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El Senado de la República pidió a la Secretaría de Relaciones Exteriores y a los consulados correspondientes, que apoyen a los jóvenes y estudiantes mexicanos indocumentados que residen en Estados Unidos, a fin de que puedan acceder a los beneficios del Programa de Acción Diferida.
Asimismo, solicitó al Ejecutivo federal que realice las gestiones pertinentes para exentarlos del pago de la matrícula consular y del desembolso de 465 dólares que representa por concepto de solicitud de dicho programa.
El pasado 15 de junio el presidente Barack Obama anunció el Programa de Acción Diferida para jóvenes y estudiantes indocumentados que crecieron en Estados Unidos, el cual los protege contra la deportación y les otorgar permisos para estudiar y trabajar legalmente.
Esa medida suspende temporalmente las deportaciones de los jóvenes que pasaron su infancia en aquella nación.
Al respecto, la senadora panista Gabriela Cuevas Barrón dijo que es probable que algunos inmigrantes con esta posibilidad de trámite no lo soliciten por falta de información veraz y oportuna, ante lo cual los consulados tendrán que reforzar sus mecanismos de comunicación y orientación sobre el procedimiento para acceder a los beneficios de ese programa.
Consideró necesario que el gobierno federal implemente esas medidas de apoyo en beneficio de los jóvenes mexicanos que residen en EU, pues de llevarse a acabo significarían un avance en la política migratoria para impulsar un proceso de legalización de nuestros connacionales.
También del PAN, el senador Daniel Gabriel Ávila Ruiz mencionó que la mayoría de los favorecidos por ese programa son de origen mexicano, que podrán realizar estudios universitarios, e incluso ser enlistados en el ejército.
En su turno, la senadora priista María del Rocío Pineda Gochi manifestó que “debemos ser muy claros que una acción diferida es una concesión discrecional de alivio emitida por el Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos”.
Ello, precisó, no garantizará la residencia legal y permanente de los migrantes, y debido a que ese permiso se les podrá revocar en cualquier momento, es conveniente que los consulados informen de manera oportuna los alcances de ese programa.
A su vez, el senador Benjamín Robles Montoya reconoció que Acción Diferida beneficiará aproximadamente a un millón 700 mil jóvenes indocumentados de diversas nacionalidades, quienes tendrán que cumplir varios requisitos como tener menos de 31 años de edad, haber llegado a Estados Unidos antes de los 16 y tener por lo menos 5 años residiendo en ese país.
El legislador perredista expresó que esa medida permitirá a los jóvenes inmigrantes tener una mejor calidad de vida, por lo que ahora le toca al gobierno mexicano hacer parte de esa tarea e implementar una campaña informativa sobre los requisitos para acceder a esa oportunidad.
Por último, el senador Carlos Alberto Puentes Salas, del PVEM, comentó que hasta el momento más de 4 mil 600 jóvenes se han beneficiado con el Programa Acción Diferida, no obstante la carencia de información sobre el procedimiento.
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