Número-792
- Los legisladores tienen la obligación de que la vida no se mercantilice, señala la senadora Lisbeth Hernández.
- La OCDE coloca a México en el primer lugar de violencia escolar y con un número alarmante de suicidios derivados por ese fenómeno: senador José María Martínez.
En el Senado de la República, legisladores integrantes de la Comisión de la Familia y Desarrollo Humano, junto con especialistas, abordaron los temas sobre la equidad y violencia de género en las familias, la prevención de la violencia familiar y la prevención de la violencia escolar.
La senadora Lisbeth Hernández Lecona, presidenta de dicha comisión, aseveró que la intervención de autoridades judiciales ha crecido en temas como desintegración de la familia, divorcios, pensiones alimenticias; y también en lo referente a un asunto delicado: el relativo a la maternidad subrogada, que ya se está discutiendo.
En este sentido, advirtió: tenemos la obligación de que la vida no se mercantilice, que no sea un negocio.
En el marco del Segundo Congreso Nacional de Familia y Desarrollo, Hernández Lecona subrayó que el abuso sexual infantil tiene cifras muy altas. Añadió que el hecho de que se puedan ver escenas de pornografía libremente a través de internet lastima seriamente a la niñez
Por esta razón, explicó, los legisladores ya han comenzado a analizar los contenidos que se dan en la televisión, al igual que la regulación en internet. Son temas a los que tenemos que entrarle y discutirlos.
El senador José María Martínez Martínez, secretario de la comisión, enfatizó que el sistema educativo parece ser el único que debe combatir el fenómeno del bullying. Señaló que la parte legal se construye en ese sentido, es decir, para dejar a la autoridad educativa la obligación de prevenir y erradicar la violencia escolar, cuando los factores que la originan son diversos.
Preguntó si el contexto en el que se desarrollan nuestros hijos y nosotros mismos es idóneo y si éste influye en la generación de la violencia escolar; si la convivencia escolar es la correcta, ya que antes no era grave este problema, y no era tan alarmante.
Sin embargo, Martínez y Martínez indicó que los datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) colocan a México en el primer lugar de violencia escolar; e incluso se dan un número alarmante de suicidios derivado por esa violencia.
Aseguró que esta jornada es inédita, toda vez que está generando una nueva dinámica en torno a la familia en el Senado, porque los temas tratados fortalecen a este núcleo.
Sofía Martínez Agraz, consejera legal para América Latina y Naciones Unidas de ADF Internacional, precisó que en la familia aprendemos a conocernos, relacionarnos y comunicarnos. Aunque en la familia surgen conflictos, ahí también se aprende a resolverlos adecuadamente y a evitar los malos tratos, la falta de respeto, los insultos y los golpes, explicó. Aseguró además que no es normal una conducta violenta en el ser humano.
Ingrid Tapia, especialista de Alta Especialidad en materia constitucional, electoral y civil, sostuvo que las leyes de protección contra la violencia crecieron torcidas en México, ya que cuando se hicieron normas destinadas a erradicar la violencia intrafamiliar, se hicieron creando una tipicidad que derivó del código civil y se fue al área penal, que opera bajo el sistema de querella.
Señaló que la violencia en contra de los niños, ancianos o mujeres se persigue por denuncia, lo que significa que si golpeas a un niño, entonces le pides que vaya y se queje, al igual que la mujer o al anciano, por lo que cultural y políticamente tenemos poco respeto para la familia.
En la mesa sobre Prevención de la Violencia Escolar, Úrzua Zurita Rivera, investigadora de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) México, comentó que en últimas fechas se ha visto una oleada de leyes promulgadas en casi todas entidades del país, con el fin de atender este problema.
Detalló que algunos quieren llevar el asunto exclusivamente al terreno educativo, otros al de seguridad pública, unos más al de derechos humanos, otros al económico y otros a una cuestión democrática, cuando lo importante es incrementar la convivencia escolar.
Mario Alberto Romo Gutiérrez, tallerista en temas de pedagogía familiar, dijo que la violencia en las escuelas es síntoma de lo que se ha sembrado desde hace 25 años; e indicó que la violencia en la escuela no es diferente de la que sucede en los hogares. Además, propuso establecer políticas públicas que incluyan temas como mediación familiar, conciliación de vida y trabajo, es decir, que faciliten cambios en puestos laborales, fortalezcan el vínculo escuela y familia, y generen políticas especiales en zonas de alta violencia.
Francisco González Garza, creador del Primer Observatorio de Calidad de Contenido de los Medios, habló del papel de los medios de comunicación y la violencia escolar: aseveró que comunicación, radio, televisión, smartphones, teléfonos inteligentes e internet tienen un gran impacto en la conducta de las personas. Además, pidió dar seguimiento a factores que influyen en la formación de hábitos y valores de las personas, es decir, la familia, la escuela, las iglesias, el medio ambiente y los medios de comunicación.
Al hablar del bullying, Bertha Alcocer Orozco, del Instituto Juan Pablo II, dijo que este problema no se va a terminar sin una perspectiva del fenómeno, y si cada uno de los interesados sigue funcionando como células especializadas.
Dijo que existen cuatro áreas de oportunidad sobre la prevención del bullying: realizar una investigación propia de lo que pasa en las escuelas en México, qué programas están funcionando, cómo reaccionan los maestros, alumnos y padres de familia acerca lo que se hacen para resolver esta situación.
María Emilia Montejano Hilton, especialista en derechos humanos, salud, educación y derechos de la mujer, hizo énfasis en que a los ciudadanos se nos ha manipulado, pues no sabemos nada de lo que pasa acerca de la violencia en el país; los números están manipulados y no se puede legislar correctamente sobre algo que se desconoce.
Benjamín Manzano, especialista en ciencias del Matrimonio y la Familia, indicó que este Congreso busca poner los temas de la familia y la equidad en un contexto de reflexión, para generar política pública y fortalecer a la familia mexicana.
En el marco de este Congreso, también se realizó una mesa denominada “Realidades de la Familia Mexicana”. En esta intervinieron Marisol Luna, investigadora de Flacso; Rodrigo Iván Cortes, coordinador Internacional de la Red de Acción Ética Política; Jorge Medina Delgadillo, integrante del Sistema Nacional de Investigadores Nivel I; y Fernando Pliego, del Sistema Nacional de Investigadores.
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