que de otra manera el país no podrá tener crecimiento, señaló la especialista estadounidense, Nomi Prins.
Durante la conferencia magistral “Banks too big to fail means too big to exits” (Si los bancos son demasiado grandes para caer, tal vez sean demasiado complejos para existir), indicó que no sólo México, sino el mundo, requiere de una reforma bancaria que separe depósitos y préstamos, “estos activos tóxicos de esta especulación y que los bancos no estén vendiendo deuda mala”.
Mencionó que la economía mexicana ha empezado a declinar, a caer, ya que la economía de Estados Unidos “está filtrando la debilidad” y dicha situación es aprovechada por los especuladores para venir a comprar las cosas más baratas a México.
“Los especuladores llegan y les importa un bledo cuál hay sido el caos, porque ellos lo único que ven es la oportunidad que este caos les crea”, indicó.
“Estamos en una situación donde la oportunidad es de los especuladores y esto es una situación de deterioro, porque los bancos siguen tan grades, tan complejos, tan riesgosos, tan amenazantes como siempre lo fueron. Consideren esto ustedes cuando debatan las reformas”, sugirió.
Al respecto, la senadora Dolores Padierna Luna, vicecoodinadora del grupo parlamentario del PRD, habló sobre el paquete de reformas al sistema financiero que propuso el gobierno de la República y aseguró que México cuenta con una de las economías mas desreguladas del mundo, lo cual ha sido factor para el bajo crecimiento del país.
Dijo que en las últimas dos décadas, la economía mexicana ha crecido a estándares del 2 por ciento anual. Explicó que desregulación significa concentración bancaria, oligopolios, especulación a través de la banca, filiales no reguladas, que si fracasan, las perdidas las tiene que pagar el pueblo de México.
Padierna Luna dijo que la banca mexicana esta extranjerizada y comentó que en la propuesta de reforma del gobierno federal no existen disposiciones para un cambio de fondo.
“Hoy son revividos, en parte, para rescatar los créditos de las grande empresas, hoy se revive el Banco Puente que entonces le llamábamos Badbank, el banco que compra la cartera chatarra, los créditos tóxicos”, apuntó la legisladora.
Rescatar a los bancos significaría que contribuyentes mexicanos estarían financiando las matrices de las potencias económicas, señaló.
Por su parte, el senador Miguel Barbosa Huerta, presidente del Instituto Belisario Domínguez, dijo que es responsabilidad del Estado mantener un sistema financiero a pesar de subsidiar a los grandes bancos sin ver los efectos que esto causa en la sociedad.
Indicó que la propuesta del gobierno en esta materia comprende 13 iniciativas que corresponden reformas a 33 ordenamientos legales que tienen que ver con una reforma muy técnica, “y que en la izquierda consideramos no es suficiente”.
“Se ha dicho que los propósitos serán contar con un sistema bancario que pueda facilitar el acceso al crédito, sin embargo se dejan de lado asuntos pendientes para el sistema financiero y bancario”, apuntó Barbosa Huerta.
Señaló que el Senado de la República tendrá que abrir la discusión del tema una vez que ésta reforma sea dictaminada en la Cámara de Diputados.
“Ya hemos desplegado un conjunto de mesas de trabajo con el gobierno federal para avanzar en el debate de estos asuntos”, subrayó.
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