La diputada Ruth Esperanza Lugo Martínez, de Acción Nacional, presentó una iniciativa que reforma la Ley General de Salud para que los médicos generales sean certificados por un colegio y así asegurar calidad en los servicios que prestan.
En la tribuna de la Comisión Permanente destacó que el 91 por ciento de las quejas interpuestas ante la Comisión Nacional de Arbitraje Médico en 2010 estuvieron relacionados con el desempeño del personal.
De las 2 mil 927 quejas que en ese año recibió la CONAMED, subrayó, 737 fueron a causa del tratamiento médico, 712 por el diagnóstico, 171 provocadas por la relación médico paciente y mil 48 por tratamiento quirúrgico.
En este contexto, señaló que para establecer servicios de salud con calidad no será posible sin la participación de los mismos médicos, por lo que es crucial el proceso de colegiación para su certificación.
“Dada la importancia de la función que los médicos generales juegan en el proceso de la prestación de servicios de salud --asentó la diputada panista-- resulta pertinente establecer mecanismos para garantizar a los usuarios que serán atendidos por personal con conocimientos actualizados”.
Con la certificación y recertificación de los médicos generales, dijo, se romperá el paradigma de que la adquisición de una cédula es prueba de que éstos tienen la capacidad para proporcionar atención a un paciente, sin importar el tiempo que haya transcurrido desde que cursó la carrera.
“Como legisladores debemos estar comprometidos a generar las condiciones que permitan que los usuarios obtengan una atención médica eficaz eficacia, ética y segura”, señaló.
La iniciativa se remitió a la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados.
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