Número-1371
- El propósito, lograr una planeación democrática que legitime políticas públicas y acciones de gobierno.
- Presentan en el Senado, el libro “Habitar la centralidad urbana (II)”
El Senado de la República y la Cámara de Diputados diseñarán una legislación que permita avanzar hacia un nuevo modelo de desarrollo urbano, que garantice la seguridad de los habitantes de las ciudades, anunció el senador Daniel Ávila Ruiz, secretario del Instituto Belisario Domínguez (IBD).
Al presentar el libro “Habitar la centralidad urbana (II): Prácticas y representaciones sociales frente a las transformaciones de la ciudad central”, apuntó que esto permitirá al Congreso de la Unión emprender las reformas legislativas útiles para cumplir la Nueva Agenda Urbana acordada por la Organización de las Nacionales Unidas (ONU), durante la conferencia Hábitat III, que se llevó a cabo en octubre de 2016, en Quito, Ecuador.
El objetivo, apuntó, es impulsar políticas y estrategias que permitan alcanzar un desarrollo urbano sostenible, revertir la expansión territorial de las ciudades y la subutilización de la infraestructura urbana.
Ello, agregó, implica promover la densificación urbana; el uso mixto del suelo frente a la zonificación; la preservación del paisaje y los recursos naturales, y la consecución de espacios públicos para todos.
El legislador del Grupo Parlamentario del PAN sostuvo que el libro no trata únicamente problemas de una ciudad en específico; por el contrario, da la pauta para emprender una estrategia de desarrollo urbano en todo el país.
El coautor del libro, René Coulomb, recalcó que el objetivo es mantener la gobernabilidad de las ciudades, lo que implica tener como prioridad crear nuevos espacios de planeación democrática, que concedan la legitimización social de las políticas públicas, así como de las decisiones y acciones de gobierno.
“Se deben crear nuevos espacios de gestión democrática de la ciudad, para que la renovación urbana tome en cuenta el reclamo democrático de amplios sectores de la sociedad”, subrayó.
Priscilla Conally, investigadora de la Universidad Autónoma de México (UAM), refirió que existen retos a enfrentar, como la tensión que genera emprender un rediseño que permita dar permanencia a la función habitacional de colonias y barrios, junto con usos de suelo mixtos.
La función de centralidad, apuntó, tiene una significativa función económica como generadora del empleo que se agrega a su riqueza patrimonial. Esto, “le otorga una dimensión eminentemente estratégica para el futuro desarrollo de la aglomeración metropolitana, y explica el amplio desafío para las políticas públicas sectoriales; planeación territorial; gestión urbana y la gobernabilidad democrática”, acotó.
Emilio Pradilla, catedrático de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), apuntó que un gran reto es incluir en el nuevo modelo urbano al 60 por ciento de la población que vive en situación de pobreza o miseria, dentro un sistema inmobiliario desarrollado por empresas, nacionales y extranjeras, que actúan dentro de la lógica de la ganancia y precios diferenciales.
A ello, dijo, se agrega que, dentro de la nueva legislación, se debe considerar el derecho a una “ciudad distinta”, dentro de la cual se aborden tres temas sustantivos: la equidad en la distribución de costos y beneficios, hoy inexistente; la participación ciudadana democrática verdadera, real y efectiva, y el derecho a la centralidad.
En el evento participaron, también las coordinadoras del libro María Teresa Esquivel Hernández y Gabriela Ponce Sernicharo, así como el coordinador ejecutivo de Investigación del IBD, Gerardo Esquivel.