La senadora María del Pilar Ortega Martínez subrayó que a fin de reafirmar el derecho de las mujeres mexicanas a la salud en las distintas etapas de la vida, la Comisión Permanente solicitó al Gobierno de Tlaxcala un informe de la situación del servicio de hospitalización y la especialidad de gineco-obstetricia en el Hospital ubicado en el municipio de Santa Ana Chiautempan, Tlaxcala.
La legisladora panista señaló que en 2010 fue inaugurado el Hospital de la Mujer en la comunidad de San Matías Tepetomatitlán, municipio de San Pablo Apetatitlán, Tlaxcala, construido con recursos del Gobierno Federal.
Sin embargo, detalló que no inició sus funciones y el Gobierno del estado no asignó recursos para su equipamiento y operación. Por tal situación, en febrero de 2011, la Secretaría de Salud estatal tomó la decisión de fusionarlo con el Hospital de Gineco-obstetricia de Santa Ana Chiautempan, argumentando que se optimizarían los recursos humanos, de equipo y materiales.
Adicionalmente, apuntó que en agosto de 2011, por decisión de la dependencia estatal, el Hospital de Gineco-Obstetricia dejó de prestar sus servicios de manera definitiva.
Ante estos hechos, la senadora Ortega Martínez consideró indispensable que el Hospital de Gineco-obstetricia en el municipio de Santa Ana Chiautempan cuente con los recursos necesarios para su adecuado funcionamiento.
Entre otras cosas, dijo, que se le dote de infraestructura, equipamiento y personal para brindar a la población los servicios de salud adecuados y así atender las necesidades específicas de la zona, ya que para la población de Santa Ana, disponer de servicios de salud en esa especialidad, significa desplazarse al Hospital de la Mujer y disponer de una carga económica más elevada.
En este contexto, la legisladora destacó que de acuerdo con los últimos datos del censo de población Santa Ana Chiautempan cuenta con 66 mil 149 habitantes, con una paridad de 97 hombres por cada 100 mujeres.
Por otra parte, resaltó que la tasa de mortalidad entre las mujeres de entre 15 y 19 años, es de dos fallecimientos por cada 100 hijos nacidos vivos, mientras que en las mujeres de entre 45 y 49 años, el porcentaje es de seis por cada 100 nacidos.
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