Número-430
- El método simplista de la evaluación, como amenaza, ha sido históricamente fallido en todos los países, considera.
- Se requieren herramientas e infraestructura adecuada para elevar la calidad educativa, afirma la legisladora de Nueva Alianza.
La senadora Mónica Arriola Gordillo presento una iniciativa para reconocer al docente como agente primordial del proceso educativo, garantizar el cumplimiento de su formación y actualización profesional, así como para corregir las insuficiencias en la regulación de las escuelas normales.
En la sesión de este miércoles, la legisladora del Partido Nueva Alianza expresó: “Basta de posicionar a los maestros como un lastre en el progreso educativo. Los únicos responsables de la situación actual y del porvenir del país somos nosotros, como Estado y como servidores públicos”.
“Todos queremos una educación de calidad, el pueblo la necesita, se la exigimos a los profesores, pero nuestra obligación es construirles el camino que los oriente en esa dirección”, expresó.
Consideró que el método simplista de la evaluación como amenaza ha sido históricamente fallido en todos los países, y cuando se garanticen las herramientas y la infraestructura adecuada que requieren los docentes en su preparación se producirán los resultados que esperamos.
De acuerdo con la propuesta que modifica la Ley General de Educación y la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, el docente es promotor, coordinador, facilitador y agente directo del proceso educativo.
Las autoridades educativas, se agrega, deben proporcionar los medios que les permita a los docentes realizar eficazmente su labor y contribuyan a su permanente actualización y profesionalización, así como reconocer las actividades co-curriculares que éstos realicen para mejorar su desempeño académico.
“Queremos la implementación urgente de programas permanentes de actualización, sobre contenidos y métodos para directivos, que cumplan con los requisitos que nosotros mismos les hemos exigido a los maestros en las evaluaciones”, reiteró Arriola Gordillo.
Además, se requiere “acabar con la insuficiencia en la regulación de las escuelas normales que ha causado el establecimiento de entidades que degradan estas instituciones de reivindicación social”.
En este sentido, propuso que los particulares que busquen instituir escuelas normales estén sujetos a lineamientos estrictos que los obliguen a cumplir con los requisitos para garantizar la formación profesional y siempre siguiendo los programas de actualización y preparación que se requieran.
Planteó la necesidad de mantener los planes y programas de estudio de la educación normal, así como de formación de maestros de educación básica, acordes al criterio de calidad contemplados en la Constitución y a los criterios de Planeación del Sistema Educativo Nacional.
La legisladora también sugirió, en la iniciativa que se turnó a las comisiones unidas de Educación y de Estudios Legislativos, establecer la obligatoriedad para las entidades federativas de atender los lineamientos que expida la Secretaría de Educación Pública en la prestación de servicios educativos y en la autorización a particulares en esta actividad.
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