Número-1346
- Obligará a las autoridades competentes que cualquier agravio o asesinato sea investigado hasta las últimas consecuencias.
El senador Marco Antonio Blásquez Salinas, presidente de la Comisión Especial para dar Seguimiento a las Agresiones Contra Periodistas y Medios de Comunicación, presentó una iniciativa, cuyo objetivo es el que se agote toda línea de investigación en los casos de agresiones derivadas de su labor informativa.
Esto, con el propósito de identificar a personas y grupos criminales que pudieran tener interés en perpetrar alguna agresión, así como sus probables vínculos con servidores públicos.
En conferencia de prensa y, posteriormente, ante el Pleno del Senado, el senador explicó que la iniciativa, turnada a las comisiones de Justicia y Estudios Legislativos, busca que cualquier agravio o asesinato a periodistas sea investigado hasta las últimas consecuencias, siempre observando la línea del desempeño profesional del comunicador.
Detalló que la iniciativa propone modificar dos párrafos en la parte final del artículo 21 del Código Nacional de Procedimientos Penales, que menciona que en los delitos a que se refiere este artículo se agotarán las líneas de investigación.
Asimismo, señala que corresponde al titular de la institución de procuración de justicia disponer lo necesario y cuidar que la investigación se realice; e indica que el incumplimiento de esta obligación será causa de remoción del Procurador de Justicia o Fiscal General.
Blásquez Salinas, también presentó una segunda excitativa para que se modifique la fracción VI del Apartado A del artículo 102 Constitucional y se cree una Fiscalía Autónoma que investigue los delitos en contra de los periodistas y activistas de Derechos Humanos.
El legislador expuso que, de 2003 a la fecha, se registran 23 periodistas desaparecidos en México y estas desapariciones tuvieron lugar, dijo, en Tamaulipas, Veracruz y Michoacán.
En su momento, el senador del Grupo Parlamentario del PRD, Zoé Robledo Aburto, presidente de la Comisión de Radio y Televisión y Cinematografía, subrayó que no se debe pensar que la comisión que preside, sólo regula a los concesionarios públicos y privados, sino que también debe de estar en el interés de la comisión que encabeza el velar por los periodistas.
Alertó que, de acuerdo a la Fiscalía para la Atención de Delitos Cometidos Contra la Libertad de Expresión, de junio de 2010 al 31 de diciembre de 2016, se registraron 798 denuncias por agresiones a periodistas, de las cuales 47 fueron asesinatos.
Señaló que, de estos asuntos, la Fiscalía tiene sólo tres sentencias condenatorias, una del 2012 y, las otras dos, en el 2016; es decir, 99.7 por ciento de las agresiones contra periodistas en México no han recibido sentencia.
Expuso que de los 798 casos, la Fiscalía informó que en 107 casos, el agresor fue consignado ante un juez; es decir, uno de cada diez y el resto han quedado impunes.
Ante los recientes casos, como el de la periodista de Chihuahua, Miroslava Breach Velducea, el Senado debe ser muy contundente, pues en México hay libertad de expresión, pero lo que no hay, es “libertad después de la expresión”, concluyó.
