Senado de la República

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Mayores tasas de crecimiento de la producción y el empleo, abatir la pobreza y mejorar la distribución del ingreso son los objetivos globales de desarrollo económico del país que el Banco de México debe alcanzar, afirmó el maestro Javier Eduardo Guzmán Calafell, al comparecer ante la Comisión de Hacienda y Crédito Público como candidato a miembro de la Junta de Gobierno del Banco de México (BM).
Recordó, además, que el mandato constitucional establece que el Banco de México será autónomo en el ejercicio de sus funciones y su objetivo prioritario será procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional, es decir, combatir la inflación.
Guzmán Calafell apuntó que el Banco de México debe seguir esforzándose en buscar los mecanismos para contribuir a la estabilidad financiera; sin embargo, aclaró que el mantenimiento de la estabilidad de precios y la financiera requiere del concurso coordinado de otras políticas, especialmente la fiscal, así como del apoyo de la sociedad.
Durante la sesión de preguntas y respuestas, el senador priista David Penchyna Grub pidió al funcionario su opinión acerca de la ampliación del mandato al Banco de México.
En el tema de la banca de desarrollo, cuestionó si es correcto que FIRA siga en el Banco de México, de acuerdo a su mandato, pues debe es una institución que no acaba de generar los beneficios que los mexicanos necesitan en materia del campo, que además de ser un tema de soberanía alimentaria tiene que ver con el empleo.
Al responder, Guzmán Calafell, aseguró que desde su punto de vista la duda no es si el Banco de México debe contribuir al crecimiento económico, porque el objetivo final es ese. La mejor contribución que puede hacer el banco central al crecimiento y desarrollo económico es combatir la inflación; el interés es tener su principal instrumento de política en los niveles más bajos posibles congruentes con el objetivo inflacionario.
Respecto a la banca de desarrollo dijo que las autoridades mexicanas deben seguir explorando las aéreas en donde deba participar de manera activa complementando el papel de intermediarios financieros primarios, donde hay oportunidades importantes en el apoyo a Pymes, campo y redes de proveedores.
Asimismo, dijo que lo importante es evaluar qué se debe hacer para que FIRA tenga un mejor servicio a la sociedad, independientemente donde su ubique administrativamente.
En su turno, la senadora perredista Dolores Padierna Luna manifestó que se debe priorizar y poner como objetivo que el Banco coadyuve con las facultades que tiene y con los recursos que maneja, el apoyo que pudiera dar al desarrollo económico del país.
Expuso que uno de los temas principales es la deuda subnacional -de estados y municipios- que creció sustancialmente en los últimos siete años, que actualmente es de 406 mil millones de pesos, de los cuales 334 mil corresponden a la deuda contratada con la banca, por lo que cuestionó si el BM puede controlar el sistema financiero –en parte- por qué las calificadoras de riesgo no advirtieron de los riesgos.
Asimismo, preguntó sobre el riesgo de que México siga apoyando con recursos el rescate financiero internacional de Estados Unidos, pues en ese caso propondría apuntalar con reservas internacionales a los municipios.
El funcionario precisó que la disminución de la inflación y, en general, la estabilidad macroeconómica es una condición necesaria para el crecimiento económico, pero no condición suficiente, una tasa de inflación baja no asegura un crecimiento económico elevado.
En el caso de México, dijo, la parte de estabilidad macroeconómica se tiene desde hace algunos años, que se va a requerir para lograr una tasa de crecimiento alto, pero se necesitan otra serie de acciones.
En el tema de la deuda subnacional consideró que no tiene una implicación sistémica, es alrededor de 3.5 puntos del PIB, “relativamente pequeña ahora”, sí puede generar problemas porque ha sido acelerado su crecimiento en poco tiempo y por otro lado las instituciones bancarias pequeñas están muy expuestas a dicha deuda.
En las propuestas del Congreso se debe exigir un proceso de transparencia de la situación real de las finanzas y sentar bases para el otorgamiento de crédito para los estados y municipios.
En el caso de los flujos de capital que llegan al país, destacó que es una oportunidad y un reto que no se puede enfrentar con un solo instrumento sino con varios, sobre todo desalentar flujos de inversión de corto plazo, pero asegurar que las oportunidades que dan se aprovechen adecuadamente
Finalmente, en lo que se refiere al Fondo Monetario Internacional, subrayó que Estados Unidos no es usuario de recursos del fondo, pero México sí a través de una línea de crédito contingente que permite el acceso a 73 mil millones de dólares, por lo que cualquier contribución apoya más a la economía mexicana.
En tanto, el senador Francisco Domínguez Servién, de Acción Nacional, expresó su apoyo a la propuesta del vicecoordinador del Banco de México y festejó que la inflación no es únicamente del Banco de México sino del desarrollo del país y del Ejecutivo federal, es decir, que el Gobierno Federal que antecede al actual dejó reservas históricas para tener más de 160 mil millones de dólares en reservas internacionales. Al mismo tiempo le solicitó autonomía al funcionario.
Guzmán Calafell aseguró que de ser ratificado, defenderá la autonomía del Banco de México, porque es un pilar fundamental de la política económica del país.
