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El senador Tomás Torres Mercado, del PVEM, presentó una iniciativa para que los productores rurales que reciban subsidios o apoyos directos, a través de programas de apoyo agropecuario, demuestren que desarrollan acciones para garantizar la preservación del ambiente, conservación de suelos y la recarga de los acuíferos.
Al presentar su propuesta, que reforma las leyes de Aguas Nacionales y de Desarrollo Rural Sustentable, explicó que dichas acciones consistirán en la siembra de especies forestales o el establecimiento de reservas de flora y fauna nativa por volumen de agua concesionada.
De igual forma, indicó que en el título de concesión o asignación para la explotación, uso o aprovechamiento de aguas nacionales, se establecerán las acciones específicas que desarrollará cada concesionario para garantizar la preservación del medio ambiente.
Para ello, aclaró, las secretarías de Agricultura y de Medio Ambiente y Recursos Naturales definirán los tipos, ciclos y áreas geográficas en que deberán sembrarse las especies forestales, así como la extensión y características de las reservas de flora y fauna.
Señaló que la falta de lluvias y la disminución de los niveles de ríos y presas agobian a México, por lo que hoy 28 estados de la República padecen niveles de sequía que van de severos a excepcionales.
Refirió que entre las entidades federativas más afectadas se encuentran Chihuahua, Coahuila, Durango, Nuevo León, Sonora, Tamaulipas y Zacatecas.
Mencionó que la falta de precipitaciones pluviales en los últimos años es parte del cambio climático que amenaza con destruir la economía de regiones enteras y desatar una crisis alimentaria que podría desplazar a más de 4 millones de personas y condenar a muerte a muchas más.
Ante este panorama, consideró pertinente tomar medidas inmediatas para “evitar que la hambruna generalizada se sume al conjunto de calamidades que ya afectan al país”.
De lo contrario --advirtió-- el costo social y económico será enorme y empeñaremos nuestro presente y futuro por generaciones.
En este sentido, puntualizó que los problemas ambientales de nuestro país no podrán ser atendidos de manera adecuada si no se vincula la producción de alimentos con la preservación de suelos, el cuidado de bosques, pastizales, así como la captación y conservación de agua.
Los productores rurales pueden conformar la mejor línea de defensa contra la falta de lluvias y la desertificación de los suelos, ya que son ellos quienes “conocen mejor la tierra y pueden llevar a cabo acciones cotidianas para garantizar que cualquier esfuerzo de conservación ambiental y mitigación del cambio climático tenga resultados, enfatizó.
La iniciativa se remitió a las comisiones de Recursos Hidráulicos y de Estudios Legislativos.
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