Numéro-241
- El mundo de la ciencia ha perdido a un gran científico y a uno de los mexicanos más valiosos de nuestro tiempo: Eduardo Ramírez
El Senado de la República se sumó a las numerosas condolencias expresadas por diversos sectores de la vida académica, científica, cultural y política de México, así como del ámbito internacional por el deceso del ingeniero químico Mario Molina.
Al finalizar la sesión de este miércoles, el presidente de la Mesa Directiva, Eduardo Ramírez, expresó: “el mundo de la ciencia ha perdido a un gran científico y México perdió a su Premio Nobel de Química y a uno de los mexicanos más valiosos de nuestro tiempo”.
El doctor Mario Molina, enfatizó, dedicó su vida para que el conocimiento contribuyera a mejorar el medio ambiente y los recursos naturales del planeta y de nuestro país.
“Su entrega y contribución dejan una huella imborrable y un legado para las futuras generaciones. Su vida y pasión por el conocimiento, así como el servicio a la sociedad serán inspiradoras para la juventud mexicana”, acotó.
Hace unos momentos esta asamblea guardó un minuto de silencio por el lamentable deceso de destacado científico mexicano Mario Molina, quien fue merecedor del Premio Nobel de Química en 1995 y puso en alto el nombre de México, subrayó Eduardo Ramírez.
El doctor, apuntó, fue un pionero y uno de los principales investigadores a nivel mundial de la química atmosférica. Sus estudios sobre la capa de ozono llevaron a la creación del Protocolo de Montreal de las Naciones Unidas, uno de los primeros tratados internacionales para detener el adelgazamiento de dicha capa y sus efectos sobre la atmósfera de la tierra, añadió.
Las senadoras y senadores de la República nos unimos a la pena que embarga a la familia del doctor Mario Molina y les deseamos a ellos, así como a sus amigos pronta resignación. ¡Descanse en paz el insigne mexicano Mario Molina!, concluyó el presidente del Senado.