En su exposición, el senador priista Gerardo Sánchez García también brindó su apoyo a Guzmán Calafell y lo cuestionó sobre la recurrencia de la cartera vencida en la banca de desarrollo.
Dijo que probablemente se debe unificar a instituciones dispersas como FIRA, BANSEFI, FONAES, entre otras, para corregir la banca. La pregunta es cómo mandar instrumentos que permitan resolver ese problema.
Respecto a la banca de desarrollo dijo que tiene conocimiento que se discuten iniciativas para fortalecer el apoyo al campo, de Bancomext y el apoyo a empresas medianas y pequeñas, porque su papel es complementario a los intermediarios financieros privados.
En el tema de las pensiones, señaló que aunque no es competencia estricta del banco central, se tiene que resolver porque puede generar un problema de finanzas públicas más adelante, por lo que las autoridades fiscales deben estar pendientes de la evolución de los pasivos generados y analizar opciones para atacarlo.
Por su parte, el senador del PAN Carlos Mendoza Davis afirmó que el reto de México es crecer con estabilidad. Se requiere, dijo, seguir con una manejo sano de las finanzas públicas y prudencia; sin embargo, recordó que en 2011 el  Banco de México decidió utilizar 107 mil 507 millones de pesos  para reconstituir la reserva de revaluación de activos en vez de entregar el remanente de operación a la Secretaría de Hacienda, “¿reconoce usted que la decisión del Banco de México respecto de no haber entregado los remanentes a la Secretaría de Hacienda fue correcta o no?”.
En respuesta, el funcionario dijo que el Banco de México tiene la obligación de preservar su capital en cierto nivel, desde ese punto de vista, eso permite no hacer entrega a la SHyCP de ese tipo de recursos. El Banco actuó de manera legal.
El senador del PRD, Armando Ríos Píter aseguró que el Banco de México “debe tener un nuevo momento”, por lo que cuestionó al candidato  a miembro de la Junta de Gobierno del Banco de México, sobre tres aspectos: su visión sobre el actuar del Banco de México, el incremento sustantivo de los insumos básicos, en especial los alimentos y el costo de los créditos de la banca comercial y de desarrollo,  “que siguen siendo muy caros”.
El maestro Guzmán Calafell afirmó  que lo mejor que puede hacer el Banco de México es contribuir al combate de la inflación, además, recordó que en épocas recientes se han utilizado medidas contracíclicas, para reducir las tasas de interés de una manera agresiva, lo que se logró gracias a su credibilidad. “El objetivo, recalcó, es la inflación, pero se toman en cuenta una serie de variables, entre ellas y  de manera muy importante, el crecimiento económico del país”.
Con respecto al incremento de los alimentos básicos, Guzmán Calafell compartió su preocupación y explicó que por el tipo de consumo que tiene nuestra población, los alimentos tienen un peso mayor dentro de las canastas de índices de precios que las economías avanzadas y, por ende, el efecto es mucho mayor.
Participó también la senadora Blanca Alcalá del PRI, quien lo cuestionó sobre los criterios para determinar el tamaño de la reserva del Banco de México “en un país con condiciones enormes de desigualdad”, a lo que Guzmán Calafell explicó que el tema es complejo y varía con el tiempo.
“Las lecciones de las crisis no se han atendido totalmente, estamos en un proceso  que va a llevar algunos años en el que verdaderamente podamos evaluar a ciencia cierta qué cosa es lo que tenemos que hacer como resultado de estas lecciones”,  por lo que un banco central debe optar “por la mayor prudencia posible en un contexto de circunstancias desconocidas”, dijo.
Luis Armando Melgar Bravo, del Partido Verde, hizo referencia a las advertencias del gobernador Carstens sobre la fragilidad que puede haber en nuestra macroeconomía, ya que hay ciertos focos rojos que hay que tomar en cuenta y solicitó al compareciente explicar este mensaje del Banco de México y pidió, además, profundizar sobre las calificadoras.
En respuesta, Guzmán Calafell recordó que el mensaje fue realizado en Singapur en donde advirtió de la posibilidad de que se estuviera formando una “tormenta perfecta” por los ingresos de capitales y mencionó riesgos como la creación de burbujas, entre otros problemas; sin embargo, se manifestó convencido de que estas condiciones no se cumplen en el caso de México, se refería, dijo, a algunas economías asiáticas.
Por lo que se refiere a las calificadoras, afirmó que su desempeño no fue el mejor durante la crisis en Estados Unidos, “los fundamentos con los que hicieron la evaluación de algunos instrumentos financieros tuvieron una serie de fallas”. Lo más importante, expresó, es que los incentivos para las calificadoras estén perfectamente bien alineados, de tal forma que su evaluación sea totalmente objetiva.
Guzmán Calafell es licenciado en Economía por la Universidad Nacional Autónomo de México, realizó estudios de posgrado en economía tanto en Europa, como en Estados Unidos. Ingresó al Banco de México en 1980, en donde ha ocupado distintos cargos a lo largo de 30 años; el último fue el de Director de Asuntos Internacionales.  Actualmente se desempeña como Director General del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos, la organización de los bancos centrales de América Latina y el Caribe.
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